Europa aspira a revivir su industria de componentes
La regi¨®n busca crear una cadena de producci¨®n continental para reducir una excesiva dependencia de Asia que genera problemas de suministro
El precio de los paneles solares es el doble que hace tres a?os. Y hemos visto c¨®mo el coste del transporte desde Asia, fundamentalmente desde China, se multiplicaba por 10: un contenedor de 40 pies [12 metros] pas¨® de algo menos de 2.000 d¨®lares la unidad a 18.000. Es uno de los suministros m¨¢s estresantes que tiene nuestra compa?¨ªa y que nos produce un alto nivel de inseguridad¡±.
Jos¨¦ Luis Morlanes, consejero delegado del grupo Alter Enersun, explica as¨ª las dificultades que ha sufrido en los dos ¨²ltimos a?os para adquirir m¨®dulos fotovoltaicos; primero por la pandemia, despu¨¦s por la tensi¨®n en la cadena de suministros y ahora por la guerra en Ucrania. Este es el ¨²nico componente que no se fabrica en Espa?a y se importa principalmente desde China ¡ªcon dos tercios del mercado¡ª, pero tambi¨¦n desde Vietnam, Corea del Sur, Malasia, Tailandia e Indonesia, y que supone el 35% del coste de un proyecto solar, seg¨²n la Uni¨®n Espa?ola Fotovoltaica (Unef).
¡°El suministro de paneles a Europa est¨¢ en manos de menos de 10 compa?¨ªas. Los compradores hemos perdido poder de negociaci¨®n. Las empresas asi¨¢ticas imponen sus condiciones, los precios se diferencian muy poco entre las distintas firmas, con el riesgo de una cultura contractual diferente y una cadena de provisi¨®n largu¨ªsima¡±, a?ade Morlanes, quien pide una pol¨ªtica europea que recupere la fabricaci¨®n en el continente.
Es lo que quiere el sector fotovoltaico espa?ol: reducir su dependencia de Asia gracias al impulso de una pol¨ªtica de reindustrializaci¨®n. ¡°Que toda la cadena de valor, desde la producci¨®n de silicio hasta el montaje final, se realice en Espa?a; ese es el desaf¨ªo¡±, proclama Jos¨¦ Donoso, director general de Unef. Aunque la intenci¨®n no es cubrir toda la demanda, aclara Donoso, sino 3 o 4 gigavatios (GW) al a?o. ¡°Nos permite que no nos quedemos colgados en una crisis; queremos un mercado competitivo, no una autarqu¨ªa¡±, subraya.
Hasta el 65% del coste de una planta fotovoltaica podr¨ªa ser suministrado por empresas espa?olas, recuerda. Incluso muchas de ellas son l¨ªderes mundiales: dos figuran en el top 10 de fabricantes globales de inversores y tres en el de seguidores. Pero es insuficiente, sobre todo en un proceso de transici¨®n energ¨¦tica. El Consejo Europeo de Fabricantes de Energ¨ªa Solar cree que al menos el 75% de la demanda solar en Europa deber¨ªa cubrirse con producci¨®n nacional. Esto implica construir 60 GW de capacidad de fabricaci¨®n en la UE para 2026.
Una situaci¨®n similar sufre la e¨®lica. ¡°El aumento de los precios del acero, del transporte y los cuellos de botella en la cadena de suministro encarecen las turbinas. Los fabricantes est¨¢n absorbiendo estos costes adicionales, cuando sus contratos con los promotores no est¨¢n indexados debido al tiempo que transcurre entre el pedido de un aerogenerador y su entrega real¡±, ilustra Tom¨¢s Romagosa, director t¨¦cnico de la Asociaci¨®n Empresarial E¨®lica (AEE).
Adem¨¢s, China comienza a comer terreno. ¡°Casi todos los aerogeneradores que se instalan en Europa se fabrican en la UE, pero los fabricantes chinos empiezan a recibir pedidos porque sus precios son m¨¢s competitivos¡±, avisa. Romagosa cita tambi¨¦n las medidas arancelarias y de antidumping de terceros pa¨ªses, o las pol¨ªticas proteccionistas de pa¨ªses como EE UU, que ha impuesto un gravamen del 73% a la importaci¨®n de torres e¨®licas de Espa?a, expulsando del mercado americano a los fabricantes.
