El PSC conf¨ªa en la investidura de Illa pese a que Junts controlar¨¢ los tiempos del Parlament
ERC desvincula el pacto de la C¨¢mara catalana de las negociaciones para la presidencia de la Generalitat
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Las pantallas se suceden como en un videojuego en la pol¨ªtica catalana. En plena digesti¨®n del resultado de las elecciones auton¨®micas de hace cuatro semanas, el domingo lleg¨® el turno de votar por las europeas. Con la resaca electoral a cuestas, los diputados del Parlament eligieron este lunes a Josep Rull (Junts) como presidente de la c¨¢mara. Raquel Sans (ERC) y David P¨¦rez (PSC) son vicepresidentes de una Mesa que tiene mayor¨ªa independentista (cuatro de los siete miembros), al contar con un secretario de Esquerra y otra de Junts. Un reparto que, de entrada, puede dar prioridad a un intento de investidura de Carles Puigdemont y que podr¨ªa dificultar las pretensiones del socialista Salvador Illa, vencedor de las catalanas el 12 de mayo. El PSC mantiene que sus opciones de llegar al Govern permanecen intactas y contempla la composici¨®n de la Mesa como un par¨¦ntesis que hay que saltar para llegar a la ¨²ltima pantalla: la presidencia de la Generalitat.
Rull arrancar¨¢ su mandato con la patata caliente de tener que decidir qui¨¦n es el primer candidato a president de la Generalitat que pone a prueba sus apoyos. Salvador Illa (PSC) y Carles Puigdemont (Junts) defienden tener opciones de investidura. El orden de su aparici¨®n en el pleno no es balad¨ª y es competencia del presidente de la c¨¢mara decidirlo. Si Rull, tras la preceptiva ronda de contactos con todos los partidos, da prioridad a la apuesta de Puigdemont, pondr¨¢ a Esquerra y la CUP en la encrucijada de tener que decidir si apoyan una investidura de quien se autodenomina ¡°president leg¨ªtim¡± (presidente leg¨ªtimo). El s¨ª de los independentistas, Junts, ERC y la CUP, no alcanza para una mayor¨ªa absoluta, ni siquiera si se suma al ¨®rdago la ultraderecha identitaria de Alian?a Catalana. Para que Puigdemont llegue a president le har¨ªa falta la abstenci¨®n del PSC algo que se anuncia como improbable.
La candidatura de Carles Puigdemont obtuvo 35 esca?os el 12M, siete menos que la lista del PSC que encabezaba Salvador Illa. Desde la misma noche del escrutinio, Puigdemont y Junts han defendido la idea que la suya es la apuesta m¨¢s ¡°coherente¡± para presidir la Generalitat. Aluden a un pretendido frente com¨²n del independentismo para lograr un bloque de hasta 59 esca?os en el Parlament (contando los votos telem¨¢ticos que cuestiona el Tribunal Constitucional). Junts alega que, por el contrario, Illa solo tiene como socios naturales los comunes, que tienen seis esca?os, y critica de antemano la legitimidad de cualquier maniobra que incorpore a otras fuerzas. Incluso ha llegado a amenazar con que Junts retire el apoyo a Pedro S¨¢nchez en el Congreso de los Diputados si el PSC sondea al PP para apuntalar su mayor¨ªa en el Parlament.
En realidad, a los socialistas hay una suma que les sale redonda, sin necesidad de tener que llamar a Alejandro Fern¨¢ndez, jefe de los populares catalanes. Un eventual acuerdo entre PSC, ERC y los comunes permite alcanzar la mayor¨ªa de 68 esca?os en el Parlament. Una tripartito que supondr¨ªa un rev¨¦s para los planes de Puigdemont.
Esquerra tiene la llave que abre la puerta de la Generalitat. Los republicanos han manifestado que el acuerdo sellado este lunes con Junts y la CUP por la Mesa del Parlament no sirve como pista para adivinar qu¨¦ planes tienen para la investidura. Pese a que se llegaron a plantear la conveniencia de batallar por la presidencia de la C¨¢mara, en las negociaciones que ha mantenido internamente ERC tambi¨¦n se ha admitido que, dejando la responsabilidad en manos de Junts, es el propio partido postconvergente quien tiene que decidir el ritmo y los tiempos de la investidura. Si Puigdemont finalmente no logra los apoyos necesarios para alcanzar la Generalitat, Esquerra se podr¨¢ sacudir las responsabilidades y tendr¨¢ pista libre para apoyar, entonces, el intento de investidura de Salvador Illa. Ante una amenaza de repetici¨®n electoral en oto?o, no es poca cosa poder presentarse en p¨²blico como el partido que ha evitado el bloqueo parlamentario, y la factura de 30 millones de euros que implicar¨ªa repetir las elecciones catalanas.
Puigdemont se ha comprometido a regresar a Espa?a cuando se celebre el pleno de investidura. Apurando el plazo m¨¢ximo se tiene que celebrar el 25 de junio. A expensas de que la ley de amnist¨ªa pueda desplegar efectos para entonces, el expresident se arriesgar¨ªa a ser detenido si cruza el paso fronterizo de la Jonquera sin el blindaje legal de la amnist¨ªa.
En este sentido, la elecci¨®n este lunes de la Mesa del Parlament impacta en los prop¨®sitos para elegir al pr¨®ximo presidente de la Generalitat. La campa?a por las elecciones europeas ha incentivado a los partidos a aplicar discreci¨®n absoluta en las negociaciones sobre la investidura, pero una vez cumplida la cita con las urnas, este mismo lunes se abrieron las luces en los despachos de reuniones. El PSC se ha puesto manos a la obra para que no se le escape la Generalitat. Salvador Illa gan¨® las catalanas del 12 de mayo y, desde entonces, su equipo ha mantenido que su prioridad era volver a mandar en el Palau, 14 a?os despu¨¦s de la presidencia de Jos¨¦ Montilla. En ese viaje hasta la plaza Sant Jaume no se contemplaba una parada en el parque de la Ciutadella, sede del Parlament. ¡°Al PSC le interesa lo que le interesa, y la batalla la plantear¨¢ por la Generalitat¡±, manifestaba este lunes en los pasillos parlamentarios una persona cercana a la direcci¨®n de Junts.
Para alcanzar los 68 esca?os que le garantizar¨ªan la mayor¨ªa en su investidura, Salvador Illa conf¨ªa en los seis votos de los comunes y se pone a expensas de lo que decida hacer Esquerra, con 20 diputados. De esta manera, en la sala de m¨¢quinas de los socialistas ha imperado aplicar la estrategia de la prudencia y el talante. Avanzar de puntillas para no pisar ning¨²n callo ni provocar muecas de disgusto en rivales pol¨ªticos que pueden ser socios potenciales.
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