El preso campe¨®n de muay thai que mat¨® a golpes a otro reo, culpable de asesinato con alevos¨ªa

Un preso muri¨® en 2018 en el centro penitenciario de Madrid V, en la localidad madrile?a de Soto del Real, despu¨¦s de que su nuevo compa?ero de celda, experto luchador de muay thai ¨Dun arte marcial de origen tailand¨¦s¨D y de kikboxing ¨Ddeporte de combate de origen japon¨¦s¨D, la emprendiera a golpes con ¨¦l tras discutir sobre qui¨¦n iba a dormir en la litera de abajo y qui¨¦n en la de arriba, seg¨²n confirmaron entonces a EL PA?S fuentes penitenciarias. Ahora, un jurado popular de la Audiencia de Madrid lo ha declarado culpable de un delito de asesinato con alevos¨ªa.

El juicio se celebr¨® el pasado 29 de junio en la Audiencia Provincial de Madrid. Tras la deliberaci¨®n, los miembros del jurado han dado por acreditado que el acusado, Jes¨²s M.R.H., acab¨® con la vida de su compa?ero de celda y han calificado los hechos de asesinato frente al homicidio que apreci¨® el fiscal. La diferencia entre ambos delitos es que el asesinato es premeditado y es m¨¢s grave que el homicidio. El homicidio est¨¢ penado con entre cuatro y 15 a?os, mientras que la condena por asesinato va de 15 a 25 a?os. En este caso, es asesinato con alevos¨ªa, porque se considera que en el crimen hubo una forma o medio destinado a privar de defensa a la v¨ªctima. En su veredicto, el jurado dictamina no obstante que hay una atenuante por trastorno ps¨ªquico. El tribunal dictar¨¢ sentencia pr¨®ximamente.

La fiscal¨ªa hab¨ªa pedido 12 a?os y cinco meses de prisi¨®n para Jes¨²s M. R. H y una indemnizaci¨®n de 456.500 euros para los familiares la v¨ªctima. Los hechos tuvieron lugar el 26 de diciembre de 2018, un d¨ªa despu¨¦s de que Jes¨²s, que entonces ten¨ªa 28 a?os, ingresara en prisi¨®n provisional en Soto del Real tras ser detenido por un intento de homicidio en el Metro de Madrid. En una trifulca, la hab¨ªa emprendido a golpes con un vigilante de seguridad. Le asignaron la celda n¨²mero 18, dentro del M¨®dulo 1, que iba a compartir con otro interno, un preso de confianza puesto por la direcci¨®n del centro para ayudar al ahora condenado a adaptarse a su primer paso por prisi¨®n.

Tras regresar de la cena, ambos se pelearon por qui¨¦n dormir¨ªa arriba y qui¨¦n abajo. Tras una breve discusi¨®n, la v¨ªctima lanz¨® un pu?etazo que impact¨® al acusado en la frente, seg¨²n el relato fiscal. Este se abalanz¨® sobre el fallecido y, con ¡°claro ¨¢nimo¡± de acabar con la vida del otro recluso, comenz¨® a darle pu?etazos y patadas en la cabeza y al cuerpo sin que la v¨ªctima tuviera siquiera opci¨®n a reaccionar, llegando a caer al suelo, donde el acusado sigui¨® lanzando golpes a la cara y al t¨®rax hasta causarle la muerte.

La fiscal¨ªa destacaba en sus conclusiones provisionales la superioridad f¨ªsica, la diferencia de edad y la contundencia y precisi¨®n de los golpes lanzados por el acusado que es experto en t¨¦cnicas de combate ya que tuvo la licencia federativa de kickboxing y muay thai al menos durante 2016 y 2017. El escrito de acusaci¨®n subraya que Romero fue diagnosticado con trastorno mixto de personalidad y que este tipo de patolog¨ªas conllevan ¡°una marcada impulsividad¡± y una ¡°baja tolerancia a las contrariedades¡±. Esta patolog¨ªa, a juicio de la Fiscal¨ªa, no le imped¨ªa ser consciente de su acci¨®n.