Una de cal y otra de arena para las familias afectadas por los ¡°protocolos de la verg¨¹enza¡±

El foco de la investigaci¨®n de las muertes indignas de 2020 en las residencias de mayores de Madrid var¨ªa continuamente y este martes la noticia estaba en el juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 4. All¨ª, en la plaza de Castilla, varias hijas de los fallecidos reaccionaron con desencanto cuando su abogado, Andr¨¦s Ollero, sali¨® a la calle al t¨¦rmino de una vista judicial para hacer un pron¨®stico poco halag¨¹e?o. ¡°Esto se acabar¨¢ archivando¡±, les dijo. ¡°Tiene muy mala pinta¡±. El caso que defiende Ollero, que representa a familias agrupadas por la asociaci¨®n Pladigmare, afecta a siete personas fallecidas en dos residencias de Madrid. Es una de los cientos de querellas que llegaron a los juzgados despu¨¦s del per¨ªodo de marzo y abril de ese a?o en que estuvieron vigentes los ¡°protocolos de la verg¨¹enza¡±, las pautas que la Comunidad de Madrid envi¨® a los hospitales para impedir que los enfermos de covid de las residencias saturaran los hospitales.

Ollero dice que el juez tiene suficiente informaci¨®n como para llamar a declarar al menos al exconsejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, pero sabe que no lo va a hacer. ¡°No van a llamar a ning¨²n pol¨ªtico. Eso es una medida que no va a tomar ning¨²n juez de primera instancia¡±, vaticina Ollero. ¡°Para ellos estos casos son una patata caliente¡±.

Su pesimismo contrasta con una noticia esperanzadora para las familias la semana pasada. El viernes se supo que un juzgado en el municipio de Collado Villalba est¨¢ examinando la posible responsabilidad penal de la presidenta Isabel D¨ªaz Ayuso y dos de sus entonces consejeros, Escudero y el exresponsable de Justicia e Interior, Enrique L¨®pez. Es una medida extraordinaria porque el resto de jueces se est¨¢n limitando a investigar a los profesionales en residencias y hospitales que cumpl¨ªan los protocolos, sin indagar qu¨¦ hicieron los pol¨ªticos.

A la vista de este martes en Plaza de Castilla asisti¨® como testigo Carlos Mur, el alto cargo de esa consejer¨ªa que firm¨® los protocolos. Confirm¨® una vez m¨¢s que los distribuy¨® a residencias y hospitales. Tambi¨¦n se los envi¨® a su jefe, Escudero. Mur actuaba seg¨²n un plan de la Consejer¨ªa de Sanidad, que en los primeros d¨ªas de marzo instaur¨® un nuevo sistema para admitir enfermos de residencias, con el fin de evitar que estos mayores colapsaran los hospitales. La consejer¨ªa encarg¨® a un grupo de geriatras, uno por hospital, la tarea de filtrar el acceso con la indicaci¨®n de dejar fuera a los pacientes con poca autonom¨ªa (quedaban fuera los encamados y en sillas de ruedas).

Tambi¨¦n declararon dos geriatras que recibieron esos documentos, en el Hospital Fundaci¨®n Jim¨¦nez D¨ªaz y en el Ram¨®n y Cajal. Dijeron que los aplicaron y que eran de obligado cumplimiento, seg¨²n cont¨® luego Ollero. Los siete fallecidos fueron rechazados de modo telef¨®nico por estas doctoras, que este martes aseguraron que analizaron cada posible derivaci¨®n caso a caso.

Seg¨²n las fuentes presentes en la vista, cerrada a la prensa, el juez y el fiscal apenas hicieron preguntas, lo que Ollero entiende que es una muestra del poco inter¨¦s por el caso. ¡°De la Fiscal¨ªa no esper¨¦is nada¡±, le dijo a las hijas de las v¨ªctimas. ¡°Est¨¢n ah¨ª para cubrir el expediente¡±. La Fiscal¨ªa madrile?a ha sido muy criticada por las familias. En muchos casos los fiscales han pedido el archivo sin siquiera haber o¨ªdo a las familias. La fiscal madrile?a Almudena Lastra lleg¨® a decir en 2021 que los protocolos no eran obligatorios, a pesar de lo que han dicho los responsables de las residencias y los geriatras de los hospitales.

Mur lleg¨® al juzgado desde Andorra, donde trabaja ahora como jefe de psiquiatr¨ªa en la sanidad p¨²blica. En junio se hab¨ªa ausentado porque el juzgado no pudo localizarle. Vest¨ªa un traje negro sin corbata y cargaba un portafolio rojo que abri¨® para hacer consultas en el pasillo, antes de que le llamaran para declarar en la sala. Su posici¨®n era inc¨®moda porque en funci¨®n de lo que dijera el juez pod¨ªa cambiar su condici¨®n de testigo a investigado. Adem¨¢s, una veintena de familiares le esperaba en la calle con una pancarta que dec¨ªa: ¡°Fueron abandonadas a su suerte¡±.

Un amigo que le acompa?¨® durante la declaraci¨®n le hizo el favor de buscar un taxi mientras ¨¦l esperaba dentro del edificio para as¨ª evitar el encontronazo. Ya pas¨® por una escena as¨ª en marzo, cuando fue citado tambi¨¦n como testigo en otra causa semejante en los juzgados de Plaza de Castilla.

Este martes, Mur pod¨ªa ver desde el vest¨ªbulo a los familiares y las c¨¢maras de televisi¨®n congregados a las puertas de los juzgados. Mientras esperaba la llamada de su amigo, contaba que le sigue doliendo hablar de este tema. ¡°A¨²n lloro cuando recuerdo esos d¨ªas. Igual le pasa a otros m¨¦dicos que se dejaron la piel aquellos d¨ªas¡±, afirmaba. ¡°Lo peor es que sigue sin hacerse nada para medicalizar las residencias. ?C¨®mo puede ser que haya residencias de hasta 600 residentes con tres enfermeras y un m¨¦dico?¡±

Entonces, son¨® su tel¨¦fono y sali¨® a la calle con paso ligero. Una familiar lo reconoci¨® al ver su media melena canosa: ¡°?Mur, Mur, Mur!¡±, grit¨®. Y el resto de los concentrados estall¨® en gritos: ¡°!Asesino, asesino, asesino!¡±. El taxi se march¨® y all¨ª quedaron varias mujeres que rompieron en l¨¢grimas.

Mur debe volver a Madrid el 7 de noviembre para declarar ante la jueza de Collado Villalba. Ese caso lo llevan abogados de otra asociaci¨®n de familias, Marea de Residencias. La jueza hab¨ªa sobrese¨ªdo el caso respecto a Ayuso y sus dos consejeros, pero la Audiencia Provincial le ha obligado a reabrirlo. Ayuso, que visita estos d¨ªas Nueva York, ha dicho que est¨¢ convencida de que la jueza prepara el ¡°archivo definitivo¡±.

Pero los familiares no dan su brazo a torcer. Piden llevar sus casos, si hace falta, hasta la justicia europea. Una de ellas clamaba desconsolada este martes a las puertas de los juzgados. ¡°?Los llevaron a morir! Mi t¨ªa Chelo no estar¨ªa muerta porque no estaba enferma. Yo pregunt¨¦ a la residencia Nogales Pac¨ªfico por qu¨¦ no la llevaron al hospital y me dijeron que ten¨ªan un papel, una orden¡±.

?Tienes m¨¢s informaci¨®n? Contacta al autor en fpeinado@elpais.es o fernandopeinado@protonmail.com

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