Las l¨¢grimas y los sue?os cumplidos de Rozal¨¦n

Rozal¨¦n tembl¨® y llor¨® ante un p¨²blico que llen¨® el WiZink Center, pero se recompuso para cantar. Sus temas le sirvieron para enfrentarse, con estoicismo, a la guerra, el racismo y el machismo. La albacete?a, de 35 a?os, regres¨® este jueves a los escenarios junto a su banda para presentar El ¨¢rbol y el bosque, su cuarto ¨¢lbum de estudio. ¡°?Ay, que ganas de llorar tengo! Much¨ªsimas gracias por venir. No me puedo creer que estemos aqu¨ª... S¨¦ que poco a poco me ir¨¦ relajando, pero es un regalazo que compr¨¦is una entrada y pueda veros¡±, confes¨®.

Antes de empezar, el edificio estaba rodeado de caras felices. Algunos esperaban para entrar al concierto y otros sal¨ªan de vacunarse, con los brazos al aire y el algod¨®n apret¨¢ndoles la piel. La misma emoci¨®n se percib¨ªa dentro, cuando Mar¨ªa de los ?ngeles Rozal¨¦n enton¨®: ¡°La calidad de la sanidad ser¨¢ intocable¡±. El p¨²blico estall¨® en aplausos al recordar el himno que ella escribi¨® contra la pandemia, Aves Enjauladas.

Con La l¨ªnea se enfrent¨® a quienes critican la inmigraci¨®n. Mientras, a su espalda, en una gran pantalla retransmitieron im¨¢genes de personas que cruzaban vallas con alambres o que navegaban en patera por un mar. ¡°Pensaba que lo de las fronteras era de otra ¨¦poca. Y encima, despu¨¦s de conocer personas, rostros y nombres propios que luchan por sobrevivir, hay una cosa que tengo clar¨ªsima: nadie lo hace por gusto¡±. Y lo relacion¨® con un verso de Cristina Peri Rossi: ¡°Partir es siempre partirse en dos¡±.

La poes¨ªa tambi¨¦n le sirvi¨® para enfrentarse a la guerra. Record¨® unas palabras escritas por Miguel Hern¨¢ndez como preliminares de Justo, un tema que habla la memoria hist¨®rica, concretamente de su t¨ªo abuelo. Fue el ¨²nico soldado de su pueblo que no regres¨® del frente. ¡°Tristes guerras/ si no es amor la empresa. Tristes armas/ si no son las palabras. Tristes hombres/ si no mueren de amores¡±, recit¨®. ¡°C¨®mo cuestan cantar algunas canciones¡±, declar¨®.

Las 5.000 entradas disponibles (en el espacio hay 12.000 butacas, pero por medidas de seguridad redujeron el aforo) se vendieron para asistir al espect¨¢culo que da Rozal¨¦n, acompa?ada de su banda y Beatriz Romero, su int¨¦rprete de signos. En mitad de la melod¨ªa de Este Tren invoc¨® a los asistentes con el grito: ¡°Hemos vuelto¡±. Su intenci¨®n era ofrecer ¡°un chute de energ¨ªa¡±, pero ella tambi¨¦n lo necesitaba: ¡°Estoy dando y recibiendo, es un doble disfrute¡±.

Con esa espontaneidad, recibi¨® a Fernando Madina, vocalista de Reincidentes. Ambos, con l¨¢grimas en los ojos, interpretaron ?Ay! Dolores. Esa letra, que habla sin tapujos del maltrato, fue una de las grandes inspiraciones de la cantautora. ¡°Somos lo que escuchamos en la adolescencia, le debemos mucho al rock de este pa¨ªs¡±, se?al¨®. A¨²n con la voz quebrada, Rozal¨¦n rememor¨® una frase que le dijo una amiga: ¡°Est¨¢s cumpliendo sue?os de una generaci¨®n de t¨² solita¡±. Y eso le parece algo tan hermoso que no se quiere acostumbrar.

Esa chica que cantaba en garitos los temas de grupos de rock, creci¨® musicalmente y tambi¨¦n se sum¨® a crear cantos feministas como El paso del tiempo, en la que defiende belleza senil. ¡°LLas arrugas de mi boca, el invierno en mi pelo/ las venas son ramas marcadas en mis manos/ es mi pecho cayendo, postales de verano¡±, core¨®. Tambi¨¦n interpret¨® Que no, que no, con la que gan¨® el Goya a mejor canci¨®n original este a?o, y que aparece en La Boda de Rosa, de Ic¨ªar Bolla¨ªn. ¡°Si elijo ser mi prioridad/ no es cuesti¨®n de ego¨ªsmo/ el tiempo de calidad/ parte dedicado uno mismo¡±, reivindic¨® por la independencia femenina. ¡°?A ver si las canciones ayudan a cambiar las cosas, por dios!¡±, exclam¨®. Y obtuvo varios s¨ªes como respuesta.

En mitad del concierto cambi¨® de ropas y de registro. Pas¨® de una chaqueta negra y blanca a unos flecos coloridos para interpretar Vivir y El d¨ªa que yo me muera. Los asistentes se balanceaban en sus asientos, como deseosos de levantarse a bailar, pero manten¨ªan en todo momento la distancia y la mascarilla. La artista, con su tono familiar, se acerc¨® a los asientos para hablar con su madre. ¡°Dice que voy muy cortita. Est¨¢ por ah¨ª, decidle cosas bonitas¡±, brome¨®. Tambi¨¦n pidi¨® aplausos para los t¨¦cnicos. ¡°Son los que hacen todo posible¡±, afirm¨®.

El nuevo disco de Rozal¨¦n, cargado de todas estas reivindicaciones contiene una canci¨®n de amor, A tu vida. ¡°Es de amores nost¨¢lgicos, historias que se quedan a medias y espinitas para siempre¡±, explic¨®. Y expuso unas palabras que parec¨ªa lanzar al p¨²blico: ¡°Hoy te vuelvo a ver¡±.

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