Bello, rico y eterno sospechoso: Robert Wagner, el hombre que am¨® a Natalie Wood y puede saber m¨¢s que nadie sobre su muerte

Hay dos palabras que planean sobre la carrera de Robert Wagner (Detroit, 93 a?os). ¡°Pr¨ªncipe valiente¡± fue el t¨ªtulo de la pel¨ªcula de aventuras que lo consagr¨® como el gal¨¢n de mand¨ªbula cuadrada del que se enamor¨® la juventud de medio mundo en los a?os cincuenta y tambi¨¦n es el nombre de la peque?a embarcaci¨®n a la que su mujer, la actriz Natalie Wood, trat¨® de aferrarse la noche en que falleci¨®, el 29 de noviembre de 1981, cuando s¨®lo ten¨ªa 43 a?os. Una muerte cuyas causas siguen sin estar claras cuatro d¨¦cadas despu¨¦s, un suceso misterioso que sigue alimentando una fascinaci¨®n a la que ahora se suma el creciente inter¨¦s por los cr¨ªmenes reales. Si lo que sucedi¨® aquella noche frente a la costa californiana de la Isla de Santa Catalina fue un crimen o un accidente es algo que solo sabe Wagner, a quien en 2018 la polic¨ªa volvi¨® a considerar ¡°persona de inter¨¦s¡±, t¨¦rmino que sin se?alarlo como sospechoso lo sit¨²a como alguien que podr¨ªa aportar informaci¨®n relevante al caso.

Este 20 de julio, cuando Natalie Wood habr¨ªa cumplido 85 a?os, el canal TCM (que durante el mes ha programado algunas de sus pel¨ªculas m¨¢s c¨¦lebres) emitir¨¢ el documental de HBO Natalie Wood: Entre bambalinas, radiograf¨ªa de la carrera de Wood y las circunstancias que rodearon a su muerte, producido por la hija de la actriz, Natasha Gregson Wagner, que ejerce tambi¨¦n de narradora. ¡°Era importante para m¨ª hacer esta pel¨ªcula, porque siento que nadie comprende ni conoce a mi madre tan bien como yo, mi familia y mis amigos¡±, declar¨® en 2020 a EL PA?S.

Las entrevistas que lo vertebran reflejan un ambiente familiar id¨ªlico y desgranan un romance que parec¨ªa inevitable entre dos de las estrellas m¨¢s queridas de Hollywood. Natalie Wood se hab¨ªa puesto ante la c¨¢mara por primera vez a los cinco a?os, instigada por una madre controladora que, como tantas progenitoras del espect¨¢culo, hab¨ªa volcado sus anhelos en una hija cuya carrera y vida controlaba con mano de hierro y un padre alcoh¨®lico que dej¨® el sustento familiar en manos de la peque?a. Demostr¨® su naturalidad y talento en las deliciosas pel¨ªculas de 1947 De ilusi¨®n tambi¨¦n se vive, todo un cl¨¢sico navide?o, y El fantasma y la se?ora Muir. Cumpli¨® con el papel de ni?a intachable que el estudio le hab¨ªa adjudicado hasta que a los 15 a?os desafi¨® a su madre y a Hollywood interpretando a Judy en Rebelde sin causa (1955), un papel que la convert¨ªa en adulta a ojos del mundo y que siempre ha estado en el centro de la pol¨¦mica por los rumores que aseguraban que, siendo a¨²n menor, se hab¨ªa acostado con el director Nicholas Ray, 27 a?os mayor que ella, para conseguir el papel.

La calidad de la cinta y la muerte de James Dean una semana antes del estreno la convirtieron en un fen¨®meno popular y en una obra de culto, que, adem¨¢s de consagrar definitivamente a Wood, le proporcion¨® la primera de sus tres nominaciones al Oscar.

La determinaci¨®n que demostraba en su carrera se repet¨ªa en otras facetas de su vida. ¡°Cuando sea mayor me casar¨¦ con ¨¦l¡±, dijo que pens¨® al cruzarse por primera vez con Robert Wagner en los pasillos de la Fox cuando ella ten¨ªa 10 a?os y el 18. Ocho a?os despu¨¦s, la f¨¢brica de sue?os hizo su magia: el estudio les organiz¨® una cita el d¨ªa que Wood cumpl¨ªa la mayor¨ªa de edad. Un a?o despu¨¦s se casaron en Arizona. Su romance hab¨ªa despertado tanto inter¨¦s que hubo que cubrir las ventanas de la iglesia para evitar las miradas de los cientos de curiosos y periodistas que se agolpaban en el exterior. J¨®venes y guapos, eran los favoritos de las revistas, pero mientras ella era una estrella consolidada, ¨¦l no encontraba un hueco en la industria. Era guapo y no carec¨ªa de talento, pero no deslumbraba. Tanto su f¨ªsico atildado como su estilo interpretativo pertenec¨ªan al pasado: era el yerno ideal, pero no el novio so?ado.

