Ayuntamientos catalanes asfixiados por la factura de la luz: ¡°Tendremos que apagar unas horas las luces de Navidad¡±
El aumento imprevisto del gasto energ¨¦tico desequilibra las cuentas municipales y muchos consistorios preparan medidas de ahorro
El Ayuntamiento de Terrassa ten¨ªa presupuestado cuatro millones para pagar la factura de la luz este 2022. Calcula que acabar¨¢ pagando 10,5 por la subida del precio. En paralelo, ha dejado de ingresar cuatro millones despu¨¦s de que el Tribunal Constitucional anulara el impuesto de plusval¨ªa -que se paga al vender, heredar o recibir en donaci¨®n una vivienda y que recaudaban los ayuntamientos-, lo que ha creado un agujero de diez millones que la tercera ciudad de Catalu?a por habitantes intenta gestionar. Con el presupuesto cerrado, solo se puede generar gasto bajo autorizaci¨®n y el consistorio analiza con qu¨¦ partidas conseguir liquidez. ¡°Terrassa no tiene problemas para pagar las facturas, pero tenemos que dejar de hacer cosas¡±, admite el teniente de alcalde de Servicios Generales, Isaac Albert.
El encarecimiento de la factura de la luz est¨¢ desequilibrando las cuentas municipales. Los ayuntamientos soportan elevadas facturas el¨¦ctricas: alumbrado p¨²blico, escuelas, centros c¨ªvicos, equipamientos culturales y deportivos¡ El recibo del gas tambi¨¦n se ha disparado, lo mismo que el precio del combustible, que afecta a las flotas de veh¨ªculos policiales, transporte p¨²blico o recogida de basuras. Las medidas de ahorro -placas solares, uso de bombillas LED- est¨¢n en la agenda de los municipios, pero muchos se ven obligados a acciones para recortar el consumo de forma inmediata.
Terrassa ya se ha puesto a mirar las cuentas y trata de hacer equilibrios para cuadrar el desajuste: ha echado mano del super¨¢vit de 3,5 millones del a?o pasado y ha pedido una aportaci¨®n de dos millones a la funeraria, una empresa municipal que da beneficios. ¡°Tambi¨¦n hemos pedido a todas las ¨¢reas que las partidas que no toquen las partidas que no han gastado hasta ahora, para destinarlas a pagar la factura el¨¦ctrica¡±, se?ala Albert, que descarta devolver recibos. ¡°Es imposible dejar de pagar la factura de la calefacci¨®n, antes dejaremos de asfaltar una calle¡±, a?ade.
¡°Todos los ayuntamientos est¨¢n preocupados. Por la luz, pero tambi¨¦n por el gasoil y el aumento del precio de los materiales. Con 100.000 euros, ahora solo puedes asfaltar la mitad de metros de calle que antes¡±, constata Adam Tom¨¤s, miembro de la Federaci¨®n de Municipios de Catalu?a (FMC). La Asociaci¨®n Catalana de Municipios (ACM) admite tambi¨¦n una ¡°situaci¨®n compleja¡±, en especial en las instalaciones deportivas que cuentan con piscinas -seguramente deber¨¢n bajar la temperatura del agua- y en los campos de f¨²tbol.
La factura que crece
Barcelona, Badalona o Terrassa contratan directamente el suministro de luz. Otros, los que lo delegan en los entes municipalistas y su central de compras, han tenido precios m¨¢s econ¨®micos. Pero solo hasta el verano, cuando se renovaron tarifas. Las facturas se han duplicado. ¡°Han pasado un a?o sin este problema, pero ahora empiezan a estar preocupados¡±, admite la ACM.
En Amposta (Tarragona) ya han topado con el problema. ¡°La factura del hospital municipal ha pasado de 40.000 a 90.000 euros; la de la residencia, de 15.000 a 40.000. Pero en lugares tan sensibles no puedes limitar la climatizaci¨®n¡±, constata Adam Tom¨¤s, tambi¨¦n alcalde de esta poblaci¨®n. Aqu¨ª han apostado por apagar las luces de los edificios p¨²blicos y de los elementos patrimoniales por la noche.
El alcalde de Matadepera (Barcelona), Nil L¨®pez, admite que se da ¡°la tormenta perfecta¡±: la factura se ha duplicado para los 123 kil¨®metros de calles que deben iluminar. Lo mismo pasa con el gas en un municipio donde muchos edificios tienen caldera de este combustible. Los impuestos de plusval¨ªa han pasado de dos millones anuales a 300.000 euros. No hay suelo industrial ni empresas instaladas que generen nuevas tasas. ¡°Se da la paradoja de tener una la poblaci¨®n con las rentas m¨¢s altas de Catalu?a, pero un ayuntamiento pobre, porque no recaudamos muchos impuestos¡±, lamenta L¨®pez. Para contener el gasto, el consistorio prev¨¦ cerrar un d¨ªa a la semana las dependencias del ayuntamiento, hacer teletrabajo y unas fiestas m¨¢s contenidas: ¡°Tendremos que apagar unas horas las luces de Navidad¡±.
En Sabadell se plantean una medida similar, ¡°m¨¢s como un gesto hacia la ciudadan¨ªa, ya que son luces LED y consumen poco¡±, apunta su alcaldesa Marta Farr¨¦s. La ciudad participa de la central de compras de la ACM, pero aun as¨ª su factura de luz pasar¨¢ de 4,8 millones en 2021 a seis este a?o. ¡°Nos preocupan mucho las facturas de invierno. A corto plazo se pueden pagar, pero, si se perpet¨²a esta situaci¨®n, el super¨¢vit y los ahorros que tenemos se acabar¨¢n¡±, admite la edil.
Badalona contrata directamente con la comercializadora, pero afronta un problema administrativo: en todo 2022 no ha recibido una sola factura y esperan que no les llegue de golpe. ¡°Aunque sea nueve meses tarde, sabemos que nos llegar¨¢ la subida de precios y no tenemos dinero suficiente¡±, asume la concejal de Medio Ambiente, Rosa Trenado. Badalona prev¨¦ que la partida actual (seis millones) se duplica, as¨ª que deber¨¢ gastar el remanente y ampliar el presupuesto. El municipio ha creado una comisi¨®n para estudiar medidas de ahorro, como cambiar los turnos de limpieza a horas con luz natural.
Barcelona, con m¨¢s recursos y margen de maniobra, prev¨¦ que tambi¨¦n se duplique el importe de la factura y ven la situaci¨®n con ¡°preocupaci¨®n¡± e ¡°incerteza¡±. En abril ya modificaron el presupuesto y pronto lo volver¨¢n a hacer, pero prev¨¦n solucionarlo con el fondo de contingencia, mientras tambi¨¦n preparan un paquete de medidas para reducir el consumo.
Se acerca el invierno y los municipios son conscientes que tendr¨¢n que bajar los termostatos, pero entre tantas dificultades tambi¨¦n hay quien piensa que no hay mal que por bien no venga. ¡°Ha tenido que venir esta subida de la luz para que las administraciones nos pongamos las pilas y cambiemos el modelo energ¨¦tico y de consumo¡±, zanja el alcalde de Amposta.
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