Por la v¨ªa del pacto y el acuerdo

El 1 de agosto a medianoche se terminan los peajes de la gran mayor¨ªa de las autopistas catalanas. Es el liberation day de una sociedad que ha vivido con peajes desde los a?os 60 del siglo pasado. Y no estaba escrito que este d¨ªa llegar¨ªa. Aqu¨ª lo vamos a explicar. Antes, mi opini¨®n sobre nuevos peajes o v¨ªas libres: sin duda que soy partidario de un periodo in¨¦dito donde no se tenga que pagar por circular. Es la liberaci¨®n del mal humor acumulado por tantos a?os donde los peajes han sido se?era de agravio comparativo. Y un acto de goce de lo que uno no ha podido disfrutar nunca, algo primitivo, instintivo, indispensable.

Lo mismo se puede predicar de quien no ha podido comer o tener trato sexual cuando lo ha deseado. Despu¨¦s ya se racionalizar¨¢, pero primero se tiene que cancelar el deseo reprimido. As¨ª lo entendimos los que pusimos el fin de los peajes como condici¨®n para apoyar la moci¨®n de censura contra Mariano Rajoy.

?ltima semana de mayo de 2018. El grupo parlamentario socialista registra una moci¨®n de censura contra el Gobierno de Espa?a. El candidato a la presidencia del Gobierno es Pedro S¨¢nchez. A principio de semana los n¨²meros para el ¨¦xito de la moci¨®n no salen. El PNV ha votado los presupuestos del PP y no lo ve. Los de Esquerra Republicana anuncian su voto favorable en el primer momento. En el mundo convergente ya conviven las dos pulsiones que llevaran a su implosi¨®n. Hace un par de a?os, Artur Mas ha cedido a Carles Puigdemont la presidencia de la Generalitat sin tener ni idea de quien era su sucesor, el cual pasa de ¨¦l desde el minuto cero. Ha intentado proclamar la independencia sin tener nada preparado (la independencia hecha con el trasero) y se ha largado con la rara habilidad de convertirse en un icono para una parte de la poblaci¨®n. Puigdemont es contrario a hacer caer Mariano Rajoy (cuanto peor mejor) y aborrece a los que queremos un cambio en la Moncloa con los 8 votos claves.

En la otra parte de la mesa, Jos¨¦ Luis ?balos y Santos Cerd¨¢n. All¨ª se habl¨® por primera vez de los indultos. Tumbamos a Carles Puigdemont con la complicidad de Pablo Iglesias (que le confunde) y anunciamos que votamos a cambio de nada para que no se nos acuse de autonomistas que practican el peix al cove. Pero tengo muy claro que oportunidades como estas se presentan pocas veces en la vida. Redactamos un documento no p¨²blico de compromisos de inversi¨®n en Catalu?a donde tambi¨¦n se incluye la prohibici¨®n de volver a prorrogar ning¨²n peaje.

El documento es aceptado por Pedro S¨¢nchez antes de empezar el debate, tiene los ocho votos. El viernes 1 de junio Espa?a tiene nuevo presidente y empieza la cuenta atr¨¢s para el fin de los peajes. Gran paradoja: Catalu?a libre de peajes por la v¨ªa del pacto y el acuerdo. Por liberaciones, estas. Los independentistas partidarios de mantener a Rajoy no han presentado resultados de sus jugadas maestras. Cosas que pasan.