La justicia estrecha el cerco pol¨ªtico sobre Laura Borr¨¤s
Una nueva notificaci¨®n judicial sobre su procesamiento por corrupci¨®n compromete a la presidenta del Parlamento catal¨¢n y ERC baraja dejarla caer a riesgo de romper el Govern
Se redobla la presi¨®n sobre Laura Borr¨¤s y aumenta la incertidumbre sobre su continuidad como presidenta del Parlament de Catalu?a. La dirigente independentista est¨¢ a un paso de sentarse en el banquillo de los acusados por diversos delitos de corrupci¨®n relacionados con su etapa al frente de la Instituci¨® de les Lletres Catalanes (ILC). El cerco judicial se estrecha y su posici¨®n pol¨ªtica queda en entredicho, justo cuando acaba de estrenar la presidencia de Junts per Catalunya, en sustituci¨®n de Carles Puigdemont.
El Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC) ha procesado a Borr¨¤s por malversaci¨®n, prevaricaci¨®n, fraude y falsedad, en un auto muy similar al que ya dict¨® el pasado marzo. Un auto que fue recurrido por las defensas. En estos meses, uno de los cuatro investigados ¡ªel funcionario de la ILC Roger E.¡ª ha declarado y ha aportado al tribunal archivos de audio e informes de auditor¨ªa que ponen a¨²n m¨¢s contra las cuerdas a la dirigente de Junts per Catalunya. Borr¨¤s ve c¨®mo se le confirma aquel escenario de marzo, con un pie en el juicio y pendiente de la acusaci¨®n de la Fiscal¨ªa.
La nueva resoluci¨®n se hizo p¨²blica este mi¨¦rcoles, cuando terminaba el pleno del Parlament. Desde el lugar m¨¢s destacado de la mesa, la presidenta sigui¨® administrando los turnos de palabra y dirigiendo la votaci¨®n del decreto ley trabajado a toda prisa en el Govern para eludir la sentencia judicial que obliga a prestar un 25% de clases en castellano en las escuelas catalanas. En Com¨² Podem, como ya estaba previsto, prest¨® el apoyo necesario a Esquerra y Junts para poder validar la norma en la votaci¨®n.
Tan pronto como termin¨® la sesi¨®n, el inter¨¦s qued¨® fijado en la presidenta de la c¨¢mara. Borr¨¤s sali¨® del hemiciclo y se par¨® a departir en un corrillo donde se mezclaban algunas personas de su c¨ªrculo de confianza, caso del diputado Francesc de Dalmases y de la tambi¨¦n diputada y secretaria de la mesa del Parlament, Aurora Madaula. Con ellos se junt¨® Jaume Alonso-Cuevillas, que fue abogado de Puigdemont y ejerce como catedr¨¢tico de Derecho Procesal. La conversaci¨®n tuvo lugar en la zona donde se acostumbran a concentrar varias c¨¢maras de televisi¨®n y medios de comunicaci¨®n, pero Borr¨¤s no hizo ninguna valoraci¨®n de la resoluci¨®n judicial. Ahora est¨¢ m¨¢s cerca de tener que dejar su esca?o como diputada en el Parlament. En caso de condena a penas de inhabilitaci¨®n, la dirigente de Junts tendr¨ªa que aparcar (aunque fuese temporalmente) su carrera p¨²blica. Por la v¨ªa administrativa, sin embargo, el final de su trayectoria puede estar a¨²n m¨¢s cerca.
El art¨ªculo 25 del reglamento del Parlament regula la suspensi¨®n de los derechos y deberes de los diputados. El apartado 4 fija que cuando un diputado est¨¦ implicado en delitos de corrupci¨®n, y sea firme la fase de apertura de juicio oral, procede que la mesa acuerde la suspensi¨®n de sus deberes y derechos parlamentarios ¡°de manera inmediata¡±. En los ¨²ltimos meses, Junts ha tratado de convencer a Esquerra y a la CUP para retocar el precepto. Tambi¨¦n ha intentado convencer a sus socios de que su causa no puede enmarcarse dentro de un delito de ¡°corrupci¨®n¡± y que, por lo tanto, no se le puede aplicar el art¨ªculo 25.4. De momento, sin ¨¦xito. Borr¨¤s alega que su papel de l¨ªder independentista la se?ala como objetivo de la ¡°represi¨®n¡± del Estado y alienta una persecuci¨®n judicial contra ella. Un argumento que no convence a Esquerra. Pese a asumir que dejar caer a Borr¨¤s en una inhabilitaci¨®n podr¨ªa ser el hachazo definitivo para agrietar el Govern, fuentes del partido republicano ponen de relieve que el supuesto que pesa sobre la l¨ªder de Junts escapa a una causa general contra el independentismo. Por ello no descartan apoyar que se le aplique el reglamento una vez se abra juicio oral contra la presidenta.
Este mi¨¦rcoles, los dos partidos que son socios en la Generalitat escenificaron buena sinton¨ªa en el pleno, incluso con insinuaciones de Junts para aceptar sentarse en la mesa de di¨¢logo que ERC tiene con el PSOE. Sin embargo, en Esquerra no se pasa por alto que Junts tiene abierto un proceso interno para evaluar la conveniencia de seguir formando parte del Govern. La presentaci¨®n del escrito de acusaci¨®n de la Fiscal¨ªa marcar¨¢ un punto de inflexi¨®n. El ministerio p¨²blico previsiblemente solicitar¨¢ penas de prisi¨®n e inhabilitaci¨®n para la presidenta de la c¨¢mara catalana.
Desde su llegada al frente de la ILC en 2013, Borr¨¤s presuntamente fraccion¨® de forma artificial contratos para adjudic¨¢rselos a dedo a un amigo suyo, el inform¨¢tico Isa¨ªas H., con el que hab¨ªa colaborado anteriormente. El importe pagado por la instituci¨®n cultural de la Generalitat al inform¨¢tico supera los 300.000 euros. El magistrado Josep Segu¨ª concluye que, una vez practicadas las ¨²ltimas diligencias de investigaci¨®n ¡ªincluida la declaraci¨®n de Roger E.¡ª hay indicios para afirmar que Borr¨¤s defraud¨® al ente p¨²blico que promueve la literatura catalana. Los correos electr¨®nicos que intercambiaron Borr¨¤s e Isa¨ªas H. son la principal prueba de cargo en la causa.
A petici¨®n de Borr¨¤s, el inform¨¢tico confeccion¨® presupuestos ficticios que puso a nombre de otras empresas y personas f¨ªsicas (falsedad documental). El tribunal considera que tambi¨¦n se ha producido un fraude en la administraci¨®n y un delito de malversaci¨®n porque las facturas presentadas por Isa¨ªas y abonadas por la ILC ¡°se hac¨ªan con criterios arbitrarios¡±, lo que pudo suponer un perjuicio para la administraci¨®n.
Puedes seguir a EL PA?S Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.