Cena y recena: ?es el resop¨®n una buena costumbre o un desprop¨®sito?

El vaso de leche antes de irse a la cama tiene la culpa: a partir de ah¨ª, que si una pizza contra la cogorza, que si un caldito contra el biruji, que si una mesa dulce para salir a pie de la boda. La palabra "resop¨®n" procede del catal¨¢n, pero su pr¨¢ctica se ha extendido por todos los rincones. Seg¨²n el diccionario, significa lo mismo que "recena", tiene lugar cuando pasa mucho tiempo entre la cena oficial y el momento de acostarse, y consiste en un picoteo ligero.

Pero oye, que se lo digan al banquete de empanadillas que te salv¨® la vida en Nochevieja. O a ese helado que te consol¨® despu¨¦s de una ruptura. Nada sabe mejor que un poco de queso cuando trasnochas en compa?¨ªa. Y ?qui¨¦n no ha desayunado un plato de pasta despu¨¦s de una noche de fiesta? Porque s¨ª, el resop¨®n es supervivencia; pero tambi¨¦n es guirigay.

Advertencias m¨¦dicas, historias personales y unas cuantas propuestas de resop¨®n plagan este art¨ªculo, que est¨¢ pensado para quienes terminan el a?o arramplando con los restos de la cena, pero tambi¨¦n para quienes buscan una alternativa m¨¢s ligera. Preguntamos a los expertos, que eval¨²an los efectos de la 'cena B' sobre la resaca, y a los amigos, que comparten sus ideas de andar por casa y sus puestos de emergencia tras la discoteca.

A vueltas con la recena

"En principio, no es muy saludable comer inmediatamente antes de irse a dormir, pero hay personas que tienen problemas para conciliar el sue?o si no toman algo. En ese caso, se recomienda un alimento suave", nos explica Clotilde V¨¢zquez, jefa de Departamento de Endocrinolog¨ªa y Nutrici¨®n en el Hospital Universitario Fundaci¨®n Jim¨¦nez D¨ªaz. Ahora bien, la doctora desaconseja convertir esta pr¨¢ctica en un h¨¢bito. "Porque cuando una persona se acostumbra a picar mientras se queda viendo la televisi¨®n, puede acabar realizando ingestas muy copiosas, a base de palomitas, patatas chips, dulces¡­ Una rutina adictiva y poco saludable", alerta. En caso de padecer insomnio, es mucho mejor pedir ayuda y ajustar los biorritmos.

Pongamos que estamos hablando de personas mayores, o con problemas digestivos, que no pueden cenar mucho y necesitan renutrirse un poco. O de diab¨¦ticos que, en ciertas pautas de insulina, toman un resop¨®n para evitar hipoglucemias. "Tambi¨¦n est¨¢n quienes deben seguir con la actividad f¨ªsica o mental como, por ejemplo, quienes trabajan en el turno de noche. En este caso, necesitan ingestas que no sean copiosas ni grasas", explica la doctora. Si es verano, una ensalada o una fruta constituyen buenas opciones, y si es invierno, una infusi¨®n o un vaso de leche tibia caliente, con una porci¨®n de carbohidratos en ambos casos. Y con ello, se abre el debate sobre los efectos somn¨ªferos de los l¨¢cteos.

Se ha discutido largo y tendido acerca de la relajaci¨®n que produce el vaso de leche, algo que V¨¢quez relaciona con "el efecto g¨¢strico de la llegada del alimento", pero tambi¨¦n "con el porcentaje de carbohidrato -tanto en la lactosa como en la fructosa de leches vegetales. y la peque?a cantidad de tript¨®fano que tiene la prote¨ªna l¨¢ctica". Y aunque no rechaza la costumbre, considera mejor apostar por una infusi¨®n. Por el contrario, si lo que quieres es mantener cierta actividad nocturna, la tentaci¨®n del chocolate caliente no es tan punible como pensamos. Ahora bien, en contadas ocasiones y teniendo en cuenta que, en altos niveles de concentraci¨®n, el cacao puede acabar produciendo insomnio.

