Carlos Sainz Jr., atrevido en la pista y familiar fuera de ella

Carlos Sainz Jr., 25 a?os, tiene hambre de triunfo y sangre de ganador. De casta le viene al galgo. Su padre, el piloto de rallies Carlos Sainz, consigui¨® su tercer Dakar el pasado 18 de enero y se convirti¨®, con 57 a?os, en el piloto m¨¢s veterano en ganar esta carrera. El hijo ha heredado el esp¨ªritu persistente del padre y tambi¨¦n su af¨¢n por ganar. Lleva a?os demostrando que quiere hacerlo en su terreno, en la F¨®rmula 1, donde acaba de alcanzar un sue?o que solo rozan unos pocos: fichar con Ferrari para la pr¨®xima temporada.

No va de cabeza de equipo, pero sus compa?eros conocen la pasta de la que est¨¢ hecho y por eso Jenson Button, campe¨®n de F¨®rmula 1 en 2009, no ha dudado en elogiarlo con unas palabras que han dejado pensando a m¨¢s de uno: ¡°Binotto [en referencia a Mattia Binotto, director de la escuder¨ªa roja] ha ido a por Carlos porque cree que tiene buenas manos y era una buena oportunidad, pero yo creo que se ha equivocado, porque Carlos es un ganador, es como su padre¡±, dijo durante una entrevista en el canal de televisi¨®n Sky Sports.

Su familia est¨¢ de acuerdo en que la sombra del padre planea en el vuelo libre que desde hace a?os ha elegido su hijo, que hace ya unos cuantos dej¨® de ser Carlitos para ganarse ser conocido por ¨¦l mismo. Ahora a su nombre y apellido le acompa?a el calificativo de j¨²nior, porque hay dos Carlos Sainz ilustres en el mundo del deporte. Con ¨¦l es con quien el bicampe¨®n del mundo y tricampe¨®n del Dakar ha sido m¨¢s duro. El ni?o quer¨ªa ser piloto desde peque?o y su progenitor no estaba dispuesto a pon¨¦rselo f¨¢cil. Para correr, sus notas ten¨ªan que ser buenas, y con estas primeras exigencias el padre le traslad¨® las que se impon¨ªa a s¨ª mismo. Su madre, m¨¢s tranquila, m¨¢s dulce y ¡°con un coraz¨®n inmenso¡±, como la ha descrito su propio marido, dijo que Carlos padre ense?¨® al hijo a aguantar la presi¨®n inherente a la profesi¨®n que ha escogido. Los dos son competitivos entre ellos y, como buenos deportistas, cuando se enfrentan en cualquier tipo de disciplina ninguno da su brazo a torcer con facilidad. Rivalizan corriendo, jugando al golf, al p¨¢del, y el senior a¨²n mantiene cierta ventaja al squash, donde fue campe¨®n de Espa?a en 1979. Los dos son del Real Madrid y el m¨¢s joven admira a Sergio Ramos, Luka Modric, Courtois y a Cristiano Ronaldo. Y a Messi, pero solo cuando no juega contra su equipo.

Quienes le conocen afirman que a Carlos Sainz Jr. le gusta la vida sencilla y est¨¢ acostumbrado a la disciplina. Practica nataci¨®n, pesas, bicicleta y sigue una dieta estricta que se salta pocas veces pero en la que tienen cabida las hamburguesas y las pizzas, su comida favorita que tambi¨¦n afirma cocinar bien. De esp¨ªritu familiar, siempre ha vivido junto a sus padres y sus dos hermanas, Blanca y Ana, en la casa que tienen en la localidad madrile?a de Pozuelo de Alarc¨®n, pero a principios de 2019 se traslad¨® a Londres por exigencias de su contrato como piloto de McLaren, un objetivo que persegu¨ªa desde hace mucho tiempo, seg¨²n dijo ¨¦l mismo en sus redes sociales. La pandemia le hizo volver a casa, a su refugio familiar, donde comparte con su padre horas de entrenamientos en el completo gimnasio que tienen en su casa mientras espera que los circuitos vuelvan a rugir. All¨ª tambi¨¦n, seg¨²n ha confesado a medios especializados, se empapa viendo carreras hist¨®ricas y analizando muchas de las propias. Y all¨ª ha recibido la noticia de que la escuder¨ªa de il cavallino rampante, le quer¨ªa entre los suyos.

