El Supremo concluye que Bush no ten¨ªa derecho para crear los tribunales de Guant¨¢namo
La decisi¨®n es la decisi¨®n judicial m¨¢s importante sobre los poderes del presidente de EE UU desde la Segunda Guerra Mundial
La decisi¨®n judicial m¨¢s importante sobre las atribuciones del presidente de EE UU ha supuesto un nuevo varapalo para la Casa Blanca. El Tribunal Supremo, por cinco votos a tres, ha decidido que el presidente de EE UU, George W. Bush, se excedi¨® en sus atribuciones al crear los tribunales militares de la c¨¢rcel de Guant¨¢namo. La sentencia zanja el llamado caso Hamdan contra Rusmfeld y resuelve el recurso del supuesto ch¨®fer de Bin Laden contra su encarcelamiento en la prisi¨®n cubana.
Hamdan, que adem¨¢s ejerc¨ªa de guardaespaldas del terrorista m¨¢s buscado del mundo, fue detenido en noviembre de 2001 en Afganist¨¢n, durante la primera gran campa?a contra el terrorismo de EE UU tras los atentados del 11 de septiembre. Casi dos a?os despu¨¦s, en julio de 2003, fue acusado de conspiraci¨®n contra la ciudadan¨ªa estadounidense por uno de los tribunales que ahora ha invalidado el Supremo. E interpuso su recurso.
Los jueces han estimado que estos tribunales, instaurados por el presidente Bush, violan la Convenci¨®n de Ginebra sobre los prisioneros de guerra, pero adem¨¢s tambi¨¦n son contrarios a la propia Constituci¨®n del pa¨ªs. "Seg¨²n la Constituci¨®n", afirma el tribunal, "el presidente es el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, pero es el Congreso quien tiene el poder de declarar la guerra y de organizar los procesos relativos a los prisioneros". Y cuando Bush cre¨® que estos tribunales, hace ya m¨¢s de cuatro a?os, lo hizo sin la menor intervenci¨®n de las c¨¢maras legislativas.
Un nuevo esquema para Guant¨¢namo
El Tribunal Supremo fuerza con este fallo al Departamento de Defensa a elaborar un nuevo esquema para los casi 500 detenidos en la base militar estadounidense ubicada en suelo cubano Los primeros prisioneros llegaron a la c¨¢rcel enero de 2002. Entonces, el secretario de Defensa de EE UU, Donald Rumsfeld, los calific¨® de "asesinos entre los m¨¢s entrenados y feroces del planeta". Ninguno recibi¨® imputaci¨®n alguna ni ten¨ªa derecho a un abogado.
Los defensores de Hamdan ped¨ªan al Tribunal Supremo que se pronunciara sobre el alcance de los poderes del presidente estadounidense desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EE UU. En concreto, el abogado defensor de Hamdan y profesor de la Universidad de Georgetown, Neal Katyal, pidi¨® al Supremo que pusiera fin a "esta atribuci¨®n de poderes sin precedentes".
Frente a esta postura, los letrados del Gobierno alegaban que los tribunales federales no deb¨ªan interferir en las medidas presidenciales para la lucha contra el terrorismo. El Gobierno tambi¨¦n alegaba que una resoluci¨®n del Congreso aprobada tres d¨ªas despu¨¦s de los atentados y la propia Constituci¨®n conced¨ªan poderes a Bush para luchar contra el terrorismo sin la supervisi¨®n del Poder Judicial o el propio Legislativo.
El Consejo de Europa valora la sentencia como la victoria de la Justicia
El secretario general del Consejo de Europa, Terry Davis, ha calificado de "victoria de la Justicia contra el error y la hipocres¨ªa" la sentencia del Tribunal Supremo de EE UU. A trav¨¦s de un comunicado, Davis ha explicado que la disyuntiva entre el Derecho y la seguridad es "falaz" y lamentado la "decisi¨®n deliberada del Gobierno estadounidense de traicionar las libertades fundamentales, que le ha separado de sus aliados y ha galvanizado a sus enemigos".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.