Expiar los pecados del alcohol

Vale, hasta aqu¨ª hemos aguantado la santidad: ahora hablemos de la borrachera. Ning¨²n otro estado ha hecho m¨¢s por el resop¨®n o la recena. Todos sabemos que es importante limitar el consumo de alcohol, y todos sabemos tambi¨¦n que en Navidad no es lo habitual. As¨ª que puestos a pecar, mejor tener toda la informaci¨®n. "Mientras se bebe, es adecuado comer, sobre todo para prevenir una intoxicaci¨®n aguda. Como la absorci¨®n del alcohol es m¨¢s lenta, conseguimos que el h¨ªgado y las reservas de vitamina B se adecuen mejor", explica la doctora V¨¢zquez. Sin embargo, no conviene sobrecargar de trabajo a nuestro cuerpo, que bastante bien se porta, por lo que las grasas no convienen.

Ya, ya, t¨² pensabas que s¨ª. Quer¨ªas chuletas, embutidos y quesos, pero venimos a fastidiarte la fiesta.

"Si antes del resop¨®n ha habido una cierta ingesta alcoh¨®lica, lo que reclaman mi cuerpo y mi alma son bocatas calientes y platos de pasta. Hidratos, contundencia, efecto esponja y una cama cerca", reconoce M¨°nica Escudero. Pero nada garantiza que eso te vaya a librar de la resaca. Despu¨¦s de bailar como las maracas de Mach¨ªn, tu cuerpo salsero y exhausto pide clemencia y energ¨ªa inmediata. Pero puestos a recobrar fuerzas, los expertos recomiendan alimentos ricos en B1, como cereales integrales, prote¨ªnas, ensaladas y frutas. No te voy a caer bien si te digo que, al d¨ªa siguiente, no encargues una pizza: mejor bebe zumo de naranja y come ciruelas, o cualquier fruta que te hidrate.

En El Comidista cuidamos de ti, o al menos lo intentamos. Hemos publicado recetas para superar el gran resac¨®n del a?o -que es el de A?o Nuevo-, e incluso les preguntamos sus remedios a los chefs para contrarrestar, que no evitar, el armagued¨®n. Pero tampoco nos olvidamos de la seguridad dom¨¦stica, porque hemos tenido experiencias edificantes y somos fuente de sabidur¨ªa. "Una cosa que recomiendo encarecidamente en estos casos es no meterse en jardines que incluyan elaboraciones largas, complicadas o peligrosas. Si creerse Ferran Adri¨¤ cuando vas chispa es facil¨ªsimo, quedarte sopa en el sof¨¢ mientras se cuecen unos espaguetis o estar torpe mientras manipulas la sart¨¦n con aceite tampoco es complicado. Cualquier cosa que puedas recalentar o un bocata ser¨¢ mejor", advierte la editora comidista.

Algunos casos particulares (con ideas generales)

"Al resop¨®n, en mi casa, se le llama ¡®ratonear¡¯ y se ejerce desde tiempos inmemoriales, habitualmente de madrugada", reconoce nuestra compa?era Lakshmi Aguirre, y se?ala un amplio abanico de alimentos que rezuman calor¨ªas, "empezando por las galletas con mantequilla, cereales con leche, chocolate -han desaparecido tabletas enteras en una noche- o queso de cabra con pan y uvas (que una es ratona, pero no conformista)". Carlos Doncel tambi¨¦n tiene sus propias perversiones. "Algunas noches se aparecen ante m¨ª, cual virgen de F¨¢tima, las latas de melva en aceite de Mercadona. Busco pan, corto una buena rebanada, lo tuesto, echo los filetes de melva, un chorre¨®n de mayonesa y, por qu¨¦ no, un poco de picante de la salsa que haya en la nevera. Luego me siento a comerme el bocadillo mientras miro fijamente una losa del suelo", es su buc¨®lico relato.

