Arroz al horno

No s¨¦ yo si me meto en un berenjenal con esto de compartir la receta del arroz al horno. Siendo un plato tradicional de la gastronom¨ªa valenciana, seguro que sale quien se echa las manos a la cabeza porque no lleva rodajas de tomate, le he puesto bacon en lugar de una buena panceta o lleva colorante alimentario, el demonio de cualquier realfooder.

Pero oye, que esta es la receta que se lleva haciendo en mi casa desde que mis papilas gustativas tienen memoria y lleva morcilla de Ontinyent, la aut¨¦ntica, la de verdad, la que se traen mis padres cada vez que van a Valencia. Por lo dem¨¢s, cada casa es un mundo: mi t¨ªa, por ejemplo, le a?ade oreja de cerdo; mi abuela le pon¨ªa las cl¨¢sicas rodajas de tomate; y cuando la casualidad lo quiere as¨ª, mi madre utiliza una buena panceta ib¨¦rica en lugar de bacon.

Los ingleses hablan de comfort food para hacer referencia a esos platos que nos llevan a la infancia, sabores que activan la memoria gustativa, los receptores cerebrales del aroma y el convencimiento de que la comida hecha en casa sabe mejor. Nosotros, que somos m¨¢s campechanos, hablamos de la ¡°cocina de la abuela¡±, esa que se est¨¢ perdiendo y que, posiblemente, sea la generaci¨®n de mi madre la ¨²ltima que la represente tal y como la entendemos: casera, tradicional, de temporada. Bueno, pues el arroz al horno es mi comfort food, mi ¡°receta de la abuela¡±, la que me transporta a mi infancia cada vez que visito a mis padres y mi madre la cocina.

He visto hacer este arroz incontables veces y me he decido a documentarlo paso a paso. He pesado, medido y contado ingredientes porque, una de las cosas que tiene la cocina de la abuela es que se hace a base de ¡°chorritos¡±, ¡°pizcas¡±, ¡°pu?ados¡±, ¡°cucharadas¡± o el temido ¡°lo que admita¡±. Lo que s¨ª que quiero explicaros es el tema del arroz y el caldo, dos ingredientes ¨ªntimamente relacionados y de cuya proporci¨®n depende el ¨¦xito de la receta, pues cada tipo de arroz absorbe una cantidad de agua diferente (os adelanto que utilizamos arroz bomba).

Mi madre mide la cantidad de arroz en base a ¡°cazos¡± o ¡°cucharones¡±; me refiero al t¨ªpico cazo para coger caldo, el cual suele tener un volumen de 100 ml. Pone un cazo de arroz por comensal, lo que resulta en unos 100 g aproximadamente. A la hora de poner el caldo, pone el doble de cazos meno uno. ?Aja! Ya tenemos el temido ¡°lo que admita¡±. Es decir, si hace arroz para 4 personas, pone cuatro cazos de arroz y siete de caldo. Lleva toda la vida haci¨¦ndolo de este modo y es como lo tiene medido, y le sale. En la receta que os pongo, que es para 5 personas, hemos puesto 5 cazos de arroz (500 g) y 9 de caldo (900 ml). Es f¨¢cil de recordar, pero explicar esto en la receta se me hac¨ªa un poco de bola, as¨ª que os lo cuento aqu¨ª por si quer¨¦is variar las raciones. Espero que os guste.

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