Dirigir una galer¨ªa de arte: un mundo de hombres donde las mujeres se sienten a gusto

Ana Chiclana, Victoria Cortina e Isabel Garc¨ªa-Mont¨®n son directoras de diferentes galer¨ªas de arte. Desde ni?as han vivido rodeadas de cuadros y esculturas. En algunos casos, como en el de las dos ¨²ltimas, se trata de la segunda generaci¨®n de la familia en este negocio, antes dirigido por sus madres. Ninguna de ellas considera que su entorno laboral sea machista, aunque admiten no conocer a muchas mujeres que hagan el mismo trabajo. ¡°Ayer particip¨¦ en una cena con varios galeristas. De los 16 comensales, solo dos eran mujeres: la novia de un director y yo¡±, reconoce Garc¨ªa-Mont¨®n, que esta semana participa en Feriarte, la feria de arte y antig¨¹edades que se celebra en Ifema, en Madrid, hasta el 21 de noviembre.

Es suficiente dar un paseo entre los mostradores de la feria para confirmar las palabras de Isabel Garc¨ªa-Mont¨®n, madrile?a de 39 a?os que dirige la galer¨ªa de arte Jorge Juan ¡ªen la calle del mismo nombre, en el distrito de Salamanca¡ª, donde su madre, Mar¨ªa Paz P¨¦rez, abri¨® la primera galer¨ªa de la familia en 1977. De 80 expositores, solo 30 son mujeres, es decir el 42%. Una cifra que casi duplica el porcentaje de directoras, codirectoras o propietarias de galer¨ªas de arte y anticuarias que participaron en Feriarte en 2010, que alcanzaba solo el 23%, seg¨²n datos facilitados por los organizadores.

Cuando Ana Chiclana empez¨® su carrera pod¨ªa contar a las mujeres en el mundo del arte con los dedos de una mano. Volvi¨® a Espa?a a finales de los a?os noventa, despu¨¦s de haberse graduado en Historia del Arte en Par¨ªs. Al mismo tiempo que estudiaba, empez¨® a trabajar con un experto en cuadros antiguos que le ense?¨® la profesi¨®n. ¡°En mis primeros trabajos, a lo mejor las mujeres representaban un 15 o 20% del total¡±, admite. ¡°Me acuerdo de una vez en la que, durante una negociaci¨®n importante, un cliente que quer¨ªa comprar una obra pregunt¨® con qui¨¦n ten¨ªa que negociar. Cuando le dijeron que era yo, que en aquella ¨¦poca ten¨ªa 32 a?os, le hizo gracia. Pero gracias a esto tambi¨¦n tuvimos una relaci¨®n m¨¢s cercana y sincera, pudimos hablar con m¨¢s transparencia de la obra de arte, y pudimos hacer la operaci¨®n¡±.

Ante todo, un negocio

A pesar de esto, y de reconocer que la suya es una profesi¨®n principalmente masculina, asegura que nunca experiment¨® un trato diferente por el hecho de ser mujer. ¡°En nuestra profesi¨®n el secreto para poder tener una presencia femenina est¨¢ en la capacidad de estar a la altura de las circunstancias, de tener el talento de respaldar las obras que est¨¢s vendiendo. Si consigues responder a la calidad de las obras de arte, siempre te har¨¢s respetar¡±, a?ade Chiclana, que dirige una galer¨ªa especializada en pintura del Siglo de Oro en la calle madrile?a de Bravo Murillo.

Victoria Cortina (45 a?os) comparte esta opini¨®n. A los 30 a?os decidi¨® dejar su trabajo en m¨¢rketing y abrir una galer¨ªa dedicada a la pintura contempor¨¢nea, que despu¨¦s de unos a?os se fusion¨® con la que dirig¨ªa su madre, Mar¨ªa ?ngeles Munuera. ¡°Un galerista ser¨¢ muy amante del arte, un enamorado, un so?ador¡­ Pero al final del d¨ªa es sobre todo un vendedor. No importa si un hombre tiene unas t¨¢cticas m¨¢s directas con los clientes, o una mujer negocia de forma m¨¢s suave. Como directora de una galer¨ªa eres la jefa de ti misma, que el trabajo sea f¨¢cil o no depende solo de ti¡±, afirma Cortina.

Su madre abri¨® la primera galer¨ªa de la familia en 1981 en pleno coraz¨®n de la zona comercial de Barcelona. ¡°Empec¨¦ a trabajar con cuatro socios, pero pronto me cans¨¦ porque trabajaba todo el d¨ªa para ellos, no sacaba buenos resultados para m¨ª¡±, recuerda Mar¨ªa ?ngeles (81 a?os), que acompa?a a su hija en Feriarte. Despu¨¦s de dirigir otras dos galer¨ªas, siempre acompa?ada por socios hombres, se resolvi¨® a trabajar en solitario: ¡°Un d¨ªa que paseaba por la calle Valencia vi un local y me dije: este ahora lo llevo yo, voy a trabajar solo para m¨ª¡±. Cuando piensa en estos a?os, no recuerda haber sido nunca discriminada en su trabajo por el hecho de ser mujer: ¡°Tuve la suerte de frecuentar el Liceo Franc¨¦s de Barcelona, donde no hab¨ªa ninguna diferencia entre chicos y chicas. El que era m¨¢s inteligente era el primero, indiferentemente del sexo, y as¨ª lo he vivido toda mi vida¡±.

Recambio generacional

Entonces, ?si no han experimentado nunca ning¨²n tipo de dificultades o discriminaci¨®n en el trabajo por el hecho de ser mujeres, por qu¨¦ hay tan pocas directoras de galer¨ªas de arte? En el mismo comit¨¦ organizativo de la feria hay ¨²nicamente cuatro mujeres de 13 miembros que lo conforman. Lo mismo pasa con el comit¨¦ de admisi¨®n, el ¨®rgano encargado de dar validez a todas las piezas que se presentan en la feria, que est¨¢ formado por 9 mujeres de 30 miembros.

Para Garc¨ªa-Mont¨®n es posible que dependa del tipo de mercado. El de arte antiguo, donde no se comercian cuadros de artistas vivos, a¨²n no permite un recambio generacional. ¡°La mayor¨ªa de galeristas reunidas en Feriarte pertenecen a otra generaci¨®n [mayores de 40 a?os], y para empezar este tipo de actividad tienes que disponer de un patrimonio para comprar las obras. Empezar en el mercado de arte contempor¨¢neo es m¨¢s f¨¢cil, porque con las pinturas de artistas vivos no es necesario hacer una gran inversi¨®n¡±, observa. El listado de galer¨ªas que participaron en ARCO 2020, la feria de arte contempor¨¢neo de Madrid, avala esta hip¨®tesis. De 170 galer¨ªas de arte que participaron en la programaci¨®n general y expon¨ªan en Ifema, el 52% estaban dirigidas o codirigidas por mujeres.

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