P¨¦rez-M¨ªnguez m¨¢s all¨¢ de la Movida
Una d¨¦cada despu¨¦s de la muerte del fot¨®grafo, una exposici¨®n ahonda en una obra que tambi¨¦n recoge retratos en blanco y negro y sus coloristas diarios
?Sigue siendo la Movida madrile?a una pesada losa que acompa?a a algunos hasta despu¨¦s de la muerte? Pablo P¨¦rez-M¨ªnguez falleci¨® en 2012 a los 65 a?os cargando con ella. Era sin embargo un artista rompedor que se hab¨ªa adelantado a aquellos a?os del florecimiento de la vida cultural capitalina. De hecho, la mayor¨ªa de los que le rodearon esos a?os de efervescencia eran m¨¢s j¨®venes que ¨¦l, que con 25 a?os fue uno de los fundadores en 1971 de Nueva Lente, un aldabonazo cultural en la espesura tardofranquista. Esa revolucionaria revista, plagada de novedosos enfoques fotogr¨¢ficos, fue pr¨®logo en parte de las inquietudes que m¨¢s adelante acabar¨ªan imprimiendo car¨¢cter a la obra de este autor.
Por eso PPM, como firmaba, no fue una consecuencia de la Movida, sino uno de los resortes que la impuls¨®. ¡°Empec¨¦ a fotografiar a Alaska y los Pegamoides en 1978, a Radio Futura en el 79¡ A mis treinta y tantos yo era madurito, todo el mundo ten¨ªa 15, 20 o 25 a?os¡±, recuerda una de sus citas en la exposici¨®n que estos d¨ªas le dedica el Centro de Arte de Alcobendas.
¡°Creo que Pablo y Alberto Garc¨ªa-?lix, aunque son antag¨®nicos, son los dos grandes fot¨®grafos de ese tiempo¡±, comenta el escritor Luis Antonio de Villena, uno de los que frecuent¨® a PPM y que aparece en algunos de los retratos de la exposici¨®n. ¡°Pablo retrataba la vida inmediata, hac¨ªa fotos de la vida. Alix buscaba m¨¢s lo duro, lo s¨®rdido. Pablo buscaba m¨¢s lo vitalista, lo colorista y el ambiente¡±, reflexiona.
Jos¨¦ Tono Mart¨ªnez cont¨® a sus alumnos de un master en la Universidad Complutense que cocinaba como comisario esa muestra y que ten¨ªa previsto titularla Pablo P¨¦rez-M¨ªnguez: retratos. Los estudiantes se quedaron fr¨ªos, cuenta este antiguo editor de la revista La luna de Madrid, en la que colabor¨® PPM. No ten¨ªan claro qui¨¦n era aquel fot¨®grafo para ellos casi desconocido y echaban en falta alg¨²n referente de la ¨¦poca, ya lejana para ellos, a la que se refer¨ªa la muestra. Por eso, corregido el tiro, lo que finalmente puede visitarse hasta el 29 de julio en Alcobendas dentro del programa de PhotoEspa?a es Pablo P¨¦rez-M¨ªnguez: retratos (La movida, revisitada).
El comisario es consciente de que la onda expansiva de la Movida sigue retumbando casi medio siglo despu¨¦s de su explosi¨®n. Pero a veces cuesta trabajo dar a conocer algunas facetas de sus autores, como esa de PPM que va m¨¢s all¨¢ del cachondeo de su piso-estudio en la calle de Montesquinza y del fulgor de una ciudad absorbida por los nuevos aromas de la libertad llegados con la Transici¨®n y los a?os ochenta. Jos¨¦ Tono Mart¨ªnez ha decidido tirar por la calle del medio, no solo en cuanto al t¨ªtulo, sino tambi¨¦n en cuanto al contenido. Obviar algunas de las obras m¨¢s conocidas de PPM, como las referidas primeras fotos del grupo Radio Futura de 1979 o las del director de cine Pedro Almod¨®var, hubiera sido quiz¨¢s demasiado arriesgado.
