La presi¨®n policial expande fuera de Barcelona la multirreincidencia
La situaci¨®n se repite en diversos territorios: desde el barrio de Trinitat Vella hasta el Alt Empord¨¤
La presi¨®n policial en Barcelona contra los j¨®venes multirreincidentes, que acumulan tres o m¨¢s antecedentes policiales, ha trasladado el conflicto a otros municipios de la costa catalana. En ciudades como Matar¨®, Premi¨¤ de Mar y Llan?¨¤, los vecinos han presionado, en ocasiones con violencia, hasta conseguir el desalojo de pisos ocupados por grupos a los que acusan de delinquir. ¡°Hay un problema de fondo, podemos apretarlos para que se marchen al pueblo de al lado, pero necesitamos una soluci¨®n estructural, que vaya m¨¢s all¨¢¡±, reclama el alcalde de Matar¨®, el socialista David Bote.
La situaci¨®n se repite en diversos territorios: desde el barrio de Trinitat Vella, en Barcelona, hasta el pl¨¢cido Alt Empord¨¤. Manifestaciones de ciudadanos que acaban delante de un piso ocupado que aseguran que genera problemas de convivencia e inseguridad. El ¨²ltimo caso se vivi¨® en Llan?¨¤, donde los vecinos lograron, con la mediaci¨®n de los Mossos, que los j¨®venes abandonasen el inmueble que ocupaban.
¡°Barcelona ha hecho un efecto globo¡±, explica Bote, quien asegura que una parte de los j¨®venes que se han instalado en Matar¨® (127.000 habitantes) entrando en pisos de manera ilegal llegan desde la capital catalana. Su opini¨®n se basa en que algunos de esos implicados en la delincuencia com¨²n en el municipio tienen por delinquir en Barcelona y tambi¨¦n en la presi¨®n de los Mossos despu¨¦s de que el verano pasado creciesen los delitos en Barcelona y se disparase la sensaci¨®n de inseguridad, en beneficio de otras zonas.
¡°Son itinerantes¡±, coincide el alcalde de Llan?¨¤ (4.868 habitantes), el tambi¨¦n socialista Francesc Guisset. Explica que los j¨®venes ¡°llegan rebotados¡± de otros municipios, donde les expulsa la presi¨®n policial o conocer j¨®venes. La mayor¨ªa, dice, fueron menores tutelados por la Generalitat. Fuentes policiales coinciden en que el problema de la multirreincidencia en hurtos y robos violentos se centra en mayores de edad, en la veintena, que ya no tienen ninguna protecci¨®n de la administraci¨®n.
Uno de los episodios m¨¢s delicados se vivi¨® en Premi¨¤ de Mar, cuando los vecinos apedrearon e irrumpieron en un piso ocupado por cuatro j¨®venes magreb¨ªes. El alcalde, Miquel ?ngel M¨¦ndez, de Junts per Catalunya, que ha declinado volver a hablar del tema, excus¨® a los vecinos diciendo que actuaron contra presuntos delincuentes, aunque en todo momento conden¨® que se tomasen la ley por su mano. Bote tambi¨¦n critica las llamadas ¡°patrullas ciudadanas¡±, grupos de ciudadanos que se movilizan a trav¨¦s de las redes sociales para hacer lo que consideran que la polic¨ªa no hace.
¡°Siempre respetaremos las reivindicaciones vecinales, pero hay que dejar el trabajo policial a los polic¨ªas. Por la seguridad de las personas, y porque distinguir qui¨¦n es un delincuente de qui¨¦n no lo es, es una labor policial¡±, insiste Bote, sobre las movilizaciones ciudadanas, que encuadra en un contexto de ¡°mucha incertidumbre¡± y de un ¡°repunte¡± delincuencial. El alcalde de Llan?¨¤ coincide en que lo que ha sacado a los ciudadanos a la calle es la ¡°sensaci¨®n de inseguridad¡± o ¡°la inseguridad directamente¡±. Guisset identifica tres factores que explican lo ocurrido en Llan?¨¤. Existe un problema que arrastran del verano anterior de menores que llegan en tren de Figueres y que cifra ¡°entre 20 y 40¡±. ¡°Vienen a cometer hurtos y actos de pillaje por las calles comerciales hasta la playa, con superioridad num¨¦rica¡±, explica. ¡°Causan mucho malestar e inseguridad, porque hacen gamberradas, lo que quieren y se encaran con la gente¡±.
El segundo elemento, nuevo este a?o, son las ¡°cuatro o cinco viviendas ocupadas¡± por j¨®venes migrantes. Los vecinos lo asocian con la delincuencia despu¨¦s de que en una detenci¨®n encontrasen en el interior de una de esos pisos objetos robados, cuenta el alcalde. Y por ¨²ltimo, menciona un delincuente ¡°con bastante curr¨ªculum a sus espaldas¡± que comete robos con fuerza en domicilios por la tarde y por la noche.
Cambios legales
¡±Necesitamos una herramienta clara y contundente para abordar las ocupaciones que generan un problema de convivencia¡±, insiste Bote. El Ayuntamiento de Matar¨® prepara una propuesta para modificar el C¨®digo Penal para castigar con m¨¢s dureza la multirreincidencia y modificar tambi¨¦n la ley para intervenir en los desahucios. ¡°Que se pueda abordar con m¨¢s garant¨ªas el desalojo de las ocupaciones delincuenciales¡±, reclama Bote.
Guisset niega que las personas act¨²en por motivos racistas contra los j¨®venes migrantes. ¡°Lo que reclaman de las autoridades es seguridad y orden. Es uno de los principios de la convivencia¡±, indica. Y justifica que los vecinos se han movilizado ¡°fruto del nerviosismo, la angustia y la ansiedad¡±. Pero ¨¦l, igual que Bote, repite que ese es un trabajo estrictamente policial. En Matar¨® y Llan?¨¤ la situaci¨®n est¨¢ ahora m¨¢s tranquila. ¡°Llevamos 48 horas sin ning¨²n robo, y con dotaci¨®n policial permanente¡±, cuenta el alcalde Guisset.
M¨¢s prisi¨®n preventiva
Una de las estrategias de Barcelona para frenar los robos violentos, el delito que m¨¢s inseguridad genera, es lograr prisiones preventivas. Los Mossos han elaborado un plan para luchar contra la multirreincidencia en la ciudad, y conseguir que los jueces encierren a las personas, muchas de ellas j¨®venes, que delinquen repetidamente. Semanalmente, actualizan sus bases de datos con quienes acumulan m¨¢s detenciones. Las respuestas est¨¢n siendo efectivas, indican fuentes policiales. El ejemplo es la prisi¨®n preventiva dictada por un juez para cinco j¨®venes implicados en el robo violento de un reloj, despu¨¦s de que las im¨¢genes de lo sucedido, con la v¨ªctima por el suelo, se hicieran virales.
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