Plan del Gobierno
En respuesta al reclamo del sector y debido a la debilidad competitiva que supone esta dependencia en plena crisis energ¨¦tica, el Gobierno anunci¨® a principios de este mes, en el Foro Solar de Unef, que Espa?a va a liderar un proyecto de inter¨¦s comunitario (IPCEI, por sus siglas en ingl¨¦s) para fomentar la fabricaci¨®n de paneles solares en Europa. ¡°Tenemos que conseguir m¨¢s autonom¨ªa estrat¨¦gica y seguridad energ¨¦tica¡±, defendi¨® en la cita Sara Aagesen, secretaria de Estado de Energ¨ªa. Mientras que Joan Groizard, director del Instituto para la Diversificaci¨®n y Ahorro de la Energ¨ªa (IDAE), adelant¨® en dicho encuentro que ya est¨¢n en conversaciones con otros Estados miembros para presentar en breve a la Comisi¨®n Europea una propuesta s¨®lida. La intenci¨®n es atraer fondos europeos.
¡°Tenemos una oportunidad y una limitaci¨®n porque esos recursos vencen en tres a?os y debemos abordar antes las inversiones¡±, admite Donoso, quien considera que una buena parte de los proyectos tiene que venir de financiaci¨®n propia. Morlanes calcula que el desarrollo de esta industria puede tardar entre 5 y 10 a?os. ¡°Tiene que ser un objetivo europeo, como se ha hecho con las bater¨ªas¡±, insiste. No hay a¨²n previsiones sobre inversi¨®n ni empleo.
Pero las fotovoltaicas agregan otras peticiones. Que el volumen de fabricaci¨®n est¨¦ en torno a los 5 GW m¨ªnimo; que la f¨¢brica se encuentre lo m¨¢s cerca de un mercado demandante de inversiones fotovoltaicas; que los materiales (aluminio, vidrio, pl¨¢stico) est¨¦n pr¨®ximos a la instalaci¨®n; que la propia solar sirva para abastecer de energ¨ªa a la planta y as¨ª abaratar los costes energ¨¦ticos; incentivos fiscales, beneficios en la adjudicaci¨®n de las subastas y una financiaci¨®n m¨¢s ventajosa por favorecer la producci¨®n local, detalla Christopher Atassi Morales, CEO de Gonvarri Solar Steel. Demandas a las que se suma la e¨®lica. ¡°Urge un replanteamiento estrat¨¦gico a escala nacional y europeo para defender a los principales sectores industriales como la e¨®lica y conseguir que las f¨¢bricas, los centros de producci¨®n y los de desarrollo tecnol¨®gico permanezcan en Espa?a¡±, sostiene Romagosa.
Pese a los cuellos de botella en la cadena de suministro, el despliegue de la solar no se ha frenado. ¡°Los a?os 2020, 2021 y 2022 han sido los de mayor instalaci¨®n solar en Espa?a. La potencia instalada pas¨® de 8,7 a 17,8 GW, sin contar el autoconsumo¡±, apunta Alejandro Labanda, director de transici¨®n ecol¨®gica de beBartlet, quien ve tambi¨¦n positivo contar con dicha industria para una mayor autonom¨ªa de Espa?a y la UE.
Otros materiales cr¨ªticos
El panel fotovoltaico no es el ¨²nico componente que escasea en Espa?a y Europa. Hay varios minerales ¡ªlitio, silicio, cobre, cobalto, n¨ªquel, aluminio, grafito, zinc¡ª que son imprescindibles en la fabricaci¨®n de tecnolog¨ªas limpias y cuya extracci¨®n y procesado est¨¢n concentrados en muy pocos pa¨ªses, con China otra vez a la cabeza.
