Ensalada de arroz con mejillones en escabeche

Hace poco preparamos una barbacoa a base de pescado y otras maravillas en la que dimos buena cuenta de sardinas, calamares de potera, navajas, berberechos, un par de ensaladas y alguna que otra botella de vino. Cuando ¨ªbamos a buscar la sand¨ªa del postre, nos dimos cuenta de que en el fragor de la batalla nos hab¨ªamos olvidado una olla de estupendos mejillones del Delta del Ebro en la cocina. Nadie se ve¨ªa con fuerzas para seguir con el fest¨ªn, pero Mikel y yo aparcamos por un rato las libaciones y las coreograf¨ªas de Rebeca las conversaciones sobre Kierkegaard y la f¨ªsica molecular para sacar los moluscos de su concha y dejarlos en su propio jugo para ¨Cal d¨ªa siguiente y con energ¨ªas renovadas¨C buscarles un plan alternativo. Que result¨® ser un escabeche, que finalmente se convirti¨® en una ensalada de arroz.

El escabeche m¨¢s que una receta es una t¨¦cnica, as¨ª que admite todas las variantes imaginables y m¨¢s. Yo me he lanzado a los c¨ªtricos porque creo que se llevan muy bien, pero tambi¨¦n se le pueden a?adir especias morunas e indias, como el an¨ªs estrellado, la canela o el cardamomo, o hacerle viajar hasta Asia con un toque de jengibre, lemongrass o pimienta de Sichuan. Por supuesto se pueden escabechar muchas otras materias primas, y no solo cosas que salen del mar como at¨²n, sardinas o caballa: las codornices o perdices, las berenjenas, el pollo o la pechuga de pavo ¨C la?receta de Mikel es una aut¨¦ntica delicia¨C sacan lo mejor de si mismos cuando se preparan de esta manera.

Si la potencia del vinagre resulta excesiva para algunos de los comensales, se puede sustituir la mitad por el l¨ªquido de cocci¨®n de los mejillones, esa maravilla de sabor at¨®mico que se consigue cuando se abren ¨¦stos ¨Csin aceite ni vino ni nada¨C en una olla tapada, a fuego alegre y dando unas vueltas de vez en cuando para que el calor se reparta uniformemente. Si no quer¨¦is que la ira de Neptuno caiga sobre vosotros, no comet¨¦is el error de tirar esa maravilla de jugo: ponedla en t¨¢pers o bolsas con zip y congeladlo para alegrar paellas, sopas de pescado y ¨Cconvenientemente reducido¨C platos de pasta a la marinera.

Si sois unos vagos o ten¨¦is unos buenos mejillones en escabeche al alcance de la mano, pod¨¦is hacer la ensalada con ellos, mezclando el escabeche con un poco de zumo de lim¨®n para aportar frescura. Es la mar de sencilla porque a) la receta-receta son los mejillones, lo otro es lo que en las latas de conservas llaman ¡°sugerencia de presentaci¨®n¡±, y b) la servimos junto a una sopa fr¨ªa que era un festival de los vegetales, con lo que tampoco necesitamos ponerle demasiados ingredientes. Si quer¨¦is convertirla en un plato ¨²nico, pod¨¦is a?adir un poco m¨¢s de arroz, daditos de tomate, aceitunas, pimiento asado o cualquier cosa que se os ocurra, siempre recurriendo al sentido com¨²n (los que lo teng¨¢is, los que no casi mejor preguntadle a alguien).

Dificultad:

Para bivalvos.