El Govern se refugia en ¡°el esp¨ªritu del 1-O¡± tras descartar un refer¨¦ndum esta legislatura

El independentismo catal¨¢n celebra este viernes el cuarto aniversario de lo que considera su mayor gesta en democracia: la celebraci¨®n del refer¨¦ndum unilateral de independencia del 1 de octubre. Una votaci¨®n declarada ilegal por el Tribunal Constitucional, pero que para una parte del secesionismo implica ya un mandato para la separaci¨®n de Espa?a. La conmemoraci¨®n de ese gran acto de unidad entre partidos y parte de la sociedad civil se ha visto empa?ada precisamente por la divisi¨®n entre esos actores. Un desacuerdo se evidenci¨® este jueves, con la CUP qued¨¢ndose sola cuando ped¨ªa poner fecha a un refer¨¦ndum (pactado o no) para antes de que termine la legislatura. En el acto oficial de la Generalitat, el president Pere Aragon¨¨s ha pedido este viernes ¡°recuperar el esp¨ªritu del 1-O¡± y se ha comprometido a continuar el camino hacia la independencia ¡°sin renunciar a nada¡±.

El l¨ªder catal¨¢n, flanqueado por sus consejeros, ha le¨ªdo una declaraci¨®n institucional desde una de las sedes del Servicio Catal¨¢n de Salud que alberg¨® un punto de votaci¨®n hace cuatro a?os. El tambi¨¦n coordinador nacional de ERC ha asegurado que su Gobierno ¡°es heredero del 1-O¡± y se compromete a ¡°culminar el camino hacia la independencia¡±, una idea que ha repetido ya tanto en su debate de investidura como en el de pol¨ªtica general que se ha celebrado esta semana en el Parlament. Para Aragon¨¨s, esa ruta para lograr la rep¨²blica pasa primero por ¡°la negociaci¨®n con el Estado¡±. Pero ha dejado otra vez claro que la v¨ªa unilateral, aunque est¨¦ aparcada, sigue ah¨ª: ¡°Pero no solo eso. No renunciamos a nada¡±, ha a?adido.

El pasado jueves, la puesta en el congelador por un refer¨¦ndum unilateral ya hab¨ªa quedado clara. Ni ERC, ni Junts apoyaron este jueves la propuesta de resoluci¨®n de la CUP que ped¨ªa celebrar un refer¨¦ndum antes de 2025. Los republicanos se abstuvieron y en Junts votaron en contra. La divisi¨®n en la estrategia independentista quedaba n¨ªtida una vez m¨¢s, con los de Carles Puigdemont defendiendo que solo un refer¨¦ndum acordado puede alterar el ¡°mandato del 1 de octubre¡±. Y la portavoz de los republicanos, Marta Vilalta, reprochando a Junts que abogaran por pactar los t¨¦rminos de la votaci¨®n, pero boicotearan constantemente la mesa de di¨¢logo abierta con el Ejecutivo central.

Ante este disenso, Aragon¨¨s ha optado por refugiarse en la idea de recuperar la unidad que permiti¨® hacer posible pol¨ªtica y log¨ªsticamente la votaci¨®n unilateral de hace cuatro a?os y ha recordado a las personas que recibieron las fuertes cargas policiales durante el operativo del Gobierno para impedirla. ¡°Constatamos que este pa¨ªs, cuando trabajamos juntos, somos imparables¡±, ha asegurado. ¡°Catalu?a volver¨¢ a votar¡±, ha remachado, porque el refer¨¦ndum es ¡°la soluci¨®n inevitable¡±.

El expresident Quim Torra, por su parte, ha dado un contrapunto a ese mensaje. Desde su cuenta de Twitter, ha insistido en la necesidad de trazar ya un plan que permita la secesi¨®n. ¡°El 1-O es una fecha. Nada habr¨ªa pasado si no se hubiera fijado un d¨ªa para el embate. Y el 1-O es un plan, trabajando durante muchos meses (y que solo fall¨® porque no defendimos la rep¨²blica proclamada)¡±, ha escrito en su cuenta de Twitter.

El refer¨¦ndum ilegal desemboc¨® en la declaraci¨®n unilateral de independencia y en la aplicaci¨®n in¨¦dita del art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n, mediante el cual el Ejecutivo central de Mariano Rajoy intervino el autogobierno en Catalu?a. El president destituido Carles Puigdemont huy¨® a B¨¦lgica para evitar la justicia mientras que otros consejeros, como el exvicepresident Oriol Junqueras, se quedaron en Espa?a y terminaron siendo juzgados y condenados por el Tribunal Supremo por sedici¨®n y, en algunos casos, malversaci¨®n. Las elecciones posteriores al 155 marcaron el giro estrat¨¦gico de ERC hacia una v¨ªa m¨¢s posibilista, mientras que los de Puigdemont optaron por una de m¨¢s confrontaci¨®n. Despu¨¦s de la moci¨®n de censura a Rajoy, donde participaron los independentistas, y con el Gobierno de Pedro S¨¢nchez, se abri¨® una nueva etapa de di¨¢logo.