Para unos el apellido le ha facilitado el camino; otros, la mayor¨ªa, opinan que nadie le ha regalado nada y que el ni?o ha trabajado duro durante a?os, cuando su nombre no estaba bajo la lupa y la escasa presi¨®n le permit¨ªa ganar experiencia libremente. Seg¨²n han comentado periodistas deportivos, Sainz era muchas veces de los ¨²ltimos en abandonar los circuitos donde hab¨ªa competido primero con Toro Rosso y luego con MacLaren. Siempre quedaba trabajo por hacer, una caracter¨ªstica que tambi¨¦n le atribuyen a su padre los que han corrido junto a ¨¦l.

Si en la vida profesional a Carlos Sainz Jr. le va el riesgo inherente a la F¨®rmula 1, en la personal apuesta por la estabilidad que le proporciona su relaci¨®n sentimental con la periodista Isabel Hern¨¢ez, que tras graduarse en la Universidad Carlos III trabaja en el departamento de comunicaci¨®n de la marca Scalpers, donde comenz¨® como becaria. La joven, que antes fue novia de Ant¨®n Carre?o, componente del grupo musical Taburete, mantiene una relaci¨®n cercana con la familia Sainz y se lleva muy bien con las hermanas del piloto, especialmente con la menor de ellas, Ana. Pero ambos son discretos con este noviazgo que se remonta a principios de 2017 y del que, aunque es p¨²blico, evitan hacer ostentaci¨®n ante los medios de comunicaci¨®n. Ni se prodigan en actos sociales ni comparten fotos juntos en sus respectivas redes sociales.

La nueva etapa profesional con Ferrari traer¨¢ cambios para Carlos Sainz Jr. m¨¢s all¨¢ del lugar en el que deba establecer su cuartel general cuando se incorpore a su nuevo equipo el pr¨®ximo a?o. De momento, su imagen como personaje p¨²blico ha subido varios enteros y eso se notar¨¢ a corto plazo en los contratos publicitarios y en los patrocinadores que ver¨¢n en ¨¦l un reclamo digno de acuerdos mucho mejor remunerados. Sainz tiene planta, tranquilidad y educaci¨®n para ofrecer esa imagen de ¨ªdolo a imitar que tanto gusta a las marcas a la hora de escoger embajadores y estar dispuestas a pagar por ellos. El circo que mueve la F¨®rmula 1 tambi¨¦n ha acusado su cambio de escuder¨ªa, y la negociaci¨®n de los derechos de retransmisi¨®n de las carreras en televisi¨®n para Espa?a no parece que vayan a notar la crisis. Despu¨¦s de Fernando Alonso, otro espa?ol llega a primera l¨ªnea y eso a?ade inter¨¦s a la F1. Seg¨²n El peri¨®dico de Catalu?a el fichaje del madrile?o est¨¢ moviendo las cifras y quien quiera quedarse con esos codiciados derechos deber¨¢ abonar una cantidad m¨¢s pr¨®xima a los 100 millones de euros que a los 65 que se pagan actualmente.

Ya solo queda que el ni?o bien saque las garras y, como vaticina Button, no se conforme con ir a la cola de su compa?ero, el monegasco Charles Leclerc, y sit¨²e en los podios el n¨²mero 55 que luce en su dorsal. El mismo que eligi¨® cuando al llegar a la F¨®rmula 1, el 5, el que siempre le gust¨® desde ni?o, estaba en posesi¨®n de Sebastian Vettle, el mismo piloto que le ha abierto la puerta para llegar a Ferrari.