Las listas de espera tambi¨¦n se alargan en la sanidad privada de Madrid: ¡°Yo no pago un seguro para esto¡±
Los sindicatos apuntan que el sistema privado no se ha preparado para la avalancha de clientes durante la pandemia: el n¨²mero de madrile?os con asistencia m¨¦dica privada ha crecido un 10% desde 2019
La escena que se vivi¨® en las urgencias del Hospital Quir¨®nsalud en Pozuelo (Madrid) el jueves 30 de junio era ins¨®lita en la sanidad de la gente que paga peaje para evitar atascos. Harta de esperar, una mujer se levant¨®. Muy enfadada, aunque de manera educada, pidi¨® la hoja de reclamaciones y hablar de inmediato con un responsable m¨¦dico en ese centro privado del municipio m¨¢s rico de Espa?a. El ¨¢nimo general era muy tenso. Las salas estaban a rebosar. En la pedi¨¢trica, una madre sentada cargaba a sus dos gemelos de ocho a?os encima de ella porque no hab¨ªa asientos libres. A quien preguntaba le dec¨ªan que la espera media era de cuatro horas. La conversaci¨®n de la mujer con la empleada de atenci¨®n al paciente la pudo escuchar todo el mundo:
¨DYo no pago un seguro privado para esto. Cada vez est¨¢ peor el hospital. Si tienen el servicio colapsado, no deber¨ªan coger a m¨¢s pacientes.
¨DEs que esto es un hospital y no podemos negarle la atenci¨®n a nadie. Esto no es la cola del s¨²per.
La sanidad privada se ha vendido siempre como una opci¨®n r¨¢pida para los pacientes, pero en Madrid se produce una situaci¨®n inusual de espera para acceder a determinados especialistas de hasta tres meses, urgencias colapsadas y tel¨¦fonos de atenci¨®n al paciente que suenan sin que nadie conteste. No es un problema generalizado, sino que depende de las especialidades. En Asisa, por ejemplo, el jueves de la semana pasada un paciente encontraba cita sin necesidad de esperar demasiado si ten¨ªa un problema de medicina interna, cardiolog¨ªa u otorrinolaringolog¨ªa. Uno o dos d¨ªas como mucho. El problema llegaba con especialidades como la de urolog¨ªa, traumatolog¨ªa o dermatolog¨ªa, en las que hab¨ªa que aguardar un mes, de media, para ver al doctor. En algunos casos, m¨¢s de tres. Sin saber qu¨¦ significaba eso, pues la web no permit¨ªa saber las razones.
Este problema se ha convertido en una sorpresa desagradable para numerosos madrile?os que en muchos casos han huido de la sanidad p¨²blica precisamente para evitar las extremas listas de espera en las que se encuentran casi 900.000 personas: una de cada siete en la Comunidad de Madrid.
La patronal de la sanidad privada no ha publicado datos sobre tiempos de espera desde 2019. En aquel momento, antes de la pandemia, seg¨²n el informe de indicadores de la sanidad privada de la Fundaci¨®n Idis, un think tank de los grandes grupos del sector, lo com¨²n era una espera media de 30 minutos en urgencias y no m¨¢s de dos semanas en las primeras consultas con especialistas, una rapidez que se hab¨ªa convertido en uno de los valores m¨¢s importantes para el usuario. Ahora, los representantes sindicales de los trabajadores sanitarios del sector privado reportan que lo com¨²n es esperar entre uno y tres meses para una cita en ¨¢reas como dermatolog¨ªa, reumatolog¨ªa, pediatr¨ªa, traumatolog¨ªa o psiquiatr¨ªa. Algo que empieza a desesperar.
?Qu¨¦ est¨¢ pasando? La explicaci¨®n, seg¨²n los sindicatos, es que el sistema privado no se ha preparado para la avalancha de clientes que han recibido durante y debido a la pandemia. El n¨²mero de madrile?os con seguro privado ha crecido un 10% desde 2019 (241.000 m¨¢s, hasta llegar a 2,5 millones de asegurados), seg¨²n la patronal de los seguros Unespa.
¡°Y somos los mismos para atender a mayor volumen de pacientes¡±, critica Samuel Mosquera, responsable de sanidad privada en CC OO Madrid. UGT va m¨¢s all¨¢, pues denuncia que en algunos centros incluso ha ca¨ªdo el n¨²mero de m¨¦dicos. ¡°Los especialistas se van a la p¨²blica porque la privada les paga casi igual por mucho m¨¢s trabajo¡±, afirma Teresa Benavides, portavoz de sanidad privada en Madrid de ese sindicato.
La patronal responde que el n¨²mero de sanitarios ha crecido un 6%, a pesar de las dificultades para encontrar profesionales, debido a su escasez en Espa?a, un problema que se extiende tambi¨¦n a la p¨²blica. ¡°Seguimos precisando la incorporaci¨®n de nuevos profesionales, con una necesidad media-alta de enfermer¨ªa en el 95% de nuestros hospitales y de m¨¦dicos en el 58%¡±, dice un portavoz de la Alianza para la Sanidad Privada Espa?ola (Aspe).