Ni rebelde ni con causa

Se hab¨ªa codeado con las estrellas mientras trabaja en el club de golf de Bel Air, donde fue caddie de Clark Gable, y lleg¨® a Hollywood gracias a su amistad con el hijo de Fred Astaire, a quien conoci¨® en la academia militar. Solo era uno de tantos guapos que se paseaban por los estudios esperando a que alguien los eligiese. En su primera audici¨®n lo rechazaron y acab¨® en manos de Henry Wilson, nombre que resultar¨¢ familiar a quienes hayan visto Hollywood (2020), el personal¨ªsimo retrato de Ryan Murphy sobre una industria que nunca existi¨®.

Wilson fue el despiadado Pigmalion que convirti¨® a Rock Hudson en estrella a costa de su vida privada. Era famoso tanto por dise?ar noviazgos y matrimonios que distrajeran al p¨²blico de las verdaderas vidas de sus representados como por abusar sexualmente de los actores con los que trabajaba.

Al contrario que Wood, Wagner no era un rebelde. Era el reverso de actores atormentados como James Dean o Montgomery Clift, aceptaba los papeles que le ofrec¨ªan, iba a estrenos, cog¨ªa del brazo a quien le dec¨ªan y siempre ten¨ªa un rato para llevar flores a la reina del chisme Hedda Hopper, ante quien caer en desgracia pod¨ªa significar el adi¨®s a Hollywood.

Wood, mientras, eleg¨ªa su propio camino. En 1961, tras una de esas decisiones de casting que hoy resultan incomprensibles, lleg¨® el papel que la consagrar¨ªa: el de la portorrique?a Mar¨ªa de West Side Story. Ese mismo a?o protagoniz¨® junto a Warren Beatty Esplendor en la hierba y logr¨® su primera nominaci¨®n al Oscar a la mejor actriz principal. El mejor momento de su carrera coincidi¨® con un par¨®n en la carrera de Wagner y su relaci¨®n se vio afectada. Algunos allegados afirman que la causa del mal momento del actor fue el romance que su mujer mantuvo con Beatty.

Al menos esas eran las versiones oficiales, hasta que en 2020 el libro de Suzanne Finstand Natalie Wood: The Complete Biography revel¨® que, antes del estreno de West Side Story, una noche la actriz se despert¨® de madrugada y encontr¨® a su marido manteniendo relaciones sexuales con el mayordomo brit¨¢nico que, desde a?os atr¨¢s, le acompa?aba a todas partes, traici¨®n que no solo da?¨® de muerte su matrimonio sino que plane¨® durante toda su relaci¨®n (aunque Finstand insiste en que ella siempre conoci¨® la bisexualidad de Wagner).

Tras su ruptura, el romance entre Wood y Beatty se hizo oficial. Wagner, devastado, quiso recuperarla. Con su carrera parada planeaba irse a Europa y le pidi¨® que le acompa?ase. No lo hizo. Sus caminos se separaron. Como nos ense?¨® la pel¨ªcula de Tarantino ?rase una vez en Hollywood (2019), Europa era el lugar en el que las estrellas de Hollywood pod¨ªan mantener cierto estatus, pagar sus mansiones con piscina y encabezar carteles. Ser cabeza de le¨®n. Wagner adem¨¢s encontr¨® el amor, se cas¨® con Marion Marshall, exmujer de Stanley Donen, y tuvieron una hija, pero el matrimonio fracas¨®.

Cuando volvi¨® a Estados Unidos se reecontr¨® con Wood, que tambi¨¦n era madre y hab¨ªa pasado por el altar con el productor Richard Gregson. La estabilidad fue pasajera: ¨¦l la enga?¨® con su secretaria y ella tir¨® sus cosas por la ventana y solicit¨® el divorcio. Para alborozo de los que creen en las segundas oportunidades, Wood y Wagner volvieron a casarse. Esta vez ya no eran los adolescentes a los que otros manejaban, eran adultos con vidas a su cargo, tuvieron una hija y su casa se convirti¨® en el epicentro de Hollywood, un hogar feliz en el que conviv¨ªan los hijos de ambos e incluso los hijos de sus exparejas.

