Jap¨®n anuncia la liberaci¨®n del capit¨¢n del pesquero chino apresado

Jap¨®n ha puesto hoy en libertad al capit¨¢n de un pesquero chino cuya detenci¨®n ha provocado una grave crisis en las relaciones bilaterales con China. El barco colision¨® hace 15 d¨ªas con dos patrulleras japonesas en aguas disputadas por ambos pa¨ªses

A ra¨ªz de la detenci¨®n, el Gobierno chino hab¨ªa suspendido los contactos de alto nivel con Tokio y exigido la liberaci¨®n del capit¨¢n, Zhan Qixiong, de forma "inmediata y sin condiciones". Tras la noticia, la primera respuesta de Pek¨ªn ha sido fr¨ªa, al insistir en que Tokio le retuvo ilegalmente y se?alar que ser¨¢n las autoridades chinas las que se ocupar¨¢n de traer de vuelta al pescador.

"El Gobierno chino enviar¨¢ un avi¨®n ch¨¢rter para traer de vuelta al capit¨¢n del pesquero chino ilegalmente detenido por Jap¨®n", se ha limitado a se?alar en un escueto comunicado, publicado por la agencia oficial Xinhua, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Jiang Yu. La nota reitera que "cualquiera de los supuestos procedimientos judiciales tomados por Jap¨®n contra el capit¨¢n chino es ilegal e inv¨¢lido".

"V¨ªnculos importantes"

La fiscal¨ªa japonesa decidi¨® liberar a Zhan "en consideraci¨®n" a los lazos entre China y Jap¨®n. "Exist¨ªa la posibilidad de que las relaciones Jap¨®n-China empeorasen o hab¨ªa signos de que estaba sucediendo", ha dicho Yoshito Sengoku, fiscal de la ciudad de Naha. "Nuestros v¨ªnculos son importantes y ambas partes debemos trabajar para mejorar nuestras relaciones estrat¨¦gicas y mutuamente beneficiosas".

Aunque la fiscal¨ªa cree que es "obvio" que la nave china colision¨® de forma deliberada con las patrulleras japonesas, que persegu¨ªan al pesquero para abordarlo e interrogar a la tripulaci¨®n, reconoce que no fue un acto "premeditado", sino determinado por la situaci¨®n del momento.

El capit¨¢n, por su parte, neg¨® haber obstruido las operaciones de los guardacostas japoneses, el motivo que esgrimieron las autoridades niponas para su arresto, indic¨® Kyodo. El suceso tuvo lugar el pasado 7 de septiembre cerca del diminuto archipi¨¦lago de Diaoyu-Senkaku, administrado por Jap¨®n pero reclamado por China desde hace d¨¦cadas, rico en yacimientos de gas.

Medidas de presi¨®n chinas

La liberaci¨®n de Zhan se produce poco despu¨¦s de que China anunciara investigaciones por posible espionaje militar contra cuatro ciudadanos japoneses, en una aparente represalia contra Jap¨®n por la negativa a liberar al marinero pese a las continuas presiones chinas. Los cuatro japoneses son, seg¨²n los medios de su pa¨ªs, trabajadores de la empresa Fujita, y est¨¢n siendo investigados por tomar im¨¢genes en una zona militar en Shijiazhuang (norte de China). Tokio asegura que est¨¢n retenidos por las autoridades chinas, extremo que Pek¨ªn se niega a confirmar, eludiendo hablar de "detenci¨®n".

Esta medida no es la primera medida de presi¨®n de China para forzar la liberaci¨®n del capit¨¢n Zhan. A finales de la semana pasada, Pek¨ªn anunciaba la suspensi¨®n de todos los contactos de alto nivel entre ambos pa¨ªses, lo que impidi¨®, por ejemplo, que los primeros ministros de las dos potencias asi¨¢ticas mantuvieran un encuentro esta semana en el seno de la Asamblea Genera de Naciones Unidas. El mi¨¦rcoles, el primer ministro chino, Wen Jiabao, exigi¨® la "inmediata e incondicional" liberaci¨®n de su ciudadano y amenaz¨® a Tokio con represalias en caso contrario.

El conflicto ha reavivado viejos resentimientos entre los chinos, cuyos recuerdos de la invasi¨®n y ocupaci¨®n japonesa y las atrocidades que se cometieron entre 1931 y 1945 a¨²n provocan indignaci¨®n. Durante estos 15 d¨ªas, se magnificaron en China hechos anecd¨®ticos como la muerte de un oso panda chino en el zoo japon¨¦s de la ciudad de Kobe, y se realizaron protestas y boicoteos contra el

archip¨¦lago vecino.