Se ofrece okupa con experiencia para desalojar inquilinos
La Guardia Civil detiene a dos miembros de una empresa especializada en desalojos que ofrec¨ªa una intrusa para acabar con contratos de renta antigua o con un largo historial de impagos
Una empresa de seguridad especializada en el desalojo de viviendas okupadas ten¨ªa a una okupa en n¨®mina. La empleaban para acometer desahucios expr¨¦s ilegales, solicitados por propietarios de inmuebles que ten¨ªan problemas de impagos con sus inquilinos o contratos de arrendamiento de renta antigua. La empresa acechaba a los arrendatarios hasta que sal¨ªan de sus casas, met¨ªa a la okupa falsa, cambiaba la puerta y la cerradura y se ofrec¨ªa como mediadora ficticia entre las tres partes. Due?o y okupa llegaban a un acuerdo instant¨¢neo y el inquilino, leg¨ªtimo morador de la vivienda, se quedaba en la calle y sin posibilidad de volver a corto plazo. La Guardia Civil de Villajoyosa (Alicante) ha detenido al due?o de la empresa y a la supuesta intrusa, que se reparten los supuestos delitos de pertenencia a grupo criminal, coacciones, denuncia falsa, allanamiento de morada y contra la inviolabilidad del domicilio. Dos propietarios de viviendas y otro trabajador de la misma firma est¨¢n siendo investigados, imputados por los mismos delitos.
La investigaci¨®n comenz¨® en agosto de 2021, en el tur¨ªstico municipio alicantino, aunque se han detectado casos en, al menos, tres ciudades espa?olas. Una mujer que pagaba un alquiler muy bajo, de renta antigua, se encontr¨® al volver a su domicilio una puerta nueva, con extremas medidas de seguridad, de las que se conocen en el sector como antiokupas. Al no poder acceder, denunci¨® los hechos y, tras las primeras pesquisas, los agentes descubrieron que entre arrendador e inquilina exist¨ªa un litigio por la larga duraci¨®n del contrato en vigor, seg¨²n explican fuentes del Instituto Armado. El propietario, un hombre de 69 a?os, declar¨® que hab¨ªa contratado a una empresa como mediadora en desalojos, pero que, al llegar al inmueble, se hab¨ªa encontrado a una persona en su interior distinta a la inquilina habitual. Seg¨²n el relato del due?o, la okupa aleg¨® que la moradora le hab¨ªa vendido las llaves y le hab¨ªa asegurado que el piso era propiedad de un banco. Propietario y okupa llegaron a un acuerdo inmediato y firmaron un contrato privado por el que la intrusa acced¨ªa de manera voluntaria al abandono del inmueble. La inquilina no pudo volver.
Las sospechas se dispararon cuando los agentes estudiaron casos similares en su base de datos. El sistema empleado para la desokupaci¨®n por la empresa investigada era id¨¦ntico al de dos casos m¨¢s, el de una vivienda de Orotava (Santa Cruz de Tenerife), de junio de 2021, y el de otra de Sagunto (Valencia), en una fecha que la Guardia Civil no ha detallado. En los tres casos exist¨ªa alg¨²n tipo de contienda entre arrendador y arrendatario, tuvo lugar un allanamiento ilegal y los due?os llegaron a un acuerdo por escrito con la presunta okupa. Pero lo que confirm¨® el procedimiento il¨ªcito de la empresa de seguridad fue que en todos los contratos firmados, el nombre de la extra?a era el mismo. Y aparec¨ªa ya tecleado por ordenador incluso antes de que los trabajadores enviados por la firma como supuestos mediadores llegaran a hablar con la intrusa.
¡°Con la connivencia de los propietarios¡±, sostienen las mismas fuentes, ¡°la empresa mediadora realizaba vigilancias de los inmuebles al objeto de aprovechar la ausencia de los inquilinos. Al no encontrarse estos en la vivienda, la empresa acced¨ªa al interior y proced¨ªa a la falsa ocupaci¨®n y posterior desalojo, dejando constancia de lo sucedido mediante la firma de un supuesto acuerdo entre particulares¡±. Los inquilinos, leg¨ªtimos moradores, no ten¨ªan manera de volver a sus domicilios, en los que quedaban encerradas todas sus pertenencias. ¡°Si apelan a la v¨ªa legal¡±, indican fuentes cercanas a la investigaci¨®n, ¡°el procedimiento judicial es lento¡± y precisa de una buena defensa. ¡°Si van por la v¨ªa ilegal¡±, es decir, ¡°si fuerzan la cerradura o acceden por un balc¨®n¡±, se convierten autom¨¢ticamente ¡°en okupas de sus propias casas¡± y se les puede imputar un delito de robo con fuerza.
La operaci¨®n, denominada Savita por la Guardia Civil, se sald¨® entre el 21 y el 23 de febrero pasado con dos detenidos y tres investigados. Primero cay¨® la presunta okupa, una mujer de 30 a?os, que fue detenida en Arroyomolinos (Madrid), bajo los supuestos delitos de pertenencia a grupo criminal, coacciones, denuncia falsa y contra la inviolabilidad del domicilio. El mismo d¨ªa, se procedi¨® a la investigaci¨®n de la due?a de la vivienda de Orotava, una mujer de 37 a?os, a la que se imputa un delito contra la inviolabilidad del domicilio y otro de coacciones, y al de Villajoyosa, que estos mismos cargos suma el de denuncia falsa.
El 22 de febrero la Guardia Civil abri¨® investigaci¨®n, tambi¨¦n en Arroyomolinos, contra un trabajador de la empresa especializada en desalojos, de 37 a?os, al que se le imputa el delito de pertenencia a grupo criminal, coacciones y contra la inviolabilidad del domicilio. Finalmente, el 23 de febrero, fue detenido en Barcelona el due?o de la empresa investigada, de 36 a?os, por los supuestos delitos de pertenencia a grupo criminal, coacciones y allanamiento de morada. Los dos detenidos permanecen en libertad con cargos tras prestar declaraci¨®n en sede policial. El juzgado de Instrucci¨®n 1 de Villajoyosa se ha hecho cargo de las diligencias por los hechos investigados.
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