Wood se tom¨® un respiro laboral para cuidar a sus hijas, mientras Wagner disfrutaba del ¨¦xito televisivo. En 1967, Lew Wasserman, del estudio Universal, le convenci¨® para que protagonizas su serie It Takes a Thief. En un principio se opuso, pero el productor lo convenci¨®. ¡°Quiero que est¨¦s en la portada TV Guide todas las semanas. Este es tu medio, tienes que probarlo, estar¨¢s genial¡±. Lo estuvo. En los setenta fue el rostro televisivo m¨¢s popular gracias a su papel de investigador en Hart y Hart (1979). Tambi¨¦n form¨® con su mujer la productora Rona y ambos fueron parte del desarrollo de un peque?o proyecto que empezaba a tomar forma: la serie Los ?ngeles de Charlie (1976).

Fin de fiesta

En la noche que lo cambi¨® todo, ambos navegaban en su yate junto al reci¨¦n oscarizado Christopher Walken, que en aquel momento rodaba Proyecto Brainstorm (1983) junto a Wood. Iba a ser un viaje como los habituales, lleno de invitados, pero la mayor¨ªa se hab¨ªa borrado para evitar las cada vez m¨¢s frecuentes discusiones de la pareja. En el barco s¨®lo estaban ellos tres y el patr¨®n Dennis Davern. La versi¨®n que Wagner siempre ha mantenido es que, tras una acalorada discusi¨®n con Walken sobre la carrera de Wood, que se hab¨ªa retirado a su camarote, ¨¦l estall¨® de rabia y lanz¨® una botella contra la mesa, Walken se fue y Wagner y Davern barrieron los cristales y se sentaron a charlar dentro del yate. En todo momento crey¨® que su mujer estaba en la habitaci¨®n. Al no encontrarla all¨ª volvi¨® a cubierta y descubri¨® el bote (el Pr¨ªncipe Valiente) en el agua. Avisaron a los guardacostas. A las 7:45 de la ma?ana del domingo 29 de noviembre, un helic¨®ptero localiz¨® el cuerpo de Wood flotando en el agua. Iba vestida con su camis¨®n, calcetines y una parka.

La autopsia determin¨® que Wood hab¨ªa consumido siete u ocho copas de vino antes de morir. Ten¨ªa algunos moratones en piernas y brazos y una abrasi¨®n en la mejilla izquierda que era compatible con la ca¨ªda. Thomas Noguchi, jefe m¨¦dico forense concluy¨® que la muerte de Wood fue un accidente. ¡°Cualquiera que viera la log¨ªstica del bote aquella noche, que estaba lloviendo, sabr¨ªa exactamente lo que pas¨®¡±, declar¨® Christopher Walken durante una entrevista con Playboy en 1997. ¡°La gente se resbala en la ba?era, se cae por las escaleras, se baja de la acera en Londres porque cree que los autos vienen en sentido contrario y muere¡±.

Hay otras versiones de lo que pas¨® aquella noche y todas coinciden en que todo el mundo a bordo estaba muy borracho y hubo una fuerte discusi¨®n, pero mientras unos afirman que el motivo de la discusi¨®n era el romance que manten¨ªan en secreto Walken y Wood, para otros los celos iban en otra direcci¨®n ya que los amantes ser¨ªan Walken y Wagner.

Cuando el caso se reabri¨® en 2011, Wagner declar¨® que apoyaba plenamente la investigaci¨®n. Siete a?os despu¨¦s, la polic¨ªa declar¨®: ¡±Es lo suficientemente sospechoso como para hacernos pensar que algo sucedi¨®¡±. Desde aquella noche cay¨® sobre ¨¦l la sombra de una sospecha que se mantiene. Pero solo fuera de su c¨ªrculo ¨ªntimo: tanto su hija Courtney como su hijastra, la actriz Natasha Gregson Wagner, creen firmemente en su inocencia. ?nicamente Lena Wood, hermana de Natalie, y el patr¨®n del barco Dennis Davern sostienen que ¨¦l fue el responsable. Davern lleva a?os vendiendo distintas versiones de su historia, mientras que ella fue apartada de la familia por su padre despu¨¦s de que uno de los novios que tuvo filtrase a la prensa fotos de la pareja.

Nueve a?os despu¨¦s de la muerte de Wood, Wagner rehizo su vida con Jill St. John, chica Bond en Diamantes para la eternidad (1971), y recuper¨® cierta popularidad gracias a su vis c¨®mica en papeles que parec¨ªan una parodia del tipo de actitud relamida y estirada del que nunca pudo desprenderse. Su rostro volvi¨® a ser popular gracias a su papel como N¨²mero Dos en la saga Austin Powers (1997-2002) y al Teddy Leopold de Dos hombres y medio en la cuarta y quinta temporada, entre 2007 y 2008. Se retir¨® en 2019 y hace unas semanas agradeci¨® las felicitaciones por su 93? cumplea?os en Instagram, red en la que es habitual verle rodeado de familiares y representando su mejor papel: el de padre y abuelo mod¨¦lico.

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