?Seguro que tienes suficientes amigos? Por qu¨¦ la sociedad dice una cosa y la ciencia, lo contrario
Las redes sociales nos llevan a acumular cuantas m¨¢s amistades virtuales mejor. Pero los expertos avisan: la amistad requiere esfuerzo y es beneficiosa en t¨¦rminos de calidad y no de cantidad
?Cu¨¢nto dinero ganas? ?Cu¨¢nto sexo practicas? ?Cu¨¢ntos pa¨ªses has visitado? ?Cu¨¢ntas parejas has tenido?¡ Y, por supuesto: ?Cu¨¢ntos amigos tienes? ?Son suficientes? El ser humano tiende a preguntarse cu¨¢nto es suficiente, a comparar esos n¨²meros con otros ajenos y, en resumen, a cuantificar su vida. Las ficciones televisivas que m¨¢s han influido en la sociedad las ¨²ltimas d¨¦cadas ¨CFriends, C¨®mo conoc¨ª a vuestra madre, Sexo en Nueva York, Big Bang Theory¡¨C est¨¢n protagonizadas por grupos de amigos de entre seis y cuatro miembros que muestran un modelo de amistad, en muchas ocasiones dependiente e intrusiva, poco realista y a¨²n menos recomendable. ¡°Muchos modelos relaci¨®nales que vemos en las t¨ªpicas series de amigos, trasladados a la vida real, resultar¨ªan t¨®xicos porque suelen ser c¨ªrculos muy cerrados, con muy poca intimidad para sus miembros y con una especie de pacto impl¨ªcito que impide crecer m¨¢s all¨¢ del grupo. Y la realidad es infinitamente m¨¢s vers¨¢til, din¨¢mica y cambiante¡±, explica a ICON la psic¨®loga cl¨ªnica Violeta Alcocer.
¡°Actualmente la sociedad nos presiona para tener gran variedad de amigos, pero con el paso del tiempo la mayor¨ªa de las personas suelen contestar que los amigos reales se pueden contar con los dedos de una mano¡±, opina la tambi¨¦n psic¨®loga cl¨ªnica Mar¨ªa Hurtado, coordinadora de psicolog¨ªa online del centro AGS Psic¨®logos.
Hace 32 a?os, en 1990, el antrop¨®logo, psic¨®logo y bi¨®logo evolucionista Robin Dunbar public¨® un estudio en el que afirmaba que los humanos pueden mantener un n¨²mero limitado de amistades profundas. En ¨¦l matizaba que podemos manejar hasta 150 relaciones sociales, pero dentro de este rango, matizaba que la cantidad de relaciones de amistad cercanas y fuertes descend¨ªa a solo cinco. En los ¨²ltimos a?os, diferentes estudios coinciden y destacan que tener de tres a cinco amigos de verdadera confianza es suficiente para disfrutar de una vida social plena. Estos n¨²meros distan bastante de los amigos que la mayor¨ªa de los usuarios de aplicaciones como Instagram, TikTok o Twitter acumula en estas redes sociales. ¡°El principal problema de nuestra sociedad es que se est¨¢ inculcando la idea de que cuantos m¨¢s amigos se tengan mejor. Por eso se le da tanta importancia a los Me gusta y al n¨²mero de seguidores que se tienen en las redes sociales. Se valora la cantidad m¨¢s que la calidad cuando debe ser todo lo contrario¡±, comenta Mar¨ªa Hurtado.
¡°La sociedad responde al eco de las redes sociales, cuyo inter¨¦s prioritario es vincular la mayor cantidad de usuarios para poder disponer y cruzar sus datos con m¨¢s eficacia. El inter¨¦s de los ¨²ltimos a?os por tener muchos amigos virtuales y me gusta en realidad no es una necesidad que nazca del propio individuo para fomentar su bienestar (de hecho, no fomentan el bienestar sino todo lo contrario), sino el resultado de una manipulaci¨®n de la que s¨ª tenemos datos y evidencias. Desde el punto de vista de la salud mental, lo ideal es restringir el uso de las redes sociales y priorizar las relaciones reales, las conversaciones cara a cara y las amistades sanas, aunque sean pocas¡±, apunta Alcocer. Las amistades sanas, a?ade, son aquellas donde existe respeto mutuo y se permite el desarrollo personal m¨¢s all¨¢ de la propia amistad. No implican pactos ni exigencias y la distancia o el tiempo no representan una desconexi¨®n o una p¨¦rdida de calidad.
