La Universidad de Oviedo es la primera en hacer p¨²blica la relaci¨®n de obras de arte incautadas durante la Guerra Civil

Diecinueve cuadros, en su mayor¨ªa retratos en ¨®leo sobre lienzo de los siglos XVIII y XIX, incautados por ambos bandos durante la Guerra Civil, principalmente en la zona de Madrid, componen el grueso del fondo antiguo de arte de la Universidad de Oviedo, la primera del pa¨ªs en hacer p¨²blico el listado de las obras que desde 1942 tiene en dep¨®sito y en asumir la posible devoluci¨®n a sus leg¨ªtimos propietarios.

Un trabajo casi detectivesco ha permitido que la Universidad asturiana saque a la luz este listado de obras que lleva cuidando y custodiando desde hace m¨¢s de ocho d¨¦cadas y que se encuentran colgadas en los muros del rectorado, el edificio hist¨®rico de la Universidad y la Facultad de Derecho. Llegaron a esta instituci¨®n desde la Junta de Incautaci¨®n -anteriormente Junta del Tesoro- de entre las miles que se expoliaron por ambos bandos durante el conflicto b¨¦lico.

Nueve piezas cuentan con una identificaci¨®n total y no hay duda de que provienen de la Junta de Incautaci¨®n, mientras que otros siete cuadros es ¡°muy probable¡± que tengan el mismo origen, al igual que otras dos sobre las que no hay una documentaci¨®n completa.

Gracias a la intensa investigaci¨®n de Ana Quijada, responsable de Patrimonio de la universidad, y al compromiso de la vicerrectora de Extensi¨®n Universitaria y Proyecci¨®n Cultural, Mar¨ªa Pilar Garc¨ªa Cuetos, tambi¨¦n experta en patrimonio, ha sido posible presentar ahora este dep¨®sito art¨ªstico de la instituci¨®n.

La vicerrectora Garc¨ªa Cuetos recalca que la universidad asturiana asume ahora la misma posici¨®n que ya hizo el Museo del Prado. ¡°Lo honesto es hacerlo p¨²blico. Es de justicia dejar claro que esos a?os tan dif¨ªciles para el patrimonio tuvieron como resultado la incautaci¨®n, dispersi¨®n y reubicaci¨®n de buena parte del patrimonio espa?ol y la Universidad de Oviedo ha actuado como depositaria de los bienes, cuid¨¢ndolos y protegi¨¦ndolos¡±.

La colecci¨®n art¨ªstica de la Universidad de Oviedo est¨¢ conformada por m¨¢s de mil elementos de diversa naturaleza y, dentro de ella, cabe destacar por sus especiales caracter¨ªsticas el llamado Fondo Antiguo, proveniente, en una gran parte, del dep¨®sito de la Comisar¨ªa General del Patrimonio Art¨ªstico Nacional.

En este momento hay tres tipos de obras de esta ¨¦poca. Primero, aquellas identificadas a trav¨¦s de la correspondiente etiqueta de la Junta, con el recibo y la fotograf¨ªa localizada en el archivo del Instituto del Patrimonio Cultural de Espa?a (IPCE) en el que se encuentra la documentaci¨®n sobre estos fondos, por tanto, de identificaci¨®n precisa. Segundo, obras que, por labor de archivo, se deduce que provienen del dep¨®sito, pero sin alguno de los ¨ªtems mencionados en el caso anterior, es decir se ha llevado a cabo una identificaci¨®n parcial, aunque altamente probable. Y tercera, cuadros sin referencia alguna, pero que posiblemente provengan (por su tem¨¢tica, por su antig¨¹edad) de los dep¨®sitos de la Junta. Es una posibilidad, aunque no sean identificables ni en el recibo ni en el archivo.

¡°Si de primera mano tuvi¨¦ramos que se?alar las peculiaridades m¨¢s relevantes de estas obras, es la falta de relaci¨®n entre las piezas y el discurrir de la historia acad¨¦mica. Los elementos que forman este fondo no fueron adquiridos a lo largo del devenir de la vida universitaria desde su puesta en marcha, en 1608, hasta nuestros d¨ªas, sino que fueron creados y concebidos de manera ajena a la instituci¨®n y llegaron despu¨¦s de la Guerra Civil¡±, afirma Ana Quijada.

