Colau afronta un curso marcado por las obras y el aeropuerto de El Prat
La gesti¨®n de los desacuerdos con el PSC pondr¨¢n a prueba la coalici¨®n municipal
Si tuvi¨¦ramos que resumirlo sint¨¦ticamente, el curso que empieza para la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, estar¨¢ marcado por dos abultadas carpetas. Una, las grandes obras en la ciudad (t¨²nel de Gl¨°ries, inicio trabajos del tranv¨ªa, nuevas calles y plazas en el Eixample) que deben lucir antes de fin de mandato, en mayo de 2023. Y dos, frentes que podr¨ªan calificarse coloquialmente de patatas calientes, porque, adem¨¢s de ser decisiones de calado, provocan discrepancias en la coalici¨®n entre los comunes y el PSC: el futuro del aeropuerto del Prat, la idea de una candidatura ol¨ªmpica Barcelona-Pirineus, o si la ciudad tiene o no un museo Hermitage.
Pero en la bandeja de lo pendiente tambi¨¦n hay proyectos, controversias o reformas de otros tama?os. Apretar en la construcci¨®n de vivienda, aprobar la controvertida modificaci¨®n urban¨ªstica (MPGM) del barrio de Gr¨¤cia o ampliar la recogida de basura puerta a puerta. La que sigue es la lista de tareas que aguarda a la alcaldesa y su gobierno municipal.
T¨²nel de Gl¨°ries y el tranv¨ªa. El hit del a?o ser¨¢ la finalizaci¨®n, tras m¨¢s de seis a?os de trabajo, de los dos t¨²neles para soterrar la Gran Via a su paso por Gl¨°ries. Una obra que los comenz¨® el exalcalde Xavier Trias y que ver¨¢ coches salir de la ciudad a finales de septiembre; y entrar antes que acabe el a?o. Luego habr¨¢ que terminar la plaza. A pocos metros, en la Diagonal, y tras d¨¦cadas de debate ciudadano, en oto?o est¨¢ previsto que comiencen las obras para unir las dos redes de tranv¨ªa existentes. Se comenzar¨¢ por el tramo hasta Verdaguer, pero los comunes no llegar¨¢n a tiempo de ver tranv¨ªas circular antes de las elecciones.
Superilla y trabajos por toda la ciudad. Tambi¨¦n habr¨¢ que ir a toda prisa para materializar las primeras cuatro calles (Consell de Cent, Borrell, Rocafort y Girona) y plazas de lo que Colau llama la Superilla Eixample: sacar coches de la trama de Cerd¨¤. La superilla tiene ambici¨®n a diez a?os vista, con 21 calles pacificadas. Las primeras ser¨¢n una suerte de piso piloto. En la Meridiana (de calle de Mallorca a calle de Navas) se trabaja para sacar coches y ensanchar aceras.
En otra escala, hay obras previstas en toda la ciudad. No menos de 300 en los pr¨®ximos dos a?os, entre mejoras, urbanizaciones y las que se pararon por la pandemia (carriles bici, la protecci¨®n de entornos escolares a costa del coche, reurbanizaciones, plan de Barrios). El cemento vende, saben los alcaldes. Porque da votos.
El Prat, la batalla del a?o. La ampliaci¨®n del aeropuerto ser¨¢ uno de los temas del a?o. Y adem¨¢s enfrenta a los dos socios del Ayuntamiento, como ocurre la candidatura a unos juegos de invierno y el Hermitage: los comunes muestran reticencias y el PSC es favorable. En el caso de El Prat, ning¨²n ayuntamiento tiene un papel formal. La aprobaci¨®n del plan de inversiones (el DORA en total 1.700 millones de euros, de los que 1.400 est¨¢n ya decididos) depende del Gobierno espa?ol y el escollo los 300 millones para ampliar la tercera pista sobre La Ricarda, de gran valor ambiental. Aunque el ejecutivo apruebe en septiembre el DORA, puede no concretar la cuesti¨®n este extremo. Para ello se ha formalizado una mesa pol¨ªtica y t¨¦cnica en la que s¨ª est¨¢n los ayuntamientos de Barcelona y El Prat. El plan de inversiones no se enviar¨¢ a Europa hasta que haya consenso. La batalla no ser¨¢ corta y en las cocinas hay mucho trabajo.
La candidatura ol¨ªmpica Barcelona-Pirineus y El Hermitage. En julio el Govern oficializ¨® al COE su inter¨¦s por los juegos de invierno de 2030. Colau respondi¨® que deber¨ªan pronunciarse los barceloneses con una consulta; y el PSC apunt¨® que la ciudad deber¨ªa liderar el proyecto. El Hermitage se ha convertido en largo enfrentamiento entre el Puerto y el Ayuntamiento, que ha dado largas. En mayo se habl¨® de una reformulaci¨®n del proyecto con la participaci¨®n del Liceo. El promotor, que present¨® la idea hace ocho a?os, valora acudir a los tribunales.
Proyectos que no arrancan. Ante al frenes¨ª de algunos proyectos, otros no arrancan. La remodelaci¨®n de la Via Laietana colecciona renders (im¨¢genes virtuales de proyectos). El ¨²ltimo de hace un mes y lleg¨® con el compromiso de que las obras comiencen en verano del a?o que viene. La reforma de la Rambla tiene proyecto y presupuesto (44 millones de euros) pero no fecha. Como no tiene fecha ni proyecto hincar el diente al maltrecho parque de la Ciutadella. En el caso de las Tres Chimeneas del Paral¡¤lel, est¨¢ pendiente de un acuerdo entre el consistorio y la propiedad. Y falta el Camp Nou: las obras del entorno avanzan lentamente y sobre el estadio, el club habla de mediados de 2022.
La movilidad: cuesti¨®n de consenso e inversiones. La ampliaci¨®n de la red ciclista (hay cuatro proyectos en exposici¨®n p¨²blica: Diagonal, Gran Via y Ronda Guinard¨®) es una de las patas de las pol¨ªticas de movilidad. Tambi¨¦n est¨¢n por llegar 47 radares para reducir la velocidad. El Consistorio indica que lo har¨¢n entre finales de este a?o y el siguiente. Otros proyectos requieren consenso en espacios de debate, como la idea de obligar a los usuarios de patinete a tener caso y seguro, que se llevar¨¢ al Pacto por la Movilidad.
¡®Tasa Amazon¡¯, patinetes de alquiler y ZBE. Hay dos temas de la agenda que requieren de s¨®lidas garant¨ªas jur¨ªdicas. La estudiada pero no materializada tasa Amazon, para plantar cara a los gigantes del comercio electr¨®nico. Y el concurso de los patinetes compartidos: lleva retraso y ahora la voluntad es que tenga ¨¢mbito metropolitano. No ser¨¢ en breve.
Y hay un mel¨®n que est¨¢ por ver si se abre, vista la proximidad con las elecciones: decidir si se aprietan las tuercas con las restricciones de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) o si se apuesta por un peaje urbano para reducir la contaminaci¨®n.
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