El destino de Gadafi, en manos de los l¨ªderes tribales

Muamar el Gadafi, que se enfrenta a una revuelta popular sin precedentes en Libia, ha podido permanecer en el poder durante m¨¢s de cuatro d¨¦cadas en buena parte por su h¨¢bil manipulaci¨®n de las tribus, los centros de poder en este enorme pa¨ªs conservador de poco m¨¢s de seis millones de habitantes.

La situaci¨®n en Libia se ha complicado notablemente despu¨¦s de que Gadafi anunciara ayer de forma contundente que aplacar¨¢ a sangre y fuego la revuelta que comenz¨® en el este, cerca de la frontera con Egipto y que ha dejado centenares de muertos. A diferencia de sus vecinos, Egipto al este y T¨²nez al noroeste, donde las poderosas ¨¦lites militares finalmente decidieron el resultado de sus revoluciones, en Libia ser¨¢n las estructuras de poder tribales, m¨¢s opacas y complejas, las que definir¨¢n el destino de la revuelta.

Gadafi siempre ha confiado en su cercana -pero peque?a- tribu Qathathfa para llenar las filas de sus unidades militares y garantizar asi su seguridad y la de su Gobierno. Pero muchos expertos creen que eso no ser¨¢ suficiente para asegurar al pa¨ªs.

M¨¢s importante son las tribus m¨¢s grandes cooptadas por su Gobierno, como la de Wafalla, que agrupa a alrededor de un mill¨®n de libios. Fuentes pol¨ªticas disidentes se?alan que la feroz represi¨®n de Gadafi contra el pueblo podr¨ªa estar causando el cambio de lealtades dentro de los l¨ªderes tribales. De hecho, el 20 de febrero, Akram Al Warfalli, uno de los l¨ªderes de la tribu Warfalla, dijo a Al Yazira: "Le decimos al hermano (Gadafi) que ya no es hermano, le decimos que abandone el pa¨ªs".

"En Libia, ser¨¢ el sistema tribal el que decida el equilibrio de poder, en vez del Ej¨¦rcito", seg¨²n Alia Brahimi, jefa del programa de ?frica del Norte de la London School of Economics. "Creo que vamos a ver deserciones en algunas de las principales tribus si eso ya no est¨¢ ocurriendo. Gadafi ha perdido el control del este del pa¨ªs, donde nunca fue popular y nunca logr¨® consolidar su poder".

La discriminaci¨®n contra las tribus del este ha alimentado la revuelta contra Gadafi, quien, seg¨²n los expertos, desde que lleg¨® al poder en 1969, ha favorecido a las tribus de Tr¨ªpoli y sus alrededores a expensas de las regiones orientales, donde se encuentra la mayor parte de las reservas de petr¨®leo del pa¨ªs.

Ayer, un corresponsal de Reuters cont¨® como las fuerzas de Gadafi parec¨ªan abandonar sus posiciones en la frontera con Egipto, que ahora estaban armados con palos y Kalashnikovs y que manifestaron ser opositores al r¨¦gimen. A¨²n no est¨¢ claro a qui¨¦n responden esos hombres, si es que responden a alguien.

El este, un dolor de cabeza

"La regi¨®n del este siempre ha representado un dolor de cabeza permanente para el colonialismo italiano y los varios gobernantes, incluyendo la monarqu¨ªa y al mismo Gadafi", afirma Saad Djebbar, comentarista y experto en Norte de ?frica.

Las tribus del este siempre han resentido la influencia y los privilegios que Gadafi ha otorgado a quienes le rodean en Tr¨ªpoli. "Se han estado quejando de la injusta distribuci¨®n de los recursos", afirma Claire Spencer, deje del programa de Oriente Pr¨®ximo de la Chatham House de Londres. "Es la concentraci¨®n de las redes tribales de Gadafi en Tr¨ªpoli las que han resultado favorecidas con inversiones e influencias sobre Bengasi", la segunda ciudad m¨¢s importante del pa¨ªs.

Si bien el estilo de vida pastoril y tribal ha disminuido en Libia debido a la creciente urbanizaci¨®n impulsada por el petr¨®leo, las estructuras de poder tradicionales conservan su autoridad.

Hanspeter Matter, experto en Libia, afirma a Der Spiegel junto a Yemen y Jordania, Libia esta entre las naciones en las que las tribus han jugado un papel social y pol¨ªtico central durante siglos. "En Libia, cubierta en gran parte por desiertos, la importancia de las tribus se debe en gran medida a la forma de vida beduina, que se basa en la ganader¨ªa y los comercios de caravana, y que fue dominante en el siglo 20. Su superviviencia depend¨ªa de la solidaridad tribal".

Matter, que cita al historiador libio Faraj A. Najm, existen unas 140 tribus, de las cuales solo 30 tienen influencia pol¨ªtica.

En Egipto y T¨²nez, los Ej¨¦rcitos demostraron ser la fuerza pol¨ªtica suprema, facilitando la salida de Hosni Mubarak y Ben Ali, en parte debido a su resistencia a disparar contra las manifestaciones. Sin embargo, Libia es diferente. Los detalles de su compleja mezcla de alianzas y lealtades son escasos. Los expertos generalmente coinciden en que parte de la estrategia de Gadafi para retener el poder ha sido mantener a su propia tribu en posiciones importantes. Se dice que destacados miembros de su familia comandan sus formaciones militares, que a su vez integran la tribu Qathathfa.

Despu¨¦s de haber ascendido en la estructura militar, se cree que Gadafi intent¨® anularla para evitar amenazas de comandantes rivales. Por eso aboli¨® todos los rangos superiores a su posici¨®n de coronel.

El "Libro Verde" del l¨ªder, que contiene su filosof¨ªa pol¨ªtica y el sistema de Gobierno, promete poner fin al tribalismo, pero en realidad los expertos dicen que lo afianza.

"Gadafi siempre ha pensado que hay gente en el este de Libia, en Bengasi y Ajdabiya y otros poblados, que no son confiables y poco leales", afirma Dirk Vandewalle, experto sobre Libia de Dartmouth Collage en EE UU. "Recordemos que Libia fue pr¨¢cticamente de forma artificial en 1951 y las provincias en ese momento, Cirenaica, donde est¨¢ Bengasi y Tripolitania, ahora Tr¨ªpoli, ten¨ªan muy poco en com¨²n". Desde el principio ha habido problemas que se incrementaron a¨²n m¨¢s despu¨¦s de descrbrirse petr¨®leo en el este ahondando esas diferencias, agrega.

Y para completar, el este de Libia siempre ha sido m¨¢s influenciado que otras partes del pa¨ªs por los sucesos en el vecino del este, Egipto. Entonces no es de extra?ar que la revuelta egipcia haya sido la mecha que ha hecho estallar la protesta en Libia.