Ganar tiempo ante ERC

Esperada. Necesaria. Insuficiente. La destituci¨®n de Paz Esteban al frente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) es el gesto m¨ªnimo que los socios independentistas catalanes del PSOE esperaban del Gobierno central por el esc¨¢ndalo del espionaje. La direcci¨®n de Esquerra Republicana de Catalunya, aliado clave de los socialistas en el Congreso de los Diputados, gana margen de maniobra ante sus bases para evitar la ruptura total con el Gobierno que pregonan sus sectores m¨¢s recalcitrantes, siempre volubles a las llamaradas que emanan de la morada belga de Carles Puigdemont. Hay margen para volver a hablar.

El cese conocido hoy es solo una de las tres condiciones que ha fijado Esquerra Republicana y que este martes ha se?alado su presidente, Oriol Junqueras, en una entrevista en EL PA?S. Siempre mejor informado de lo que muchos creen incluso en su partido, Junqueras ya hab¨ªa rehuido en la entrevista pedir ninguna cabeza concreta. Sab¨ªa que, al menos por ahora, la de la ministra de Defensa era inalcanzable. Y como tal, ha optado por pedir responsabilidades en gen¨¦rico, dejando para otros actores y para Podemos la petici¨®n de cese de Margarita Robles. La cabeza de Paz Esteban, pol¨ªticamente menos gravosa para S¨¢nchez, permite ganar tiempo para que el Gobierno atienda las otras dos peticiones: dar transparencia a lo ocurrido y garantizar que no vuelve a ocurrir.

El objetivo de ERC ahora es intentar la desclasificaci¨®n de las ¨®rdenes de espionaje del CNI que aval¨® el Tribunal Supremo. Quiere saber qui¨¦n orden¨® el espionaje a una veintena de l¨ªderes independentistas. Tambi¨¦n intentar¨¢ reformas legislativas empezando por la ley de Secretos Oficiales y la que regula el funcionamiento del CNI, que considera desfasadas.

Y lleguen o no a buen puerto estas reformas, mientras se negocian los cambios, la legislatura puede continuar. El Gobierno sab¨ªa que ERC no quer¨ªa dinamitar todos los puentes. El descuelgue republicano en la votaci¨®n de las medidas contra la crisis provocada por la guerra en Ucrania fue uno m¨¢s de los baches a los que socialistas y republicanos ya se han acostumbrado a superar tras a?os aguantando su particular matrimonio de conveniencia. Pero ya nadie era capaz de predecir si los da?ados amortiguadores de su carroza nupcial aguantar¨ªan otro desaguisado tan grande.

Con menos nervios, ahora los republicanos pueden intentar esgrimir ante sus sempiternos rivales de Junts que su estrategia de negociaci¨®n comienza a dar resultados. Junqueras ya ha dejado claro en la entrevista con este peri¨®dico que sigue apostado por la mesa de di¨¢logo con el Gobierno para resolver la cuesti¨®n catalana, por m¨¢s que esta haya quedado congelada los ¨²ltimos d¨ªas y no haya dado resultados hasta la fecha. Y, sin duda, los dos gobiernos tendr¨¢n que hablar, y no precisamente de cuestiones abstractas. Hay incendios en marcha. Para la Generalitat es vital, y ahora de m¨¢xima urgencia, encontrar la manera de encajar la sentencia del 25% de castellano en la escuela. Y aqu¨ª tiene un peque?o pero no desde?able margen de maniobra el Ministerio de Educaci¨®n a trav¨¦s de la Alta Inspecci¨®n, a la que la justicia ha encargado que vele por la ejecuci¨®n de la sentencia. ERC no parece dispuesta a desaprovechar esta oportunidad.

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