La historia de los bienes culturales de la Universidad de Oviedo ha estado marcada por dos puntos de inflexi¨®n, ambos ligados a acontecimientos b¨¦licos. El primero de ellos fue el expolio que sufri¨® durante la invasi¨®n francesa, que dej¨® menguada la colecci¨®n hist¨®rica. El segundo, mucho m¨¢s dram¨¢tico y asolador, fue el incendio que arras¨® con toda la universidad en octubre de 1934, durante los hechos de la conocida como Revoluci¨®n de Octubre y que puso fin a todo lo que se hab¨ªa salvado de la invasi¨®n, que la instituci¨®n hab¨ªa ido acumulando a lo largo de sus m¨¢s de 300 a?os de andadura.

Ana Quijada explica que, a partir de la reconstrucci¨®n del Edificio Hist¨®rico, cuyo proyecto data del mismo a?o 34, la adquisici¨®n de bienes de car¨¢cter art¨ªstico e hist¨®rico se convirti¨® en una cuesti¨®n acad¨¦mica. La actuaci¨®n de los ¨®rganos de gobierno y de la Asociaci¨®n de Antiguos Alumnos y Amigos de la Universidad de Oviedo en esta materia fue siempre encaminada a no perder de vista el objetivo de decorar con estilo, a poder ser de manera muy similar a como se encontraba antes de la destrucci¨®n, con mobiliario de imitaci¨®n, cuadros, objetos de plata, cer¨¢micas, alfombras, tapices¡­

Procedencia y valor

El listado dado a conocer por la Universidad de Oviedo forma parte de la ingente investigaci¨®n llevada a cabo por el profesor Arturo Colorado sobre las universidades que fueron depositarias de bienes provenientes de la Comisar¨ªa y que fueron muy pocas, entre ellas, la de Valladolid, con 30 piezas; la de Murcia, con 7; el Colegio Mayor Cisneros de la Universidad Complutense, con 67 y la de Oviedo con 19, seg¨²n consta en el recibo de entrega.

En el caso de Asturias, una parte relevante de los fondos que llegan a la Universidad fueron incautados por organizaciones como la CNT y la Agrupaci¨®n Socialista Madrile?a, que no realizaban un registro sistematizado de las obras por varias cuestiones, entre ellas por desconocimiento, ya que no contaban con el personal t¨¦cnico adecuado que s¨ª ten¨ªa la Junta. ¡°Cuando la Junta incautaba obra, emit¨ªa tres recibos, uno para ella, otro para el propietario y otro para el ministerio, de esta manera, la procedencia quedaba registrada y no en los otros casos. Una de las caracter¨ªsticas m¨¢s relevantes de la Junta fue sin duda la existencia de personal altamente cualificado que trabaj¨® en condiciones muy duras¡±, indica Ana Quijada.

Esta falta de informaci¨®n hace muy dif¨ªcil la identificaci¨®n de la procedencia y, por tanto, de los due?os reales de las piezas. As¨ª, de las 19 obras depositadas en la Universidad de Oviedo, nueve no estaban etiquetadas, es decir, ni tan siquiera se sabe cu¨¢l fue el organismo incautador, incluso pudieron llegar a los dep¨®sitos una vez finalizada la guerra y ser fruto de incautaciones y movimientos posteriores. ¡°Muy probablemente, la Comisar¨ªa otorg¨® obras a la Universidad de Oviedo por la gran cantidad de arte que ten¨ªa en los dep¨®sitos, piezas que no hab¨ªan sido reclamadas, miles que pasaron a constituir un verdadero problema¡±.

Tampoco hay una valoraci¨®n econ¨®mica de estos cuadros y solo uno de ellos lleg¨® a la Universidad con una valoraci¨®n de mil pesetas de la Caja General de Reparaciones, organismo creado por la Rep¨²blica para incautar bienes de quienes hab¨ªan apoyado el alzamiento. Se trata de un retrato de Beethoven de Escuela Alemana del siglo XVIII.

De las paredes de la Sala de Togas del edificio hist¨®rico de la universidad asturiana cuelga otro retrato de Francisco Pignatelli, que no aparece en el recibo de entrega de la Junta de Incautaci¨®n, pero que s¨ª cuenta con una etiqueta trasera que especifica que la obra fue incautada por la Agrupaci¨®n Socialista de Madrid, y un lienzo al que han bautizado como Retrato de literato, cuya procedencia se desconoce.

Pero, independientemente de la procedencia, ¡°lo que s¨ª sabemos es que la universidad tiene la obligaci¨®n de custodiar, salvaguardar e investigar estas piezas, aunque no le pertenezcan. La convulsa historia de estas piezas y de su procedencia no nos exime, sino todo lo contrario, de nuestra responsabilidad como universidad¡±, concluye la vicerrectora de Extensi¨®n Universitaria. La instituci¨®n acad¨¦mica baraja ahora la posibilidad de realizar una exposici¨®n tem¨¢tica con las 19 obras en dep¨®sito.