Los cardenales vuelven a reunirse para preparar el c¨®nclave que elegir¨¢ al sucesor de Wojtyla

La Congregaci¨®n de Cardenales ha vuelto a reunirse hoy para preparar el c¨®nclave que a partir del d¨ªa 18 elegir¨¢ al sucesor de Juan Pablo II. Los encuentros de los purpurados quedaron interrumpidos ayer por el funeral de Karol Wojtyla, que congreg¨® en Roma a los grandes del mundo y cientos de miles de peregrinos, quienes, en plena homil¨ªa presidida por el papable Joseph Ratzinger, reclamaron la inmediata canonizaci¨®n de Juan Pablo II.

En este periodo de Sede Vacante, tras el fallecimiento del Pont¨ªfice, el Colegio Cardenalicio asume la direcci¨®n provisional de la Iglesia cat¨®lica y toma todas las disposiciones necesarias para su gobierno. Asimismo, los purpurados aprovechan sus reuniones para intercambiar opiniones y puntos de vista con los que hacerse una idea sobre qu¨¦ candidatos pueden ser los adecuados para el c¨®nclave. El Colegio est¨¢ integrado por 183 cardenales, aunque no todos est¨¢n presentes en Roma ahora mismo y de ellos 117 son los que tienen derecho a entrar en el c¨®nclave y votar al nuevo Papa, ya que su edad es inferior a los ochenta a?os.

El multitudinario adi¨®s de ayer a Juan Pablo II, que reuni¨® a 300.000 fieles y representantes de 200 pa¨ªses en la plaza de San Pedro del Vaticano, puede influir en el c¨®nclave y obligar a los cardenales a elegir un Papa espiritual y popular. Los peregrinos interrumpieron varias veces la homil¨ªa del cardenal alem¨¢n Joseph Ratzinger, de 78 a?os, que desvel¨® durante la misma su candidatura de continuidad con la ortodoxia romana, al grito de "Santo subito" en italiano, que significa "Santo enseguida".

Existe el peligro, sostienen algunos obispos, de que esta vez, fascinados por la fama de santidad que le est¨¢n dando los fieles de los cuatro continentes a Juan Pablo II, vaya a pesar mucho m¨¢s en los cardenales la obsesi¨®n por seleccionar un Papa santo que otras exigencias, algo m¨¢s terrenales, que agitaron los c¨®nclaves anteriores.

Reabierta la Bas¨ªlica de San Pedro

La Bas¨ªlica de San Pedro, cerrada desde la noche del jueves, ha reabierto este s¨¢bado sus puertas al p¨²blico y toda la zona adyacente ha vuelto a la normalidad tras el funeral, que conllev¨® especiales medidas de seguridad y movilidad. Roma, la vieja capital del mundo, super¨® ayer la gran prueba final de una semana marcada por la multitud de peregrinos que acudieron a despedir al Pont¨ªfice y se coloc¨® a la altura de una ocasi¨®n sin precedentes.

Desde la muerte de Karol Wojtyla, el pasado 2 de abril, la plaza de San Pedro y sus accesos, que son territorio de la ciudad de Roma, hab¨ªan sido sometidos a algunas restricciones que alcanzaron su punto m¨¢ximo en la jornada de ayer para el funeral.

El Ayuntamiento de Roma ya ha autorizado la libre circulaci¨®n por la llamada Via della Conciliazione y las calles laterales, que dan acceso a la plaza de San Pedro, y ha retirado todas las vallas que limitaban el paso. ?stas hab¨ªan sido colocadas en d¨ªas anteriores para permitir un acceso ordenado de los fieles a la Bas¨ªlica con objeto de visitar la capilla ardiente del Papa y rendirle homenaje.

Las autoridades italianas estiman que por la capilla ardiente desfilaron cerca de dos millones de personas y una gran masa sigui¨® el funeral, bien en la plaza (unas 300.000), en las calles pr¨®ximas (otras 300.000) o en varios puntos de Roma a trav¨¦s de pantallas gigantes.

El Papa descansa ya bajo tierra en las llamadas Grutas Vaticanas, en el subsuelo de la Bas¨ªlica de San Pedro, en la tumba que ocup¨® Juan XXIII, aunque ¨¦sta no podr¨¢ ser visitada hasta la semana pr¨®xima.