Una comedia de abrazos para recuperar lo perdido

El humor ¨¢cido que la escritora sueca Christina Herrstr?m destila en su comedia Erling nos permite mirar con una sonrisa nada inocente el retrato de las ilusiones perdidas y los deseos latentes que llevan en su mochila emocional Rosa y Juan, dos ancianos que fueron pareja en su juventud y, 40 a?os despu¨¦s, se reencuentran de manera fortuita. Buen punto de partida de una comedia con toques de melodrama adaptada y dirigida con limpios trazos por Mag¨¹i Mira, quien, con acierto y buen olfato comercial, la ha titulado El abrazo. Mar¨ªa Galiana, Juan Meseguer y Jimmy Roca son los notables protagonistas del montaje, que puede verse en el Teatro Goya de Barcelona hasta el 28 de noviembre.

Ver en acci¨®n a Mar¨ªa Galiana y Juan Meseguer, dos grandes y veteranos actores que, nada m¨¢s pisar el escenario, contagian su pasi¨®n vital por el teatro, es uno de los regalos que ofrece El Abrazo, una producci¨®n de Jes¨²s Cimarro y Pentaci¨®n Espect¨¢culos estrenada en marzo en el Teatro Bellas Artes de Madrid y que llega al Goya con un cambio en el reparto: el actor y core¨®grafo Jimmy Roca asume el papel de Erling, el joven que aporta una luz ins¨®lita y sobrenatural a la vida cotidiana de los ex amantes.

?Y si los sue?os de juventud se hicieran realidad? La materializaci¨®n de ese deseo entra?a sus riesgos, y esa es la gracia de una trama original; Rosa sigue soltera y Juan se cas¨® y tuvo hijos y nietos, pero en el abrazo del reencuentro renace el amor que desperdiciaron en su juventud. La aparici¨®n del joven Erling lo cambia todo, trastornando una existencia en apariencia pl¨¢cida.

En su versi¨®n, dirigida con buen ritmo, Mag¨¹i Mira ha querido que el joven que afirma ser el hijo deseado de Rosa y Juan sea negro, sumando a la trama, de forma tangencial, el tema de los prejuicios raciales y el rechazo al inmigrante. Pero en su esencia, lo que Herrstr?m pone a prueba es, y as¨ª lo subraya la directora del montaje, ¡°nuestra oxidada capacidad de amar¡±. De factura amable, el texto, sin ser nada del otro mundo, sirve en bandeja de plata el lucimiento de sus protagonistas.

Ver en acci¨®n a dos grandes y veteranos actores es uno de los atractivos de la obra

Galiana y Meseguer dan vida a sus personajes con el tono y el temperamento justo que adereza unos di¨¢logos frescos con certeras puyas que delatan el ego¨ªsmo y el fatal conformismo que arruin¨® su breve idilio de juventud. Muy bien Jimmy Roca, que perfila la felicidad del personaje con simpat¨ªa, guasa y naturalidad.

Ahora que la pandemia permite recuperar la emoci¨®n del abrazo, da gusto ver c¨®mo se abrazan y bailan Galiana y Meseguer al comp¨¢s de un cl¨¢sico de Leonard Cohen tan maravilloso como Take this walz, tributo al genio de Lorca que funciona como banda sonora ideal de una obra sobre las oportunidades perdidas que invita a interrogarnos sobre nuestra capacidad de amar.