Le dijeron que no volver¨ªa a dibujar, hoy es uno de los ilustradores m¨¢s demandados: Jack Sachs, el hombre que puso un oso gigante en el Primavera Sound
El ingl¨¦s, hoy uno de los m¨¢s demandados del momento, sufri¨® un accidente en la mano derecha antes de terminar la carrera de Ilustraci¨®n. Hoy lanza una colecci¨®n c¨¢psula para Pull & Bear y colabora con ¡®The New Yorker¡¯
El aclamado dibujante Jack Sachs (Londres, 30 a?os) ten¨ªa la carrera de Ilustraci¨®n casi terminada y su estilo art¨ªstico totalmente definido cuando, una noche, en una fiesta, se clav¨® una copa de vino en la mano. ¡°Los m¨¦dicos me dijeron que lo m¨¢s probable es que nunca volviera dibujar¡±, rememora ahora, en Barcelona. ¡°Ni siquiera estaba borracho, acababa de llegar con un amigo y nos pusimos a hacer el tonto, como a pelear de broma, me ca¨ª y me apoy¨¦ sobre la copa de vino. Eso fue todo. D¨ªas antes de empezar el ¨²ltimo curso de carrera. Me qued¨¦ muy triste¡±, entona con impasibilidad inglesa.
Ese dia Sachs tom¨® una serie de decisiones: primero, acabar el curso a pesar de todo (¡°?con lo caro que hab¨ªa sido!¡±). Segundo, continuar consider¨¢ndose ilustrador, alguien que se ganar¨ªa la vida con sus dibujos. Tercero, aprender a dibujar de otra forma, si no con bol¨ªgrafo y a mano alzada como hasta entonces, con ordenador. ¡°Nunca hab¨ªa abierto ni el Adobe Illustrator, pero ten¨ªa un yeso enorme en el brazo derecho. Me puse a probar, un poco ciego de analg¨¦sicos, a dise?ar con la mano izquierda cosas muy b¨¢sicas¡±. Ocho a?os despues, Sachs es uno de los ilustradores m¨¢s demandados por sus miles de seguidores pero tambi¨¦n por las marcas. Ha colaborado con The New Yorker, Spotify y, m¨¢s especialmente, por la colecci¨®n c¨¢psula que ha dise?ado para Pull & Bear y el Primavera Sound 2022.
La explosi¨®n entre las ideas que siempre hab¨ªa expresado a mano y la disciplina t¨¦cnica que impone un ordenador le cambi¨® la vida. Su estilo siempre hab¨ªa sido expresamente na¨ªf y abstracto ¨Cun Phillip Guston formado en Tumblr¨C pero al chocarlo contra la concreci¨®n de la m¨¢quina y el 3D no se desmoron¨®, sino que se expandi¨®: las animaciones 3D primero convivieron con sus dibujos de siempre y luego acabaron d¨¢ndoles forma. ¡°Nunca me ha parecido que dibujase muy bien, lo hago como un juego, por dar rienda suelta a ciertas ideas que llevo dentro y experimento mucho. Pero para hacer algo en 3D s¨ª debes aprender dibujos t¨¦cnicos, procesos, programas¡ Y cada vez que aprendes una t¨¦cnica nueva para crear una forma tridimensional nueva, eso te inspira a hacer algo distinto con el dibujo. Y ese algo distinto te cambia tambi¨¦n la forma de entender el 3D. Una cosa inspira la otra continuamente. Todav¨ªa estoy buscando las f¨®rmulas de mezclaros¡±.
Tambi¨¦n descubri¨® una cosa nueva llamada color, hoy una de sus se?as de identidad. ¡°Todo lo que hac¨ªa a mano era blanco o negro. Mejor dicho, boli azul y boli negro. Con el ordenador tienes toda la paleta ah¨ª, gratis. Puedes sentarte y probar combinaciones y eso me fue animando a probar m¨¢s colores¡±. Sus dibujos son hoy directamente fl¨²or como una rave inglesa de los a?os ochenta. Tambi¨¦n tienen ojos de dibujo animado. ¡°Soy mucho de probar hasta d¨®nde puedo deformar una cara y que siga pareciendo una cara: mi conclusi¨®n es que si tiene ojos y boca, el resto da igual. Es una cara¡±.
Sachs se entronca en la generaci¨®n criada no ya por la cultura pop como los milenales mayores sino por el caos de los primeros d¨ªas de internet. Sus primeras referencias fueron los blogs que visitaba entre 2007 y 2009. ¡°Me pasaba el d¨ªa entero conectado¡ Esa est¨¦tica, esas ideas, ese nuevo medio lleno de promesas¡ Lo primero en lo que me fijaba era c¨®mo la gente creaba sus propias im¨¢genes, era imposible no dejarse influir por eso. Luego fui a visitar a unos amigos a Alemania y all¨ª la gente estaba haciendo algo todav¨ªa mejor: m¨¢s cool, m¨¢s local, m¨¢s propio, m¨¢s raro que lo que ve¨ªas en internet. Absorb¨ª todo eso¡±. Sachs, por si su pelo platino y sus piercings no lo delataban, ahora vive en Berl¨ªn.
Despu¨¦s de internet y Friedericshein, su siguiente mayor influencia fue el videoarte de los a?os ochenta. como Gretchen Bender o Pipilotti Rist: ¡°Cuando todav¨ªa se estaba experimentando con el ordenador, hab¨ªa cosas extremadamente raras. No se pod¨ªa hacer mucho con ¨¦l porque era tan b¨¢sico que ten¨ªan que inventarse lo que hacer¡±, se maravilla.
Este mes, Sachs ha visto la obra m¨¢s grande de su carrera. Primero, literalmente. El oso que dise?¨® para Pull & Bear se convirti¨® en un globo hinchable de 13 metros en el Primavera Sound. Segundo, por la cantidad de dise?os que ha creado para la colecci¨®n c¨¢psula de Pull & Bear. ¡°Tantos dibujos, tantas variaciones, tantas camisetas. Fue un proceso largo: ten¨ªa que encajarle al festival y a la marca, deb¨ªa ser todo de una forma muy concreta. El cliente quiere cosas vendibles, no las ideas abstractas que me salen de normal. Hay dibujos m¨ªos que ni reconocer¨ªas como un personaje. Pero este oso debia caerle bien a todo el mundo¡±.
Es todo parte de lo mismo, de esa decisi¨®n que tom¨® en el hospital, con el brazo roto y su futuro tampoco muy all¨¢, de seguir ilustrando. ¡°Ten¨ªa que acabar el curso¡±, insiste. ¡°Lo hab¨ªa empezado, deb¨ªa terminarlo. Y en cuanto vi que pod¨ªa trasladar mi mundo interior al 3D, supe que tendr¨ªa vida como ilustrador despu¨¦s de ¨¦l¡±.
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