La segunda resurrecci¨®n del Retiro
El Ayuntamiento de Madrid abre el parque tras mes y medio de cierre por el temporal ¡®Filomena¡¯, pero todav¨ªa queda un 40% del recinto clausurado
Ricardo El¨ªas arrastra el carro con sus aperos de trabajo por el paseo del estanque del Retiro. Este cubano de 57 a?os es de las primeras personas que ha podido acceder este lunes al gran parque urbano madrile?o, despu¨¦s de mes y medio de cierre a consecuencia del temporal Filomena. Desde este lunes, se puede disfrutar de aproximadamente el 60% del espacio, con 12 de las 17 puertas ya reabiertas. El 8 de febrero, reabrieron las dos primeras, pero solo se pod¨ªa llegar hasta la biblioteca Eugenio Tr¨ªas y al restaurante Florida y, hasta ahora, segu¨ªa la prohibici¨®n de circular por el parque.
El¨ªas llega a un lugar que le es perfectamente familiar desde Vallecas, donde vive en una habitaci¨®n de alquiler. No se plantaba en el parque desde el d¨ªa en que las verjas echaron el candado por la peor nevada en 140 a?os. El ritual transformador le lleva en torno a tres cuartos de hora. Sacar sus cosas, vestirse, maquillarse¡ todo requiere su tiempo. As¨ª es como El¨ªas, que puso pies en polvorosa de su isla hace ya 13 a?os a la caza de una vida mejor, se convierte en la estatua de El Viajero.
¡°Hay que ir guardando poco a poco¡±, explica sobre sus ahorros ante lo imprevisible de golpes como Filomena, que le dejan de un d¨ªa para otro sin trabajar. Cuando llegan las estrecheces, como ahora, agradece su solter¨ªa, pues la familia es ¡°un problema que te quitas de encima cuando eres inmigrante¡±. En todas estas semanas la cartera se le ha quedado sequita y sent¨ªa ya la necesidad de retomar una actividad que desarrollado en los ¨²ltimos cinco a?os. Empez¨® a curtirse como ayudante del mimo que escenifica la estatua de motocross en los alrededores de la Puerta del Sol.
D¨ªas como hoy en los que no pegan en exceso ni el fr¨ªo ni el calor son los mejores, explica Ricardo, optimista, mientras se empieza a aplicar el maquillaje. Pronto su rostro se vuelve de bronce delante del peque?o espejo que apoya en la maleta. ¡°Hay que estudiar bien las estatuas que hay en la calle, analizar c¨®mo el ¨®xido va actuando sobre ellas. As¨ª luego yo me preparo¡±.
Por delante, unas siete horas que le dejar¨¢n los m¨²sculos agarrotados y en las que apenas parar¨¢ para comer un bocadillo. Consumir en las terrazas del parque no entra dentro de su econom¨ªa, aunque pronto se saluda con los trabajadores del establecimiento vecino, que tambi¨¦n retoman este lunes su trabajo. En verano, cuenta, que hay que buscar la sombra y saber que no merece la pena retar a las altas temperaturas en las horas en las que m¨¢s castiga el sol porque las monedas no caen. Ricardo El¨ªas es una estatua con cierta experiencia.
La clave es no solo curtirte y desempe?ar bien el trabajo, sino tambi¨¦n el sitio que se elige. ¡°La ley de la calle te obliga a llegar el primero¡±. ?l se ha plantado delante del estanque dejando a su espalda el paseo de las estatuas de Reyes y el paseo de Argentina. As¨ª logra atraer a m¨¢s paseantes y que aquellos que quieren fotografiarle se lleven el recuerdo perfecto.
Mientras Ricardo acaba de mutar en El Viajero, por el parque circulan camiones cargados con ramas recuerdo de Filomena y hay traj¨ªn de jardineros que revisan ramas desde lo alto de cestas sobre gr¨²as con ruedas. Tambi¨¦n circulan algunos agentes de la unidad ciclista de la Polic¨ªa Municipal, que aseguran las zonas acotadas con precinto de pl¨¢stico rojo y blanco a las que est¨¢ prohibido acceder. La ordenanza municipal castiga con entre 30 y 600 euros a quien ignore los precintos.
El Retiro ha perdido por el temporal un millar de los aproximadamente 17.000 ¨¢rboles y dos tercios de los ejemplares han sufrido da?os. Los que m¨¢s han padecido son los pinos, algunos cedros y magnolios, as¨ª como los aligustres de Jap¨®n, detalla Santiago Soria, subdirector municipal de Parques y Viveros. Ahora est¨¢ previsto repoblar, a?ade, aunque el plan no est¨¢ cerrado todav¨ªa. Per no necesariamente en el mismo lugar, ni las mismas especies perdidas. Se han salvado, sin embargo, los seis ejemplares m¨¢s preciados y que forman parte del cat¨¢logo de 200 ¨¢rboles singulares y protegidos de la Comunidad de Madrid. Se trata de un ahuehuete, un pino de Alepo, una palmera, un arce, un cedro y un eucalipto.
¡°No es f¨¢cil que la gente te eche dinero. Si haces algo sencillo nadie se para delante de ti¡±Ricardo El¨ªas, cubano que trabaja haciendo de estatua
Luis, peruano de 30 a?os, aprovecha la reapertura para que Buster, su bulldog franc¨¦s de cinco a?os, se reencuentre con el parque. Lo que m¨¢s le gusta al perro es retozar y pisar la hierba, pero la gran mayor¨ªa de esas zonas permanecen acotadas porque persiste el peligro de ca¨ªda de ramas. ¡°Algo es algo¡±, se consuela su due?o. Poco antes de que se reabrieran las puertas, el alcalde de la ciudad, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, ha dado un paseo para comprobar el estado del parque.
En la ma?ana nublada y tibia de este lunes, brilla el optimismo y la pasi¨®n con la que Ricardo El¨ªas retoma su trabajo de estatua frente a la adversidad de los tiempos que corren. ¡°No es f¨¢cil que la gente te eche dinero. Si haces algo sencillo nadie se para delante de ti¡±. Junto a ¨¦l se van desperezando tambi¨¦n los quioscos con terrazas delante del estanque. El parque asiste as¨ª a la segunda resurrecci¨®n despu¨¦s de que ya permaneciera cerrado m¨¢s de dos meses durante el primer estado de alarma. Y a la vez que artistas como el mimo cubano regresan los turistas, los paseantes, los deportistas¡ y tambi¨¦n el menudeo. ¡°?Hach¨ªs? ?marihuana?¡±. Un joven ¨¢vido de clientela cita en la distancia al reportero en los alrededores del t¨²nel que conecta con el Metro. Otro cl¨¢sico del Retiro.
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