Carlos Sainz, en el gimnasio de sus padres
Los pilotos de F-1 usan simuladores y se inventan retos f¨ªsicos
Con Carlos Sainz como punta de lanza, McLaren fue uno de los equipos m¨¢s aplaudidos del pasado Mundial de F¨®rmula 1 por su esperanzador repunte. Esos piropos se reprodujeron y multiplicaron hace poco m¨¢s de una semana. La escuder¨ªa brit¨¢nica fue la que aceler¨® la suspensi¨®n, tarde y mal, del Gran Premio de Australia que el domingo d¨ªa 15 deb¨ªa estrenar el calendario. El positivo por Covid-19 de unos de sus integrantes motiv¨® la retirada de la carrera de la estructura de Woking, una decisi¨®n que provoc¨® una reacci¨®n en cadena. Hasta que se cancel¨® el evento. Entonces, McLaren puso en cuarentena a otros 14 de sus miembros en el hotel de Melbourne. Las autoridades sanitarias consideraron oportuno realizarles los ex¨¢menes a siete de ellos, y los resultados, obtenidos el mi¨¦rcoles pasado, dieron negativo.
A su regreso, Sainz, que desde hace un a?o traslad¨® su residencia a Londres para estar cerca del cuartel general de McLaren, decidi¨® volver a Madrid, a la casa de sus padres, donde voluntariamente se puso en cuarentena. El espa?ol tambi¨¦n se hizo el an¨¢lisis pertinente, que dio negativo. Y all¨ª, en la residencia familiar, har¨¢ lo que pueda para seguir con una rutina de entrenamiento de estar por casa, la ¨²nica permitida en la coyuntura actual.
¡°Es una situaci¨®n que nunca hab¨ªamos vivido antes, y estamos tomando todas las precauciones y m¨¢s. Por las circunstancias actuales, Carlos decidi¨® venir a casa a pasar estos d¨ªas tan delicados¡±, cuenta Carlos Sainz, el padre, a EL PA?S. ¡°Habla con su preparador (Rupert Manwuaring) y puede entrenarse bien, pero, eso s¨ª, hasta ahora siempre que pasaba por el gimnasio despu¨¦s ten¨ªamos que desinfectarlo todo¡±, detalla el campe¨®n del mundo de rallies y ganador del Dakar. ¡°Hasta que la prueba del coronavirus sali¨® negativa apenas ten¨ªamos contacto con ¨¦l para no arriesgarnos¡±, a?ade Sainz.
Durante lo que dure el par¨®n ¡ªlas primeras estimaciones apuntan a finales de mayo¡ª, los prototipos no perder¨¢n ni un 1% de su rendimiento por el hecho de estar parados. Sus conductores, s¨ª. Por eso, usan los simuladores y tratan de encontrar est¨ªmulos que les permitan mantener tan afilado como sea posible ese gen competitivo que les define.
Stuart Smith, un preparador de deportistas de ¨¦lite con mucha experiencia en el paddock de la F1, cree que el desaf¨ªo al que se enfrenta estos d¨ªas toda la parrilla es m¨¢s mental que f¨ªsico. ¡°Lo importante es mantener la motivaci¨®n, y por eso es bueno que cada uno se imponga retos que debe superar cada semana. Pueden ser f¨ªsicos (llegar a un n¨²mero concreto de abdominales, de burpees o de flexiones) y tambi¨¦n mentales. Ahora es cuando los entrenadores tienen que trabajar su imaginaci¨®n¡±.
Readaptarse a la velocidad
Las horas de ensayo al volante de un F-1 cada vez est¨¢n m¨¢s limitadas, por eso los simuladores han adquirido un peso capital en la puesta a punto. Es raro encontrar a un piloto que no disponga de uno, por m¨¢s que los hay, como Kimi Raikkonen, que los quiera bien lejos. No obstante, no son capaces de generar las sensaciones que transmite un b¨®lido a m¨¢s de 350 km/h. ¡°En la primera carrera a alguno le puede pasar lo mismo que a un futbolista que juega un partido despu¨¦s de estar mucho tiempo lesionado. Puede que le cueste recuperar ciertas sensaciones y su adaptaci¨®n a la velocidad requiera de unas vueltas. Pero el cuerpo es una m¨¢quina de memoria, y luego todo aflorar¨¢¡±, se?ala Stuart Smith.
?Y qu¨¦ ocurre con la forma f¨ªsica? ¡°La mayor¨ªa no perder¨¢ mucho tono. La pretemporada de un piloto dura un mes o un poco m¨¢s. No es como las de otros deportistas, como por ejemplo la de los jugadores de futbol australiano, que se alarga durante tres meses. En la F-1, si ganas un kilo o un kilo y medio lo puedes perder en menos de una semana si te pones a ello¡±, remacha Smith.
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