Terrorismo y alta traici¨®n: la enmienda de la discordia entre Junts y ERC

La decisi¨®n de Junts per Catalunya de votar en contra de la ley de amnist¨ªa, el pasado martes, ha sido todo un torpedo a los planes del PSOE para la legislatura. El partido de Carles Puigdemont, desde el minuto en que decidi¨® tomar la v¨ªa de la negociaci¨®n, advirti¨® de que su objetivo era avanzar en su agenda y no garantizar la estabilidad del Gobierno de Pedro S¨¢nchez. Por tanto, en sus filas insisten en que no han hecho nada sobre lo que no hubieran advertido antes y afirman que, con el retorno del texto de la amnist¨ªa a la Comisi¨®n de Justicia, esperan cerrar la brecha abierta por las maniobras judiciales e incluir en el articulado los delitos de terrorismo y alta traici¨®n y que han puesto el foco en el expresident. Esquerra no comparte ese camino, pero evita un choque p¨²blico con sus exsocios para no a?adir m¨¢s presi¨®n al ver la negociaci¨®n entrar en ¡°una zona de riesgo¡±. La discordia entre ambas partes seguir¨¢ marcando la incierta negociaci¨®n de la enmienda que ahora se abre.

El post en X, la antigua Twitter, en el que Puigdemont detall¨® las razones de su formaci¨®n para votar en contra toc¨® pr¨¢cticamente todas las teclas del enredo jur¨ªdico-pol¨ªtico. Menos una: no hay ninguna referencia a Esquerra, que es no solo la otra formaci¨®n donde m¨¢s personas se ver¨ªan cobijadas por la amnist¨ªa, sino que su sinton¨ªa es necesaria de cara a facilitar que una nueva operaci¨®n pactista llegue a buen puerto. Junts y ERC siguen sin crear un frente com¨²n de negociaci¨®n y nada hace pensar que la nueva situaci¨®n lo facilite. Todo lo contrario: aunque no se levante la voz p¨²blicamente, en las filas republicanas creen que es cada vez m¨¢s clara la diferencia de estrategias.

¡°Est¨¢ claro que aqu¨ª a unos los mueve la t¨¢ctica y que otros tenemos estrategia¡±, defiende un alto cargo de los republicanos. En las filas de los liderados por Oriol Junqueras creen que Junts le ha hecho mucho da?o a la amnist¨ªa con sus cambios de discurso respecto a la solvencia de los textos que se han ido pactando con el PSOE. Por ejemplo, la menci¨®n al terrorismo o de la vinculaci¨®n con la violaci¨®n de derechos humanos. O con el abogado Gonzalo Boye, vendiendo la idea ¡°m¨¢gica¡± de que existe una enmienda que puede resolverlo todo, que es como ERC lee la entrevista que concedi¨® a Vilaweb el pasado fin de semana e hizo saltar todo por los aires. ¡°A Junts no le interesaba el [caso] Tsunami hasta que [el juez de la Audiencia Nacional Manuel Garc¨ªa Castell¨®n] apunt¨® directamente a Puigdemont¡±, agrega esa voz, dando a entender que se modula la ley de acuerdo a cada momento.

En las filas de los republicanos sent¨® especialmente mal la acusaci¨®n del n¨²mero dos de Junts, Jordi Turull, cuando a principio de noviembre del a?o pasado critic¨® a los republicanos por negociar una amnist¨ªa ¡°para vips¡± y asegur¨® que su partido trabajaba para que realmente cobijara a activistas independentistas de base. La forma como se han desarrollado los acontecimientos, explican en ERC, muestran que en Junts todo se modula sobre el cobijo que tenga Puigdemont. ¡°Marta Rovira, ?qu¨¦ ha dicho? ?Se queja? No. Negocia sin ruido¡±, recuerda otra voz autorizada de los republicanos, que contrapone la actitud de ambos l¨ªderes. En privado, le consta a este diario, la secretaria general de los republicanos, huida en Suiza, ha verbalizado que su situaci¨®n personal no ser¨ªa un escollo para sacar adelante la amnist¨ªa.

Puigdemont, en su mensaje, agradece al PSOE y a Sumar su predisposici¨®n para pactar la amnist¨ªa, pero en ERC creen que Junts pasa por alto el capital pol¨ªtico que se ha dejado el propio Pedro S¨¢nchez en toda la negociaci¨®n. Si ya el desgaste con la votaci¨®n de los reales decretos hab¨ªa sido duro, el que se derivar¨¢ de solo tener que reabrir el texto de la amnist¨ªa en la Comisi¨®n de Justicia puede ser letal. Por eso, fuentes de la presidencia de la Generalitat expresan su temor de entrar en una ¡°zona de riesgo¡± para conseguir la amnist¨ªa y enviar a la papelera uno de los puntos centrales en su programa pol¨ªtico.

¡°Quitas el terrorismo y la alta traici¨®n de las exclusiones y tema resuelto. Los jueces ya no pueden inventar m¨¢s¡±, defiende una voz cercana al expresident, de cara a la negociaci¨®n del texto en la Comisi¨®n y que, seg¨²n el Reglamento del Congreso, tendr¨¢ m¨¢ximo un mes de debate adicional antes de volver al pleno. Los republicanos remarcan que, ante la monta?a rusa de Junts sobre el articulado, ellos han sido rectil¨ªneos en la defensa de un texto que ven¨ªan robusto aunque siempre mejorable. Pero ven complicada la nueva negociaci¨®n en dos campos. Primero, actuar reactivamente ante lo que haga una parte de la judicatura en su ¡°cruzada contra el independentismo¡± implica ¡°entrar en una espiral que no acaba nunca¡±. Segundo, creen que es un error que sea el propio secesionismo el que asuma el marco mental del terrorismo y la alta traici¨®n que, hasta el d¨ªa de hoy, jam¨¢s hab¨ªan estado en la mesa.

Imagen de formaci¨®n responsable

En Esquerra tambi¨¦n creen que el PSOE ha vuelto a tener una experiencia que les muestra que son ellos y no Junts con quien realmente se puede negociar y llegar a acuerdos, sin el temor a golpes de tim¨®n de ¨²ltimo minuto. Los republicanos se han conjurado para mantener una imagen de formaci¨®n responsable y que no reh¨²ye a las adversidades y, en este caso, creen que se ha logrado transmitir esa idea. La gran duda es si ser¨¢ ¨²til de cara a unas elecciones catalanas en ciernes y si convence m¨¢s que la escenificaci¨®n de exigencia m¨¢xima de Junts.

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