Aspe apunta a la pandemia para explicar la causa de los retrasos, que han supuesto un incremento de las listas de espera en el conjunto de patolog¨ªas y pruebas de diagn¨®stico no relacionadas con la covid y un aumento de la preocupaci¨®n por la salud. ¡°Se ha producido mayor saturaci¨®n, sobre todo en urgencias [lo que equivaldr¨ªa a la atenci¨®n primaria del circuito p¨²blico], pero no en la mayor¨ªa de las especialidades o en quir¨²rgico, con capacidad holgada¡±, a?ade el portavoz de Aspe.
A pesar de este deterioro en el servicio, la sanidad privada puede presumir de m¨¢s rapidez que la p¨²blica madrile?a, que se encuentra en una situaci¨®n tan cr¨ªtica que algunos pacientes reciben citas para 2024. De los 886.668 madrile?os en la lista de espera p¨²blica, 510.887 llevan m¨¢s de tres meses aguardando.
Pero eso no sirve de consuelo a los clientes de la privada que conocieron tiempos mejores, como Pilar Corral, una jubilada de M¨®stoles de 65 a?os. Es usuaria de la privada desde hace 40 a?os y nunca hab¨ªa sufrido tardanzas hasta que en noviembre de 2020 le dieron cita con el reumat¨®logo para tres meses m¨¢s tarde en el Hospital Quir¨®nsalud Sur, en Alcorc¨®n, al sur de Madrid. Desde entonces ha soportado continuos retrasos para sus revisiones peri¨®dicas. La gota colm¨® el vaso el pasado 4 de abril, dos d¨ªas antes de una nueva consulta, cuando recibi¨® una llamada del hospital para cancelar la cita porque el doctor hab¨ªa dejado de trabajar con el centro. Corral qued¨® en el limbo: ¡°La doctora que le sustituy¨® ten¨ªa un atasco terrible, as¨ª que no consegu¨ª verme con ella hasta mediados de junio¡±.
El grupo Quir¨®nsalud ha declinado hacer comentarios.
Vasos comunicantes
Para reducir las listas de espera de la p¨²blica, las comunidades aut¨®nomas est¨¢n derivando a pacientes de la sanidad p¨²blica a hospitales privados a cambio de una compensaci¨®n econ¨®mica de las administraciones. Aspe niega que esas derivaciones causen un mayor atasco en la privada. ¡°La tarta de los pacientes de la privada en Espa?a nos indica que solo 15 pacientes de cada 100 vienen de los conciertos¡±, dice su portavoz.
Mientras los expertos intentan explicar el porqu¨¦ del deterioro, los pacientes se desesperan. Carlos Gonz¨¢lez, un jubilado que vive en el noreste de Madrid, se reconoce como otro de los usuarios decepcionados con la privada. El jueves pasado se marchaba frustrado del HM Sanchinarro, cerca de su casa, porque al pedir cita para un chequeo rutinario con el ur¨®logo le dijeron que no hab¨ªa hueco en el calendario y que deb¨ªa preguntar de nuevo en un par de d¨ªas. ¡°Esto no pasaba antes. La privada ya no es como hace 10 a?os¡±, se quejaba. ¡°Mi mujer y yo tenemos la privada porque era mucho m¨¢s r¨¢pido, pero cada vez se ven m¨¢s aglomeraciones¡±.
Una portavoz del grupo HM Hospitales apunta tambi¨¦n a la crisis de la covid como causa de las demoras: ¡°Ha aumentado la demanda, pero m¨¢s que por el crecimiento de los seguros, comprobamos que es como consecuencia de una mayor siniestralidad por la paralizaci¨®n de la actividad sanitaria por la pandemia¡±.
La pareja de Gonz¨¢lez, Mar Ortiz, sal¨ªa con ¨¦l tambi¨¦n desesperada, aunque consciente de que, a pesar de todo, se sienten afortunados. Una familiar se hizo recientemente una mamograf¨ªa en el Hospital del Henares y le dieron cita para darle los resultados en agosto de 2023, un a?o despu¨¦s. ¡°Aqu¨ª como mucho puedo tardar 15 d¨ªas para ver a mi ginec¨®logo y para m¨ª eso no es espera¡±, aseguraba el jueves a las puertas del hospital, antes de volver a casa.
Este lunes y martes su marido llam¨® para pedir cita con el ur¨®logo. La respuesta fue la misma en ambas ocasiones: ¡°A¨²n no hemos abierto la agenda. Vuelva usted a llamar ma?ana¡±.
?Tienes m¨¢s informaci¨®n? Escribe a los autores de este reportaje a fpeinado@elpais.es y bferrero@elpais.es
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