La gesti¨®n de la pandemia dispara la tensi¨®n en los bloques del Gobierno y la oposici¨®n de Madrid
PP y Cs chocan entre ellos y no se entienden con Vox, mientras que M¨¢s Madrid explota las cr¨ªticas al PSOE
La gesti¨®n de la crisis sanitaria ha disparado las tensiones internas en el bloque de partidos que permiti¨® un Gobierno de derechas presidido por Isabel D¨ªaz Ayuso y en el de la oposici¨®n de izquierdas. Vox reclama a PP y Cs que reduzcan las 13 consejer¨ªas de su Ejecutivo para votar a favor de unos presupuestos adaptados a las consecuencias econ¨®micas y sociales de la pandemia, mientras que en el PSOE ven con sorpresa c¨®mo M¨¢s Madrid intenta explotar las cr¨ªticas a la labor de oposici¨®n de ?ngel Gabilondo. Con m¨¢s partidos representados que nunca (seis), la Asamblea est¨¢ sumida en la par¨¢lisis legislativa.
¡°?D¨®nde est¨¢ la oposici¨®n?¡±. As¨ª arranca un video promocional de M¨¢s Madrid (20 diputados) que ha provocado estupor en el PSOE (37 diputados y ganador de las ¨²ltimas elecciones). Justo cuando arrecian las cr¨ªticas contra Gabilondo, l¨ªder de los socialistas, por no plantear una oposici¨®n m¨¢s dura a D¨ªaz Ayuso, el partido de M¨®nica Garc¨ªa y Pablo G¨®mez Perpiny¨¤ inunda las redes sociales con un repaso de sus iniciativas para fiscalizar al Ejecutivo regional y municipal. Y responde: ¡°Hay oposici¨®n¡± ?Casualidad?
¡°En la Asamblea hay alianzas naturales porque compartimos ciertas visiones con M¨¢s Madrid o Unidas Podemos IU Madrid en Pie, frente al Gobierno que han formado PP y Cs con el apoyo de Vox¡±, repasa Gabilondo en conversaci¨®n con este diario. ¡°Si queremos alg¨²n d¨ªa tomar alguna iniciativa de alcance tenemos que sumar. Si el esp¨ªritu cr¨ªtico entre nosotros nos lleva a desconfiar, a distanciarnos m¨¢s, habr¨¢ menos posibilidades de transformaci¨®n de la Comunidad¡±, razona, insistiendo en su voluntad de di¨¢logo. ¡°Comprendo a cada grupo que haga ostentaci¨®n de sus logros, pero tampoco me parece justo que se quiera monopolizar la acci¨®n de oposici¨®n¡±, sigue. ¡°Cada uno est¨¢ buscando su sitio, viendo por d¨®nde crecer, y a costa de qui¨¦n¡±, a?ade. ¡°En este momento tan dif¨ªcil nosotros somos un partido de gobierno, una alternativa de gobierno, no simplemente una cr¨ªtica al Gobierno¡±.
¡°El v¨ªdeo persegu¨ªa poner en valor nuestro trabajo de oposici¨®n en las instituciones, un trabajo que muchas veces queda invisibilizado y no llega a al ciudadano¡±, contestan desde la formaci¨®n que impulsaron Manuela Carmena e ??igo Errej¨®n. ¡°Creemos que hacemos el mejor trabajo de oposici¨®n, pero solo vamos a acabar con el desgobierno de Ayuso colaborando entre fuerzas progresistas¡±, a?aden. ¡°No hay que ser un lince para darse cuenta de que mucha gente en Madrid suma a la preocupaci¨®n por la pandemia y el enfado con la gesti¨®n de Ayuso y Aguado un sentimiento de orfandad y sensaci¨®n de abandono¡±, argumentan. ¡°Creemos que nuestro trabajo sobre comida basura en los colegios, los desprop¨®sitos de las residencias y, especialmente, el marcaje de M¨®nica Garc¨ªa al consejero de Sanidad y a la propia Ayuso, son la mejor manera que tenemos de hacer oposici¨®n, y quer¨ªamos recopilarlo¡±, siguen. ¡°En cualquier caso, el PSOE no deber¨ªa molestarse tanto por que el resto de partidos de la oposici¨®n hagamos la labor para la que nos han votado. Es nuestra responsabilidad y nuestro deber¡±.
Frente a la efervescencia de M¨¢s Madrid en plenos, comisiones y redes sociales, Gabilondo ha optado por buscar espacios de encuentro en un Parlamento hiperfragmentado ¡ªcomo la comisi¨®n para la reconstrucci¨®n econ¨®mica y social¡ª y por cargarse de razones para pedir responsabilidades pol¨ªticas ¡ªcon la comisi¨®n de investigaci¨®n sobre lo ocurrido en las residencias o la petici¨®n de un pleno extraordinario por los rebrotes¡ª. Sin embargo, nada de eso satisface a quienes le piden que plantee una moci¨®n de censura para la que hoy no tiene los votos. Sin Cs, socio de Gobierno del PP, no hay opciones de que fructifique el cambio de Ejecutivo.
Ese margen de seguridad no ha garantizado hasta ahora una convivencia pac¨ªfica en el bloque de derechas, que no ha logrado superar el antagonismo de Cs y Vox, y ahora debe afrontar decisiones de calado. As¨ª, el partido de Roc¨ªo Monasterio exige una reducci¨®n del n¨²mero de consejer¨ªas (13) para apoyar los Presupuestos de 2021, y D¨ªaz Ayuso intenta eludir la condici¨®n postergando su posible cumplimiento a despu¨¦s de la votaci¨®n. No es el ¨²nico problema. El choque entre PP y Cs ha sido constante durante la crisis, y ha acabado personalizado por las discrepancias p¨²blicas entre el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz-Escudero, y el de Pol¨ªticas Sociales, Alberto Reyero.
Con la gesti¨®n de la pandemia del coronavirus como n¨²cleo de la agenda pol¨ªtica, tres asuntos marcar¨¢n el futuro de la legislatura en cuanto acabe el verano.
Primero, el debate sobre el estado de la regi¨®n, fijado para mediados de septiembre, servir¨¢ para que el PSOE ausculte si tiene alguna posibilidad de atraer a Cs hacia una moci¨®n de censura que le reclaman insistentemente voces cr¨ªticas de fuera y dentro del partido. Segundo, la reforma de la ley del suelo, para eliminar la mayor¨ªa de licencias urban¨ªsticas, optar¨¢ a convertirse en la primera medida legislativa aprobada por el trio PP-CS-Vox en lo que va de legislatura. Y tercero, la presentaci¨®n de los presupuestos para 2021 decidir¨¢ los l¨ªmites de la supervivencia del Ejecutivo de D¨ªaz Ayuso: los efectos de la pandemia obligan a tener unas cuentas adaptadas a la crisis social y econ¨®mica, y las actuales, prorrogadas de 2019, se dise?aron para un periodo de expansi¨®n.
Al contrario que en el Congreso, donde el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos ha conseguido ir variando sus apoyos en funci¨®n de los asuntos a votar (contando en unos con los nacionalistas, y en otros con Cs), en la Asamblea de Madrid no hay hasta ahora alternativas. Los dos bloques parecen inamovibles, pese a sus tensiones internas. PP y Cs solo pueden mirar hacia Vox. Y PSOE, M¨¢s Madrid y Unidas Podemos, que no suman mayor¨ªa absoluta, solo pueden hacerlo, con melancol¨ªa, hacia el partido de Ignacio Aguado.
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