Salou sin salero

El patronato de turismo de Salou tiene en marcha una campa?a de promoci¨®n en Instagram, donde recoge fotos vistosas de algunos rincones del municipio. La selecci¨®n muestra anaranjados atardeceres en el paseo mar¨ªtimo, sugestivas estampas de la playa dels Capellans o los detalles modernistas del Chalet Bonet, obra del arquitecto Dom¨¨nec Sugranyes i Gras, quien fuera disc¨ªpulo y colaborador de Gaud¨ª. El ¨¢lbum de im¨¢genes permite apreciar una caracter¨ªstica com¨²n: en el paisaje no aparece ni un alma. Salou, tan vivaracho siempre, es este verano un esbozo de naturaleza muerta. ¡°Es muy triste¡±, repite Marisa, mientras abandona la playa sacudi¨¦ndose la arena que le reboza los tobillos. ¡°Hoteles y restaurantes cerrados y tiendas sin gente¡±, lamenta cuando se le pregunta su opini¨®n sobre los efectos que ha provocado la covid-19. Su disgusto por esta temporada tan alica¨ªda sube de grado cuando la contrapone a los recuerdos de 40 a?os de veraneo en Salou. Carmen, su hermana, la complementa para confeccionar una peculiar gu¨ªa del ocio: ¡°Aqu¨ª nos lo hemos pasado muy bien y discotecas te las podemos decir todas: la Cage de Medrano, el Amadeus, el Flash back, el Pacha...¡±. Eso era antes porque ahora las discotecas est¨¢n mudas en Salou y si acaso alguna levanta voz, caso del Tropical, es para denunciar que ha sufrido 135 inspecciones en nueve meses.

El ambiente solo se encuentra a ras del mar. En las dos playas m¨¢s grandes, Ponent y Llevant, se ha fijado un tope de aforo de 13.000 personas y el ayuntamiento ha gastado 100.000 euros en una red de sensores que controlan si hay riesgo de muchedumbre en la arena. Ah¨ª destaca m¨¢s que nunca el acento ma?o, ¡°ratico¡±, ¡°vueltecica¡±, que vocean los cuantiosos paisanos aragoneses, porque el ingl¨¦s y el franc¨¦s, tan audibles otros veranos, apenas se practican ahora. De los ocho millones de pernoctaciones que acumula Salou en una temporada sin virus, un tercio las contratan forasteros brit¨¢nicos y franceses.

Xavier Avila es empresario tur¨ªstico con cuatro d¨¦cadas de experiencia, una de ellas, gozada en Ibiza. ¡°El franc¨¦s es buen turista, pero el ingl¨¦s es el mejor que hay para trabajar, gasta dinero y no se queja nunca¡±, se?ala. Tiene un popular pub, The Mucky Duck, donde suele abrevar a los grupos de turistas que se alojan en un complejo de apartamentos a medio camino de Cambrils. Este a?o los chal¨¦s est¨¢n semivacios, como el pub de Xavi. La cuarentena ordenada por el gobierno de Boris Johnson para todos aquellos que quieran entrar en el Reino Unido tras haber viajado por Espa?a ha fundido expectativas. Como las que ten¨ªa Pep Moreno, chef al mando del Deliranto, un restaurante que gan¨® su primera estrella Michelin hace unos meses y que afrontaba el verano 2020 con el ¨¢nimo de monetizar la distinci¨®n. ¡°Deliranto no es un restaurante para ni?os sino para adultos que desean vivir como ni?os¡±, afirma el cocinero Moreno.

Sin p¨²blico joven

Tener el negocio enfocado en agradar al p¨²blico infantil y juvenil tampoco garantiza, este verano, dar brincos de alegr¨ªa. Port Aventura ha tenido que recortar su horario, abre m¨¢s tarde y cierra antes, para reajustar su oferta al bajo ritmo de entradas vendidas. El parque, que tambi¨¦n ha tenido que cerrar uno de los cuatro hoteles que hab¨ªa habilitado, opera con el aforo reducido al 30% de su capacidad.

Otro ejemplo de resignaci¨®n lo ofrece Jordi, trabajador de una cafeter¨ªa situada en el paseo Jaume I, un lugar c¨¦ntrico y con privilegiadas vistas sobre la playa. ¡°Si estos, que son los que m¨¢s trabajan de Salou, tampoco tienen gente, ya me contar¨¢s¡±, dice. Cuando habla de ¡°estos¡± se refiere a sus vecinos, dos famosos establecimientos de comida r¨¢pida. De la fachada de uno de ellos cuelga una pancarta anunciando precios especiales y descuentos del 10%. ¡°Est¨¢ muy dif¨ªcil, no hay turistas¡±, se queja un comerciante de origen indio, ¡ª¡±todo el mundo me llama Jackie¡±¡ª, delante de una tienda llena de objetos playeros. Afirma pagar 7.000 euros de alquiler del local por toda la temporada pero lamenta que no le van a salir las cuentas. Muy cerca de su comercio est¨¢ el Hotel Magnolia, un establecimiento exclusivo para adultos. No acepta a ni?os porque dice querer ofrecer a sus clientes ¡°una experiencia chic alejada del bullicio y del ruido de otro tipo de hoteles¡±. Este a?o en el Magnolia se respira un silencio escrupuloso. Est¨¢ cerrado a cal y canto.

Las ra¨ªces y un punto de luz en la oscuridad

Poblaci¨®n: 27.000 habitantes. En verano crece hasta los 180.000 residentes. La comunidad aragonesa posee m¨¢s de 7.000 apartamentos.

Actividades econ¨®micas: Turismo.

Lugares para visitar: El faro y el camino de ronda, de unos 300 metros, que lo rodea. Una actividad algo contracultural en Salou es acercarse al yacimiento protohist¨®rico de La Cella. Data siglo III a.C. y podr¨ªa coincidir con la antigua ciudad de Cal¡¤l¨ªpolis, cohabitada por cartagineses, ¨ªberos y griegos.