Mamograf¨ªas a 20 euros: Madrid paga 80 millones por derivar pacientes de la sanidad p¨²blica a la privada pura

Un gasto liliputiense para una administraci¨®n con un presupuesto de 22.000 millones de euros llega en junio al Consejo de Gobierno de Isabel D¨ªaz Ayuso: 2.660 euros para el Hospital Beata Mar¨ªa Ana por realizar ¡°sin concierto¡± mamograf¨ªas y pruebas complementarias. Ese pago min¨²sculo por haber atendido a pacientes de la sanidad p¨²blica en la privada es la punta del iceberg de un gasto mayor: desde 2016, la Administraci¨®n regional ha pagado casi 80 millones de euros (77,6) para que seis centros asistenciales que forman parte de la asociaci¨®n Hospitales Cat¨®licos de Madrid y otras empresas hagan mamograf¨ªas, atiendan a pacientes con da?os cerebrales irreversibles o asuman ingresos psiqui¨¢tricos, seg¨²n informaci¨®n obtenida por EL PA?S en aplicaci¨®n de la ley de transparencia. Justo cuando el Gobierno de la naci¨®n impulsa la ley de equidad y universalidad del Sistema Nacional de Salud, que busca limitar al m¨ªnimo imprescindible las derivaciones a la sanidad privada, la pirueta es doble: Madrid no solo cuenta para estas coberturas con la sanidad p¨²blica, o con la privada concertada. Tambi¨¦n env¨ªa a los pacientes a centros privados puros firmando contratos espec¨ªficos.

¡°En este nuevo esc¨¢ndalo de la gesti¨®n sanitaria de la Comunidad hay tres componentes que se refuerzan entre s¨ª¡±, denuncia Jos¨¦ Manuel Freire, exconsejero de Sanidad del Pa¨ªs Vasco, exdiputado del PSOE y profesor em¨¦rito del Departamento de Salud Internacional de la Escuela Nacional de Sanidad. ¡°El primero, un grave abandono de inversiones muy necesarias en radiolog¨ªa y otros equipamientos, pero tambi¨¦n, y especialmente, en camas de media y larga estancia¡±, plantea. ¡°En segundo lugar, un uso ineficiente de los recursos p¨²blicos disponibles, clar¨ªsimo en el caso de las mamograf¨ªas¡±, contin¨²a. ¡°Y en tercer lugar, una mala gesti¨®n que incumple sus propias normas y compra servicios discrecionalmente sin la cobertura contractual de un concierto¡±, a?ade. ¡°Este incumplimiento, en parte, se debe a haber jibarizado y descapitalizado la administraci¨®n sanitaria; y otra parte deriva de un estilo de gesti¨®n tipo cortijo. A ello se a?ade la querencia del PP por el sector privado¡­¡±

Ingresos de pacientes

Estas afirmaciones causan sorpresa en el Gobierno regional, donde se destaca que el sistema p¨²blico se ha apoyado en el privado desde hace a?os. ¡°Estos contratos se hacen para agilizar la atenci¨®n a los pacientes, por necesidades asistenciales que exceden la capacidad actual del sistema, y no es necesario realizarlos mediante concierto¡±, detalla un portavoz gubernamental.

La parte del le¨®n de esta partida de gasto son los ingresos de pacientes (76,7 millones de euros) y no las pruebas diagn¨®sticas (960.000 euros).

Entre los receptores de las derivaciones desde la sanidad p¨²blica est¨¢n la mayor¨ªa de los centros integrados en la red Hospitales Cat¨®licos de Madrid, que ha declinado hacer declaraciones y que est¨¢ formada por centros privados, muchos de ellos sin ¨¢nimo de lucro, seg¨²n su p¨¢gina web: el complejo asistencial Benito Menni; el Sanatorio San Francisco de As¨ªs; el Hospital Beata Mar¨ªa Ana; el Hospital de la Venerable Orden Terciaria San Francisco de As¨ªs; la Cl¨ªnica San Miguel de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Coraz¨®n de Jes¨²s, o el Hospital San Rafael. Adem¨¢s, en el listado de receptores de pacientes de la p¨²blica tambi¨¦n se incluyen la Cl¨ªnica de Nuestra Se?ora de la Paz de la Orden Hospitalaria San Juan de Dios, sin ¨¢nimo de lucro, o la Cl¨ªnica Santa Elena; uniones temporales de empresas como Analiza Sociedad Diagn¨®stico, o empresas como el Centro M¨¦dico Maestranza, o la Cl¨ªnica Sear.

