Hay lucha m¨¢s all¨¢ del velo
Mujeres musulmanas piden voz y espacio al feminismo hegem¨®nico en el primer congreso valenciano contra una islamofobia ¡°que crece a pasos agigantados¡±
¡°A las mujeres musulmanas no se las ve como mujeres, se las ve como personas v¨ªctimas de una religi¨®n inferior, opresora con la mujer y a las que hay que liberar¡±, opina F¨¢tima Tahiri, del departamento de Estudios ?rabes e Isl¨¢micos y Estudios Orientales de Universidad Aut¨®noma de Madrid, en un receso del I Congreso contra la Islamofobia que ha reunido este viernes en Valencia a m¨¢s de 200 personas. La islamofobia crece a pasos agigantados en toda la Uni¨®n Europea, seg¨²n la asociaci¨®n Joves¨®lides, organizadora del congreso en colaboraci¨®n con Casa Marruecos, y la cuesti¨®n de g¨¦nero de las mujeres musulmanas se reduce en el debate p¨²blico a si llevan velo o no lo llevan. ¡°Hay vida m¨¢s all¨¢ del hiyab¡±, asegura Tahiri, para quien la reivindicaci¨®n de las mujeres iran¨ªes ¡°es much¨ªsimo m¨¢s profunda que descubrirse el pelo, es la dignidad de todo un pueblo¡±.
Les molesta que el ¨²nico enfoque o pregunta a las mujeres musulmanas sea si velo s¨ª o no, si burkini s¨ª o no. ¡°Hay que romper esa din¨¢mica y pensar que estamos hablando de la gesti¨®n de los cuerpos de las propias mujeres, de su libertad para llevarlo o no. Hay muchos tipos de mujer musulmana, de muchos tipos de creencia, de muchos tipos de or¨ªgenes, de practicar o no la religi¨®n¡±, concluye. Las hay que creen en un feminismo laico y otras que apuestan por un feminismo isl¨¢mico. ¡°Hay muchas formas de feminismo, tantas como mujeres y esa pluralidad tiene que ser vista tambi¨¦n entre las mujeres musulmanas¡±, defiende Tahiri, que cubre su cabello con un pa?uelo.
Hind El Fadli, miembro del Grupo de Chicas Musulmanas de Elche, cre¨® un espacio informal donde las mujeres musulmanas no se sintieran juzgadas ni invalidadas. Fue trascendiendo a nivel local, auton¨®mico y nacional ¡°porque al final es una necesidad que existe en nuestra comunidad. Nosotras somos un espacio seguro, por eso nos llegan las denuncias de actos discriminatorios a mujeres musulmanas en centros educativos, como la prohibici¨®n de llevar el hiyab o pa?uelo. El n¨²mero de casos de j¨®venes discriminadas en los centros educativos por llevar pa?uelo ha aumentado. ¡°Al final o las alumnas desisten y optan por quit¨¢rselo y se cambian al a?o siguiente a otro centro que lo permite. O incluso las familias se cambian de municipio para que la ni?a estudie en un colegio que lo acepta¡±, explica la joven.
Fatine Sakri, moderadora del congreso, se considera feminista. Es agente de igualdad y lamenta que se homogenice su diversidad. ¡°Siempre se nos presenta como un modelo ¨²nico: la mujer musulmana sumisa, que no tiene libre elecci¨®n y que necesita que otras mujeres occidentales libres hablen por ellas. Y eso es lo que no hay que hacer. Tenemos voz propia y queremos expresarnos en primera persona y lo que tienen que hacer otras mujeres es dejarnos el espacio¡±. Sakri y otras mujeres musulmanas lamentan que los abusos sexuales a las temporeras de Huelva no generaran tanta sororidad como otros casos de agresi¨®n sexual en los movimientos feministas.
El congreso extiende su mirada a todos los ¨¢mbitos de la comunidad musulmana. En la apertura de la jornada, Boutaina El Hadri, gerente de Joves¨®lides, ha abordado la necesidad de ¡°visibilizar, actuar y querer¡± para frenar la islamofobia que ¡°crece a pasos agigantados¡± en toda la Uni¨®n Europea al mismo tiempo que ¡°se est¨¢n debilitando los sistemas democr¨¢ticos y liberales¡±, situaci¨®n que deriva en que, en lugar de destinar recursos para hacer frente a este escenario, se centren en luchar contra ¡°una posible radicalizaci¨®n¡±. Seg¨²n El Hadri, hay personas muy preparadas y entidades que ya est¨¢n invirtiendo tiempo y recursos para luchar contra esa lacra.
Una de las conclusiones del ¨²ltimo informe de la Uni¨®n Europea sobre islamofobia es precisamente la invisibilidad de las mujeres, y Francia y Reino Unido son los pa¨ªses donde se registran m¨¢s delitos contra el islam. En Espa?a, en los ¨²ltimos cinco a?os, seg¨²n datos del Ministerio, los delitos de odio ¡°han aumentado un 41%, de los cuales un 40% son por racismo y xenofobia¡±. En este sentido, la tambi¨¦n gerente de la Asociaci¨®n Joves¨®lides ha denunciado que la islamofobia no est¨¢ tipificada como delito de odio, ¡°por lo que no tenemos datos para visibilizarla¡±, a la vez que ha lamentado que haya ¡°muchas personas que creen que la islamofobia no existe¡±.
El director general de Igualdad en la Diversidad de la Generalitat, Jos¨¦ de Lamo, ha a?adido que, seg¨²n los datos del Observatorio Contra el Racismo, entre las posiciones m¨¢s desfavorables, ¡°la segunda es la de la comunidad musulmana, y la primera, la gitana¡±. ¡°Adem¨¢s, un 83% de la poblaci¨®n encuestada estimaba que la islamofobia es un problema bastante o muy importante¡±, ha agregado. Lamo ha reivindicado que desde las instituciones se ha de tener clara una ¡°cuesti¨®n b¨¢sica¡± que es, por ejemplo, la resoluci¨®n de los casos de acceso al ¨¢mbito educativo ¡°independientemente de llevar o no pa?uelo¡±.
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