Algo que aprendimos durante la pandemia es que la soledad tambi¨¦n forma parte de la realidad. Una de los muchos efectos secundarios del confinamiento fue la perdida de aquellas amistades menos consolidadas, despu¨¦s de meses de restricciones sociales las relaciones con conocidos con los que pas¨¢bamos ratos agradables, pero a los que no llamar¨ªamos para ponernos al d¨ªa, se enfriaron. ¡°La vida a veces nos depara momentos de soledad y no pasa absolutamente nada siempre y cuando podamos restablecer nuestros lazos de amistad o crear nuevos cuando estemos preparados¡±, aduce Alcocer. Mar¨ªa Hurtado coincide y recuerda que los seres humanos somos seres sociales, y como tal estamos obligados a vivir en sociedad. Tener cerca a gente que nos cae bien, con la que nos permitimos bromear con cierta confianza sin llegar a profundizar en asuntos escabrosos o ¨ªntimos tambi¨¦n es importante. ¡°Nacemos dentro de un c¨ªrculo familiar en el que se fomentan las relaciones personales con padres, hermanos, t¨ªos, sobrinos, abuelos, etc. A medida que vamos creciendo vamos aumentando el n¨²mero de relaciones y entran en juego amigos, parejas y m¨¢s adelante jefes, compa?eros de trabajo o clientes. Todas ellas son determinantes en nuestra vida¡±. Seg¨²n el soci¨®logo Granovette, que en 1973 public¨® el popular ensayo La fuerza de los lazos d¨¦biles, estos v¨ªnculos m¨¢s superficiales son esenciales dado que nos muestran realidades diferentes y otras formas de pensar e informarnos.
La amistad, explican a ICON las especialista, es scomo cualquier otro v¨ªnculo entre personas: beneficiosa en t¨¦rminos de calidad y no de cantidad. Por ese motivo, es m¨¢s saludable contar con una o dos personas de confianza, a quien poder confesar lo que no hablar¨ªas con familia o parejas, que superar la decena de amigos pero no llegar a sentirse comprendido o escuchado. ¡°Cuando entramos en la edad adulta empezamos a diferenciar quienes son nuestros verdaderos amigos. Un buen amigo es, a fin de cuentas, aqu¨¦l que nos escucha, nos aporta soluciones a nuestros problemas sin juzgarnos, es sincero, y nos perdona si alguna vez cometemos errores. Por el contrario, aquellos que se acercan por el inter¨¦s, te ven como un rival, no est¨¢n cuando se les necesita o desvelan tus confidencias no son verdaderos amigos¡±, concluye Hurtado.
Con el paso de los a?os es natural que amistades que durante un tiempo fueron muy importantes cambien e incluso se acaben. Pero esto no quiere decir que el n¨²mero de amigos vaya disminuyendo irremediablemente a medida que cumplimos a?os. Lo normal es que estas amistades vayan sustituy¨¦ndose por otras de forma progresiva. ¡°La amistad y sus formas evolucionan seg¨²n las necesidades individuales y el momento vital que se est¨¢ atravesando. A medida que cambia nuestro estilo de vida predominan los amigos independientes que vamos conociendo en diferentes ¨¢mbitos, as¨ª como distintos grupos afines a nuestra situaci¨®n actual con los que adquirimos incluso m¨¢s calidad relaci¨®nal¡±.
Pero forjar amistades profundas requiere esfuerzo. Robin Dumbar afirm¨® en el estudio mencionado al inicio del art¨ªculo algo que todo ser humano ha experimentado en la pr¨¢ctica: para crear lazos fuertes con una persona hay que pasar tiempo con ella, y estar ah¨ª en los buenos y, sobre todo, en los malos momentos. Jeffrey A. Hall, profesor de la Universidad de Kansas, defendi¨® un estudio que es necesario pasar alrededor de 200 horas (algo m¨¢s de ocho d¨ªas completos) con alguien para conseguir la cercan¨ªa y la intimidad inherentes a las verdaderas amistades. Si Hall est¨¢ en lo cierto, mantener cinco grandes amistades requiere una inversi¨®n de 1000 horas. Casi 42 d¨ªas de nuestra vida que prueban que el n¨²mero que propone Dunbar es mucho m¨¢s abarcable que mantener los grandes grupos que la sociedad y las redes sociales venden como id¨ªlicos. S¨ª, hacer amigos resulta agotador. Qui¨¦n quiere diez pudiendo quedarse solo con cinco.
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