Para Marciano S¨¢nchez-Bayle, presidente de la Federaci¨®n de Asociaciones en Defensa de la Sanidad P¨²blica, los 77,6 millones derivados al sector privado son una manera ¡°de jibarizar los servicios p¨²blicos¡± que se hace de una manera ¡°invisible¡± para que la poblaci¨®n no se d¨¦ cuenta. Por ejemplo, argumenta, desde el mismo momento en que a una ciudadana la llaman por tel¨¦fono y le ofrecen una cita en 15 d¨ªas para realizarle una mamograf¨ªa en un centro privado. ¡°Y si responde que es que a ella la est¨¢n llevando en La Paz, por ejemplo, le dicen que si la quiere ah¨ª tendr¨¢ que esperar cuatro meses. Claro, la gente quiere que se lo hagan cuanto antes, y acepta. Pero hemos comprobado con gente que trabaja en los propios hospitales que muchas veces mienten en esas listas de espera¡±, explica. ¡°Hay una pol¨ªtica clar¨ªsima de deterioro de la sanidad p¨²blica para fomentar el uso del sector privado¡±.

Esa denuncia sobre el funcionamiento del sistema contrasta con la firme defensa de la colaboraci¨®n entre la sanidad p¨²blica y la privada que hizo el martes el consejero Enrique Ruiz-Escudero, a ra¨ªz de la nueva ley estatal, que busca priorizar la gesti¨®n p¨²blica directa, limitando al m¨ªnimo imprescindible las derivaciones a la privada y minimizando la diferencia de prestaciones en funci¨®n de la comunidad aut¨®noma.

¡°La voz de las comunidades debe ser escuchada y tenerse en cuenta¡±, dijo el asesor de Ayuso. ¡°Algo que no ha ocurrido en el caso de la ley de equidad y universalidad del Sistema Nacional de Salud¡±. Y remat¨®: ¡°[Es] un error may¨²sculo que supone un retroceso evidente. Es una norma de marcado sesgo ideol¨®gico que va a empobrecer la calidad asistencial y que ataca de forma injusta e intencionada a la sanidad privada¡±.

Investigaci¨®n parlamentaria

Basta examinar el expediente que deriv¨® en el gasto de 2.660 euros aprobado en junio por realizar mamograf¨ªas en el Beata Mar¨ªa para entender c¨®mo funciona el sistema. En 2019, las mamograf¨ªas se pagaban a 20 euros. Ese era tambi¨¦n el coste de las pruebas complementarias a las que pudieran obligar los resultados, seg¨²n consta en las facturas emitidas por el centro.

¡°Esto es una manera de sacar el dinero del circuito p¨²blico, lo que est¨¢ nutriendo a la sanidad privada con el objetivo, supuestamente, de sacar adelante la listas de espera¡±, denuncia Juli¨¢n Ord¨®?ez, portavoz de Sanidad de UGT en la Comunidad de Madrid. ¡°Hay que tener claro que es un desv¨ªo de dinero p¨²blico para algo que se podr¨ªa hacer mucho m¨¢s barato en la p¨²blica si estuviera bien dotada¡±, reclama.

¡°Ese dinero significa una renuncia a la gesti¨®n directa a trav¨¦s del Servicio Madrile?o de Salud cuando se necesita financiaci¨®n, m¨¢s personal y m¨¢s medios¡±, coincide ?ngela Hern¨¢ndez, portavoz del sindicato m¨¦dico Amyts.

En la misma l¨ªnea se expresa Mariano Mart¨ªn-Maestro, portavoz de CC OO: ¡°En lugar de dinero para personal, se prefiere financiar la privada¡±, lamenta.

Los casi 80 millones gastados desde 2016 son una cifra lo suficientemente importante como para haber provocado un peque?o terremoto pol¨ªtico. Eso asegura Javier Padilla, diputado de M¨¢s Madrid en la Asamblea, el partido con m¨¢s diputados de la oposici¨®n al Gobierno de Ayuso.

¡°Las listas de espera de pruebas diagn¨®sticas en nuestra comunidad no paran de crecer, y eso sirve para alimentar sin freno a m¨²ltiples centros privados que viven en parte de lo que les contrata lo p¨²blico¡±, dice sobre las mamograf¨ªas. ¡°Hacerlo a base de partidas menores sin concierto es algo que tendremos que investigar parlamentariamente, pero que a primera vista parece claramente irregular¡±, advierte. Y protesta: ¡°El sistema sanitario p¨²blico no puede ser una fuente que riegue de dinero a las empresas privadas, mientras no se dimensiona para afrontar las pruebas y consultas que su poblaci¨®n necesita¡±.

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