El pacto de Ayuso con Glovo para distribuir comida a poblaci¨®n vulnerable: sin almuerzos entre semana y 29.000 env¨ªos al a?o

El Gobierno de la Comunidad de Madrid y la multisancionada Glovo firmaron el 17 de marzo un convenio para distribuir comida entre la poblaci¨®n vulnerable de la regi¨®n que recoge cl¨¢usulas para evitar que ese servicio gratuito interrumpa la marcha diaria del negocio. Desayunos y cenas deben ser solicitados en ¡°horarios valle (ma?anas hasta las 12 y primeras horas de la tarde de 16 a 19 horas) y en las zonas habilitadas por Glovo en su aplicaci¨®n¡±. Y los almuerzos no se mandan entre semana. As¨ª se recoge en el texto del acuerdo, publicado en plena Semana Santa en el bolet¨ªn regional tras la pol¨¦mica que provoc¨® que en febrero se conocieran las negociaciones entre las dos partes. ?La raz¨®n? La compa?¨ªa, que ahora ofrecer¨¢ 80 servicios diarios y 29.000 anuales a usuarios de los cuatro comedores sociales p¨²blicos de la regi¨®n, ha sido sancionada con m¨¢s de 205 millones de euros por vulnerar los derechos de los trabajadores.

¡°El convenio establece 80 repartos [diarios], que pueden incluir varios desayunos, comidas o cenas para una sola persona o para varias, siempre con el l¨ªmite establecido de ocho kilos por env¨ªo¡±, explica un portavoz gubernamental, que a?ade que es posible entregar varios d¨ªas de comidas de una sola vez porque los platos correspondientes a los desayunos y cenas de toda la semana, y a los almuerzos del fin de semana, se env¨ªan ya cocinados y envasados. ¡°Las comidas de lunes a viernes, en cambio, se preparan y sirven en las instalaciones¡±, a?ade este interlocutor para explicar que el almuerzo de lunes a viernes no sea parte del acuerdo con Glovo. ¡°No obstante, en casos justificados de enfermedad temporal o problemas que impidan totalmente su desplazamiento al comedor por un tiempo, tambi¨¦n se les enviar¨¢ la comida de esta franja a su casa¡±, a?ade.

20 de febrero. La oposici¨®n estalla ante el contenido de la comparecencia del director general de Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid, Ignacio Ayres, que avanza que ser¨¢ la Administraci¨®n quien elija a los solicitantes beneficiarios (en funci¨®n de problemas de salud temporales, movilidad reducida, o minusval¨ªa) y luego se erige en el mejor defensor de la compa?¨ªa. As¨ª, llega a citar un art¨ªculo de Expansi¨®n que recoge que dos sentencias dan la raz¨®n a Glovo en su pugna con el Ministerio de Trabajo. Una noticia a la que la oposici¨®n contrapone otros datos. Por ejemplo, que Glovo ha sido castigada por actuar de forma improcedente con 37.348 falsos aut¨®nomos o trabajadores extranjeros sin permiso de trabajo. Y que eso le ha supuesto sanciones por 205,3 millones de euros, 125,3 millones en multas y 80 millones en actas de liquidaci¨®n de cotizaciones.

¡°?Qu¨¦ demonios hace la Comunidad de Madrid lav¨¢ndole la cara a una empresa multirreincidente que si se ha destacado por algo ha sido precisamente por la vulneraci¨®n de los derechos de los trabajadores y de las trabajadoras?¡±, pregunta, indignado, Emilio Delgado, de M¨¢s Madrid, el diputado que llev¨® la pol¨¦mica a la C¨¢mara y pidi¨® explicaciones a la consejera del ramo, Concepci¨®n Dancausa.

¡°Ustedes no salen del modelo caritativo y del modelo del voluntarismo¡±, se queja Lorena Morales, del PSOE, en alusi¨®n a la erosi¨®n de los servicios p¨²blicos y a la apuesta gubernamental por depender de la buena disposici¨®n de la iniciativa privada, que en Madrid ya se ocupa, por ejemplo, de atender parte de la lista de espera de atenci¨®n temprana. ¡°?Si no viene una empresa a regal¨¢rselo, no lo pensaban hacer? ?Y lo van a hacer por parches?¡±, inquiere sobre el env¨ªo de comida a los beneficiarios con problemas de movilidad. ¡°Porque, como Glovo no les va a dar la comida a estas personas, no comen; solo desayunan y cenan los d¨ªas de diario y, luego, ya veremos c¨®mo hacemos lo de la comida y si encontramos otra entidad que nos lo haga gratis¡±.

¡°Detr¨¢s de esto hay lobistas que han pensado que ser¨ªa una buena manera de publicidad gratuita para una empresa como Glovo¡±, critica Paloma Garc¨ªa Villa, de Podemos. ¡°Yo creo que esto es algo ideol¨®gico, que ustedes creen que el modelo de Glovo es un modelo adecuado, que la gente trabaje a comisi¨®n sin un sueldo y como falsos aut¨®nomos les parece bien¡±.

Ninguna de esas cr¨ªticas impide la firma del acuerdo, en el que se adquiere el compromiso de que los datos obtenidos solo se apliquen para dar el servicio. Son muchos los precedentes de la coordinaci¨®n entre el gobierno de Ayuso (que visit¨® la sede de Glovo en 2021) y empresas privadas relacionadas con la comida. As¨ª, durante lo peor de la pandemia del coronavirus, la presidenta regional defendi¨® m¨²ltiples veces enviar men¨²s de Telepizza, Rodilla o Viena Capellanes a familias con derecho a beca de comedor por ser perceptoras de la renta m¨ªnima de inserci¨®n (RMI).

Este peri¨®dico solicit¨® aclaraciones sobre el convenio a Glovo, sin obtener respuesta. El acuerdo con la Administraci¨®n estar¨¢ en vigor hasta finales de a?o, aunque existe la posibilidad de prorrogarlo cuatro a?os m¨¢s.

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