Miedo y desconfianza: ?qu¨¦ nos pasa con los coches el¨¦ctricos?

Renault decidi¨® en 2022 separar su negocio de coches de combusti¨®n del de los el¨¦ctricos. La compa?¨ªa francesa, para la que Espa?a es una de sus plazas fuertes, gritaba ¡°?que viene el lobo!¡±, a trav¨¦s de Josep Maria Recasens, consejero delegado de Renault Espa?a y director de estrategia y desarrollo de negocio del grupo. Recasens propon¨ªa establecer un sistema de ayudas a la compra de coches el¨¦ctricos como el de Francia, que en la pr¨¢ctica supondr¨ªa dejar sin subvenci¨®n a aquellos el¨¦ctricos hechos fuera de Europa, sobre todo los de marcas chinas. ¡°Quiero jugar 11 contra 11, no contra 15. Hay que averiguar si la competencia china es justa¡±, declaraba el ejecutivo en una entrevista.

La competencia de las marcas orientales es el pen¨²ltimo caballo de batalla de la industria en materia del gran tema de los ¨²ltimos a?os: la transici¨®n del motor de combusti¨®n a el¨¦ctrico. Aunque es 2035 el a?o previsto para que toda la flota europea sea de cero emisiones, las ciudades de m¨¢s de 50.000 habitantes trabajan con el horizonte de 2030, para preocupaci¨®n de los que piensan que las exigentes restricciones ambientales est¨¢n demasiado cerca. M¨¢s teniendo en cuenta que ni Estados Unidos ni China trabajan con ese objetivo. Se habla de una decisi¨®n pol¨ªtica, pero ni siquiera hay unanimidad entre la clase dirigente. Para algunos, como Volker Wissing, ministro federal de Asuntos Digitales y Transporte de Alemania, esta decisi¨®n es un tiro en el pie. ¡°Hay que mantener abiertas todas las opciones tecnol¨®gicas y tambi¨¦n utilizarlas. No entiendo esta lucha contra el autom¨®vil y por qu¨¦ la gente quiere prohibir algunas tecnolog¨ªas¡±, ha dicho.

Los fabricantes ponen freno a sus anta?o ambiciosos objetivos. Incluso dando por hecha la meta de 2035, se ha descubierto que iban demasiado r¨¢pido. General Motors comunic¨® que revisar¨¢ a la baja la producci¨®n de veh¨ªculos el¨¦ctricos planificada para 2024 y 2025. Audi ha ajustado sus planes de lanzamiento de nuevos modelos el¨¦ctricos. El comienzo de la producci¨®n de su gran apuesta, el Q6 e-tron, ha sufrido varios retrasos. Ford comunic¨® la reducci¨®n de la producci¨®n del F-150 Lightning debido a una demanda por debajo de lo previsto y Tesla sostiene p¨¦rdidas continuadas. Los altos costes de fabricaci¨®n de los el¨¦ctricos y la desconfianza a la hora de adoptar esta tecnolog¨ªa por parte de gran parte de los usuarios ha enfriado el optimismo de los fabricantes.

Pero siempre hay un lado soleado. En 2023, en un clima general de descenso de ventas, la matriculaci¨®n en Europa de 100% el¨¦ctricos super¨® por primera vez la cuota del di¨¦sel (15,1% frente a 13,4%). Y en algunos lugares la transici¨®n va bien. En Noruega, el ejemplo que siempre se pone, este tipo de veh¨ªculos suponen ya el 82% de las ventas. Muy lejos est¨¢n Dinamarca y Suecia, que superan el 36%, o Portugal con el 18%. Espa?a est¨¢ a¨²n m¨¢s abajo. La Asociaci¨®n Espa?ola de Fabricantes de Autom¨®viles y Camiones (Anfac) inform¨® que, en 2023, se vendieron 54.857 el¨¦ctricos en Espa?a, un 5,7% del total. Pero seg¨²n la Asociaci¨®n de Fabricantes de Autom¨®viles de Europa (ACEA), la oferta es hoy mucho m¨¢s amplia que hace cinco a?os y su precio contin¨²a disminuyendo. El futuro de los veh¨ªculos el¨¦ctricos en Europa y Espa?a se enfrenta a retos exigentes. La gran pregunta es si 2035 marcar¨¢, forzosamente, el comienzo de una nueva era en la movilidad sostenible. O si la terca realidad forzar¨¢ un retraso.

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