Un informe reciente de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa, The Role of Critical Minerals in Clean Energy Transitions, indica que una estructura solar o e¨®lica y un coche el¨¦ctrico necesitan m¨¢s minerales que otra de combustibles f¨®siles. As¨ª, por ejemplo, una instalaci¨®n e¨®lica requiere nueve veces m¨¢s que una planta de gas. El organismo calcula que en 2040, de cumplirse los objetivos del Acuerdo de Par¨ªs, la demanda global de cobre y tierras raras aumentar¨¢ un 40%; la de n¨ªquel y cobalto, un 60%-70%, y la de litio, un 90%. En 2050, ese consumo se multiplicar¨¢ por seis.
En el caso de la UE, Bruselas estima que la demanda de tierras raras, utilizadas en imanes permanentes para veh¨ªculos el¨¦ctricos, tecnolog¨ªas digitales o generadores e¨®licos, y que provienen en un 98% de China, podr¨ªa multiplicarse por 10 de aqu¨ª a 2050. Ante esta perspectiva, se teme que llegue una futura crisis de materiales similar a la que se sufre hoy con el gas ruso.
Sin embargo, Juli¨¢n Cubero, analista sobre cambio clim¨¢tico de BBVA Research, asegura que se van a potenciar antes estrategias que favorezcan la seguridad energ¨¦tica: ¡°Diversificando las cadenas de valor con proveedores alternativos, favoreciendo la eficiencia en el uso de materiales mediante la I+D, impulsando el reciclaje para su reutilizaci¨®n y fortaleciendo la gobernanza de un comercio internacional abierto y no discriminatorio¡±.
Y que, de producirse una crisis, ser¨ªa distinta. ¡°Las de energ¨ªa f¨®sil, como la actual, son agudas por la desa?parici¨®n de una parte de la oferta, mientras que las de minerales ser¨ªan m¨¢s persistentes al afectar tanto al combustible como al equipamiento, con impacto en precios al alza, pero efectos menos inmediatos, y con m¨¢rgenes de actuaci¨®n a trav¨¦s de la econom¨ªa circular¡±, explica.
¡°No podemos pasar de una dependencia f¨®sil de unos pa¨ªses a otra de materiales. Mientras no tengamos una presencia m¨¢s fuerte en las materias primas y los procesos productivos de la transici¨®n, estaremos en una posici¨®n de debilidad que hay que corregir¡±, opina Labanda.
Para ¡°evitar caer en la misma trampa que con el petr¨®leo y el gas¡±, seg¨²n la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, el Ejecutivo comunitario anunci¨® la promulgaci¨®n de una ley europea de materiales cr¨ªticos ¡ªen consulta hasta el 25 de noviembre y que se prev¨¦ que entre en vigor en el primer cuatrimestre de 2023¡ª y de un fondo (por un monto a¨²n sin fijar) para reducir esa dependencia. El Gobierno espa?ol, en l¨ªnea con Europa, aprob¨® en agosto una hoja de ruta que, entre otros objetivos, busca fomentar la industria de materias primas minerales de car¨¢cter estrat¨¦gico para la transici¨®n energ¨¦tica y digital.
Iniciativas solares en marcha
Ya hay varios proyectos en marcha para reindustrializar Europa. La empresa Meyer Burger ha abierto una fábrica de células y módulos solares en Alemania, con una capacidad inicial de 400 megavatios (MW). Su intención es ampliarla a 3 gigavatios (GW) en 2024 y hasta cinco a largo plazo. La inglesa Oxford PV cuenta con una de 100 MW en la región alemana de Brandeburgo que produce células tándem, silicio cristalino y perovskita.
En Francia, la start-up Carbon impulsa una gigafactoría de 5 GW cuya apertura está prevista para 2025. Y en España, Aurinka proyecta instalar otra con capacidad para 300 MW si resulta ganadora de un concurso convocado por el Miteco para la reconversión de la central térmica de Andorra. Destaca también la Iniciativa Solar Europea, con el apoyo de la Comisión Europea y EIT Innoenergy, para la producción de toda la cadena de valor, desde el polisilicio hasta los módulos, con una capacidad prevista de 20 GW para 2025.
Mientras que Enel Green Power ha obtenido financiación europea para escalar su fábrica de células y paneles bifaciales en Catania (Sicilia) desde los 200 MW hasta los 3 GW. Además, resaltan más iniciativas en Noruega y Portugal.
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