Por eso, mejor seguir el ejemplo de M¨°nica Escudero, quien apuesta por las opciones saludables "para esos t¨ªpicos d¨ªas entre semana en los que cenas a las 20 horas como si fueras europea, pero te quedas leyendo hasta la 1 muy espa?olamente y te ruge el est¨®mago". Encuentra consuelo en una pieza de fruta, los tomates cherry o, si el hambre es de otro tipo, "en cualquier resto de sopa y crema recalentada en invierno, o gazpacho y sopa fr¨ªa en verano".

Mikel L¨®pez Iturriaga tambi¨¦n ha aprendido la lecci¨®n con el paso del tiempo. "All¨¢ por la Edad Media, mi recena favorita eran las alb¨®ndigas con ensaladilla rusa, hab¨ªa kilos de ese maridaje en la nevera de mis padres. La pechuga de pavo en escabeche tambi¨¦n era un cl¨¢sico con efectos milagrosos. Ya en la Edad Contempor¨¢nea, cuando salgo por ah¨ª intento dejarme algo preparado para la vuelta. Un poco de jam¨®n y queso fresco, una tostadita con hummus o una sopa de d¨ªas anteriores me salvan la vida", constata.

Los restos de la cena o comida tambi¨¦n son una buen¨ªsima manera de quitarte la gusa nocturna con buena nota. ?Que ese trozo de tortilla de patata que ha quedado sobre el m¨¢rmol de la cocina te pone ojitos? No te preocupes, que ya sabe lo que le espera. ?Un trocito de pollo o merluza rebozada que no le cab¨ªa a alguien? Adelante, igual que a unas vainas con patatas recalentadas o un cuchar¨®n de lentejas (siempre que no sean tres platos o lleven kilos de embutido que te puede dar la noche: aqu¨ª la virtud est¨¢ en la mesura; si no tienes de eso mejor come otra cosa).

El resop¨®n que har¨ªa feliz a Rabelais

Joan Ruiz es conocido por su cuenta dedicada al 'esmozaret' valenciano, pero cuando le pregunto si el hambre le empuja a hacer resopones de emergencia, elimina todos los condicionales de la frase. "No es cuesti¨®n de tener hambre: para m¨ª es un indispensable de las comidas navide?as, en familia o con amigos. A mitad de la cena, siempre ficho cu¨¢l puede ser el plato candidato para despu¨¦s. Si se da la situaci¨®n de que no sobre nada, entonces se puede recurrir a una tabla de quesos y embutidos con pan", responde.

Entre las recenas m¨¢s pantagru¨¦licas que recuerda, menta un 26 de diciembre en casa de unos familiares. "Comimos, merendamos, cenamos y 'resopamos' a base de casquer¨ªa, crestas de gallo, callos, manitas, alb¨®ndigas, postres¡­", rememora, no sin nostalgia. Cuando sale de fiesta, tampoco perdona, y en distintas ciudades tiene sus lugares predilectos para resarcir el est¨®mago et¨ªlico. Por eso, nos ha transmitido algunas ideas de esta lista, y para el resto nos hemos buscado la vida. Aqu¨ª tienes algunas propuestas extra¨ªdas de conversaciones con taxistas, porteros de discotecas y amigos de hace dos horas: no son tan saludables como los tomates cherry, pero s¨ª tan perniciosas como la vida que merecemos.

LUGARES DONDE RECENAR

Lady Pepa

Malasa?a, pasta y tomate; nada puede salir mal. Este establecimiento clandestino de Madrid, que ¨²nicamente abre de madrugada (de 6 a 7.30 horas) y al que se accede con un c¨®digo, no se anda con chiquitas. Extienden el mantel de cuadros, sacan una cazuela de barro y te plantan unos espaguetis a la bolo?esa. Hay algunas opciones m¨¢s, todas castizas: lentejas, fabes o callos, junto con cerveza y agua.

Lady Pepa. San Lorenzo, 5. Madrid. Mapa.

Bar Bag¨®a

En plena Plaza Letamendi de Barcelona y con vistas a la delegaci¨®n de Hacienda encontramos el bar Bag¨®a, refugio nocturno de taxistas y noct¨¢mbulos que prefieren sentir el calor del amor en un bar, cenar tarde o recenar pronto (actualmente abren hasta las 3). Han cambiado de propietarios pero sus bocadillos de pata de jam¨®n asado -o ¡®jam¨®n canario¡¯- siguen igual de jugosos y ¨¦picos.