?Cu¨¢ntos fot¨®grafos que conocen muy bien la t¨¦cnica fallan rotundamente a la hora de ver, de vivir, de sentir, de reconocer, de odiar o de amar?Pablo P¨¦rez-M¨ªnguez
¡°Tuve mucha amistad con ¨¦l¡±, rememora Luis Antonio de Villena. ¡°Pablo ten¨ªa un piso enorme en Montesquinza convertido en estudio. Hac¨ªamos reuniones y Pablo, muy compulsivo, esp¨ªdico, nervioso, hac¨ªa fotos constantemente. Yo sab¨ªa hace mucho que las fotos que hab¨ªa publicadas de Pablo pod¨ªan ser un 50% de lo que tiene. Hay mucho in¨¦dito, porque no dejaba de hacer fotos. Hay bastantes m¨ªas publicadas, pero debe haber muchas m¨¢s in¨¦ditas, al igual que de otros amigos¡±.
¡°El ¨¦xito de todas estas fotos que hac¨ªamos y que sigo haciendo consist¨ªa en no quedarnos solo en retratar el look o el glam, sino en profundizar en la psicolog¨ªa de cada personaje con escenas improvisadas. ?Teatro instant¨¢neo!, ?Foto-hapennings!, ?Chochonismo ilustrado!¡±, entend¨ªa el autor. ?l mismo reconoc¨ªa que todo ese mundo festivo estaba por encima de la t¨¦cnica fotogr¨¢fica. ¡°?Y la t¨¦cnica? Pues la t¨¦cnica funciona entre medias de todos eso. Es lo m¨¢s f¨¢cil, sin lugar a dudas. ?Cu¨¢ntos fot¨®grafos que conocen muy bien la t¨¦cnica fallan rotundamente a la hora de ver, de vivir, de sentir, de reconocer, de odiar o de amar?¡±.
Por eso, m¨¢s all¨¢ de esa vida con toques festivos, Jos¨¦ Tono Mart¨ªnez quiere que la exposici¨®n sirva para incidir tambi¨¦n en esa ¡°atm¨®sfera¡± que PPM quiso captar en sus retratos y que, dice, hered¨® de Bernard Plossu. Hay un centenar de ellos en blanco y negro en la muestra que suponen, seg¨²n el comisario, la parte menos conocida de su obra.
La exposici¨®n de Alcobendas recupera tambi¨¦n algunos de los 40 cuadernos en los que, con gran amor por la palabra, el dise?o y el color, fue recogiendo sus diarios. Adem¨¢s de en una vitrina, aparecen en el documental de media hora que dirigi¨® Eva Vizcarra, que puede verse en la sala y en el que prestan testimonio familiares y amigos del autor. Algunas de las hojas multicolores de esos diarios esconden periodos grises, como aquellos en los que PPM no ten¨ªa dinero para pagar el piso o la falta de encargos en los meses posteriores a recibir el Premio Nacional de Fotograf¨ªa en 2006.
Creo que es m¨¢s comprometido sacar belleza de las cosas y de la vida que su lado amargo. Ser pesimista es muy sencillo. Ser optimista es un verdadero retoPablo P¨¦rez-M¨ªnguez
¡°La fotograf¨ªa me ha ense?ado a ver el lado m¨¢s bonito, m¨¢s positivo de las cosas. Creo que es m¨¢s comprometido sacar belleza de las cosas y de la vida que su lado amargo. Ser pesimista es muy sencillo. Ser optimista es un verdadero reto¡±, opinaba el artista, que hizo fotos incluso en el hospital poco antes de morir de c¨¢ncer. ¡°Pablo naci¨® con la c¨¢mara y muri¨® con la c¨¢mara¡±, recuerda en la pel¨ªcula Mario Vaquerizo, amigo y uno de los ¨²ltimos que lo visit¨® y pos¨® para ¨¦l. ¡°Genio y figura hasta la sepultura¡±, concluye.
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