La pugna entre Berlusconi y los sindicatos aplaza la negociaci¨®n de la reforma laboral
El primer ministro intenta desmarcarse de los miembros de su gabinete que acusaron a las centrales sindicales de connivencia con el terrorismo
El Gobierno italiano de Silvio Berlusconi ha anunciado esta noche el aplazamiento de la reuni¨®n prevista para ma?ana con los sindicatos en la que se iba a negociar el pol¨¦mico proyecto de reforma laboral del gobierno conservador, que propugna el despido libre.
"De momento", ha afirmado Berlusconi en un comunicado de la Presidencia del Consejo, "no nos parecen maduras las condiciones para la reanudaci¨®n del di¨¢logo con los actores sociales". "El Gobierno aplaza la reuni¨®n a una fecha que ser¨¢ fijada m¨¢s adelante", ha a?adido el comunicado.
Berlusconi hab¨ªa intentado previamente calmar a los sindicatos con un comunicado en el que precisaba que "su Gobierno est¨¢ convencido de que no existe connivencia, ni ambig¨¹edad, ni cercan¨ªa de los sindicatos con el terrorismo".
As¨ª matizaba la opini¨®n de varios componentes de su gabinete —el ministro de las Reformas y l¨ªder de la xen¨®foba Liga Norte, Umberto Bossi, y el titular de Defensa, Antonio Martino—, quienes acusaron al mayor sindicato del pa¨ªs, la Confederaci¨®n General Italiana del Trabajo (CGIL), de izquierdas, de haber alimentado la reaparici¨®n de las Brigadas Rojas, la organizaci¨®n terrorista que reivindic¨® el asesinato la semana pasada de Marco Biagi, un asesor del Gobierno en temas laborales.
Este sindicato, que tiene m¨¢s de cinco millones de miembros y moviliz¨® el pasado s¨¢bado a un mill¨®n de personas en Roma para protestar contra la pol¨ªtica social de Berlusconi, advirti¨® al primer ministro que o desment¨ªa esas acusaciones o se retirar¨ªa de la mesa de di¨¢logo con el Ejecutivo.
Adem¨¢s, el l¨ªder de la CGIL, Sergio Cofferati, de 54 a?os, ha declarado hoy que su sindicato llevar¨¢ a los tribunales a Bossi y a Martino "por sus grav¨ªsimas declaraciones".
Las explicaciones y disculpas de Berlusconi han sido consideradas insuficientes por las tres mayores centrales sindicales de Italia: "El secretario general de la CGIL no considera una respuesta el comunicado divulgado por la oficina de prensa del primer ministro".
Por su parte, la Confederaci¨®n Italiana de Sindicatos de Trabajadores (CISL), sindicato cat¨®lico, ha a?adido que "no es posible mantener la reuni¨®n de ma?ana" con el Gobierno. De la misma forma se ha expresado la Uni¨®n Italiana del Trabajo (UIL), el sindicato de centro.
Umberto Bossi, lejos de rectificar, ha vuelto a echar m¨¢s le?a al fuego al declarar en una entrevista en la prensa que "los terroristas no son extranjeros, sino hijos de la protesta sindical exasperada, que ha contado miles de mentiras en las f¨¢bricas, en los diarios y en las televisiones".
Respecto al asesinato de Biagi, otro ministro ha avivado a¨²n m¨¢s la pol¨¦mica. Rocco Buttiglione, el titular de la cartera de Pol¨ªticas Comunitarias, ha criticado al Ministerio del Interior por los errores en la adjudicaci¨®n de escolta de Marco Biagi.
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