Bar Bag¨®a. Plaza Letamendi, 23. Barcelona. Tel. 934539066. Mapa.

El Horno de los Borrachos

En el nombre est¨¢ el relato, que se remonta a 1951, cuando ¨²nicamente hab¨ªa un establecimiento. Ahora son varios y se diseminan por toda Valencia. Valencianos de todas las generaciones han hecho cola frente a su mostrador, que anta?o ofrec¨ªa panader¨ªa y reposter¨ªa artesana. La oferta actual pasa por bocadillos, empanadillas y dulces que no te cambiar¨¢n la vida, pero s¨ª la noche.

El Horno de los Borrachos. Varias localizaciones. Valencia.

Ra¨ªces Galegas?

Tal y como nos cont¨® nuestro compa?ero Anxo F. Couceiro, el ¡°Ra¨ªces galegas abre estrat¨¦gicamente a las seis y pico de la madrugada para acoger a los primeros desertores que optan por un tentempi¨¦ previo a la cama en lugar de ir de after¡±. ?Qu¨¦ hay que pedir en este lugar de Santiago de Compostela? Ese combo ganador llamado tortizorza, que ofrece exactamente lo que promete: un bollo de buen pan gallego con un colch¨®n de tortilla y una buena porci¨®n de zorza -carne de cerdo adobada- por encima. Se comenta que despu¨¦s de su ingesta postfestiva puedes despertarte poco perjudicado aunque ya no seas un estudiante universitario (aunque ellos son sus principales usuarios).

Ra¨ªces Galegas. R¨²a Nova de Abaixo, 36. Santiago de Compostela. Tel. 981591947. Mapa.

Burger Carlos&Jos¨¦

Como los anuncios de Cofidis, los r¨²sticos food trucks de Carlos&Jos¨¦ aparecen en Sevilla para venderte su mercanc¨ªa aprovechando tu necesidad y debilidad de esp¨ªritu: hamburguesas, patatas fritas y perritos calientes al salir de las discotecas. Acabas de poner fin a una noche en la que has tocado tanto hielo como el Titanic, y justo al poner un pie en la calle, sea la hora que sea, te viene un olor a carne y salchichas a la plancha que te atrapa. Ni pan brioche ni vaca gallega a?ejada ni reducci¨®n de Pedro Xim¨¦nez: hamburguesas con queso, tomate y lechuga y perritos con mostaza y ketchup. Una simplicidad que sabe a gloria camino a casa al amanecer.

Burger Carlos&Jos¨¦. A la salida de las discotecas y en Amor de Dios, 56. Sevilla. Tel. 600381393.

Route 66 Diner

?Antojo de hamburguesa a la 1 de la ma?ana? No vives en Alburquerque, pero tampoco te hace falta. De jueves a domingo, Palma de Mallorca dispone de su propio dinner con cocina tex mex, donde faltan las camareras con jarras de caf¨¦, pero hay costillas a la barbacoa, perritos calientes, fajitas y chimichanga, entre otras exquisiteces, capaces de hacerte a?orar el turno de noche.

Route 66 Diner. Sant Mag¨ª, 23. Palma de Mallorca. Tel. 971736222. Mapa.

La Tortilla

Completamente exento de cualquier clase de glamour, La Tortilla nunca entrar¨¢ en la lista de The World¡¯s 50 Best Bars. Quiz¨¢ ni siquiera en la Bilbao¡¯s 50 Best Bars. Pero un establecimiento que lleva siglos abriendo cada d¨ªa a las 5 de la ma?ana, sirviendo tortillas reparadoras a trabajadores y cr¨¢pulas en igualdad de derechos, y aguantando a todo tipo de seres / residuos de la noche merece nuestro respeto.

La Tortilla. Plaza Ernesto Erkoreka, 4. Tel. 944455069. Mapa.