Las fiestas mayores agravan a¨²n m¨¢s la expansi¨®n de la pandemia en Catalu?a

El c¨®ctel explosivo que ha llevado Catalu?a a la quinta ola tiene un ingrediente especial: las fiestas mayores. Las festividades de los municipios se han convertido en un factor m¨¢s para explicar el descontrol actual de la pandemia. Los ayuntamientos admiten la complejidad de garantizar las distancias en estas celebraciones masivas y algunas entidades sanitarias cuestionan la conveniencia de permitirlas en las circunstancias actuales. Catalu?a es la comunidad con la mayor tasa de contagios por 100.000 habitantes y su porcentaje de positivos en las pruebas diagn¨®sticas (14,22%) casi dobla el de la media nacional (8,38%).

¡°Con la situaci¨®n actual no celebrar¨ªamos la fiesta¡±, expone N¨²ria Arasa, regidora de Salud de Vilassar de Mar (Maresme). El municipio, de unos 20.000 habitantes, sufre como pocos el auge del coronavirus. La incidencia acumulada (IA14, 914)) triplica la de la comunidad (337) y la velocidad de propagaci¨®n (Rt) roza los 4,5 puntos. ¡°Entendemos que se han ajuntado diversas circunstancias que nos han llevado hasta aqu¨ª¡±, analiza Arasa. ¡°Se suman la verbena de Sant Joan, que se solapa con la fiesta mayor, los viajes de fin de curso de los j¨®venes, la apertura del ocio nocturno y el fin de la mascarilla obligatoria en los espacios exteriores¡±.

Los pueblos deslocalizaron las actividades para garantizar la distancia y los aforos, pero algunas actividades conllevan cierta dificultad en su cumplimiento. ¡°La idea inicial era que los conciertos fueran sentados, pero finalmente la Generalitat permiti¨® el baile¡±, explica Yulay Mart¨ªnez, regidora de Salud en El Masnou, que celebr¨® las fiestas entre el 25 y el 29 de junio. ¡°Y a la que te permiten bailar, se tiende a no mantener las distancias¡±, lamenta Mart¨ªnez. En El Masnou y en Vilassar, los fuegos artificiales se realizaron lejos de la playa para evitar as¨ª aglomeraciones. ¡°Se pod¨ªan ver desde diferentes puntos del pueblo¡±, argumentan los equipos municipales, que defienden haberse ce?ido al protocolo del Govern. ¡°Estamos tranquilos porque hemos cumplido los requisitos del Procicat¡±, concreta Mart¨ªnez. ¡°Si se hace como recomiendan, se hace bien¡±.

¡°Con la situaci¨®n actual no las realizar¨ªamos¡±, dice una regidora de Salud

La situaci¨®n epidemiol¨®gica en Sant Cugat, con una IA14 de 575, es algo m¨¢s compleja que en el resto de Catalu?a. Pero el actual rebrote, seg¨²n la regidora Gemma Aristoy, es previo a la fiesta mayor. ¡°Los CAP lo vinculan a la ¨²ltima flexibilizaci¨®n¡±, indica la responsable de Salud. Aristoy admite, sin embargo, que el municipio tiene una poblaci¨®n joven y una movilidad alta. ¡°Se pueden generar espacios de distensi¨®n por la noche, pero es una situaci¨®n que nos hemos encontrado a lo largo de los ¨²ltimos d¨ªas, no solo durante la fiesta mayor¡±. Aristoy explica que el posible efecto de las fiestas se ver¨¢ ¡°en los pr¨®ximos d¨ªas¡±.

Contra las aglomeraciones

Las aglomeraciones de las fiestas populares preocupa a M¨°nica Solanas, vocal la Sociedad Catalana de Medecina familiar y Comunitaria (Camfic). ¡°Las fiestas mayores son un peligro¡±, alerta. ¡°Entendemos que la gente tenga ganas de dejar atr¨¢s las restricciones, pero cada d¨ªa aumentan los pacientes, y con ellos, los contactos estrechos. Es una mancha de aceite que se extiende¡±. Solanas pide replantear las actividades l¨²dicas y tomar medidas para superar el actual descontrol de la pandemia. ¡°La saturaci¨®n de los CAP obliga a dejar de hacer la actividad habitual de los centros, ya sea cr¨®nica o aguda¡±, recuerda.

Algunos ayuntamientos coinciden con esta reclamaci¨®n. Mart¨ªnez aboga por recuperar la mascarilla obligatoria. ¡°Tal como estamos, es necesario, y quiz¨¢s los conciertos deben ser sentados¡±. Arasa celebra que el Govern plantee realizar medidas ¡°quir¨²rgicas¡± en algunos sectores en concreto, y Aristoy insiste en ¡°despertar la conciencia entre la ciudadan¨ªa¡±.

Las fiestas de Vilassar coincidieron con el fin de la mascarilla obligatoria, el pasado 26 de junio. ¡°Parec¨ªa que la gente ten¨ªa ganas de celebrar el fin de la mascarilla¡±, refleja Arasa. El equipo municipal lamenta que ¡°los medios y la Administraci¨®n no nos han ayudado a hacer pedagog¨ªa sobre la mascarilla¡±, pero hace un balance positivo de la actitud de los vecinos. En esta l¨ªnea, admite que hubiera preferido que el cubrebocas ¡°hubiera sido obligatorio¡± en los conciertos; y reivindica la importancia de ¡°responsabilidad individual¡± porque ¡°no se puede tener presencia policial en todas las fiestas¡±.