Dilma Rousseff pierde a un segundo ministro por un caso de corrupci¨®n
Dimite el responsable de Transportes, Alfredo Nascimento, involucrado en fraudes en licitaciones p¨²blicas. Pese al esc¨¢ndalo, el exministro retoma su cargo en el senado
Un nuevo esc¨¢ndalo de corrupci¨®n acaba de explotar en el gobierno Rousseff, esta vez en el ministerio clave de Transportes, responsable por las obras millonarias de infraestructuras del pa¨ªs as¨ª como las que se refieren al Mundial de f¨²tbol de 2014 y los Juegos Ol¨ªmpicos de 2016. Alfredo Nascimento, titular del ministerio desde 2003, con Lula, present¨® ayer su dimisi¨®n "con car¨¢cter irrevocable" arrastrado por acusaciones de presunta corrupci¨®n publicadas en los medios de comunicaci¨®n. Pese a dejar el ministerio, Nascimento reasumir¨¢ su puesto como senador y presidente nacional su partido, el Partido de la Rep¨²blica (PR).
La dimisi¨®n se produce apenas un mes despu¨¦s de que el considerado hombre fuerte del Gobierno, el ministro de la Presidencia Antonio Palocci, se viera obligado a dejar el cargo tambi¨¦n por corrupci¨®n.
A las 24 horas de haber revelado la revista Veja una supuesta trama de corrupci¨®n dentro del Ministerio de Transportes, la presidenta, Dilma Rousseff, suspendi¨® a todos los cargos de direcci¨®n del ministerio, aunque mantuvo al ministro, a quien acab¨® obligando a salir. Adem¨¢s, todas las subastas de obras hab¨ªan sido canceladas durante 30 d¨ªas. La supuesta trama se basaba en que todas las empresas que trabajaban para el Gobierno pagaban un 4% en propinas al PR, el partido de Nascimento.
El caso se agrav¨® con la revelaci¨®n de que la fiscal¨ªa est¨¢ investigando un supuesto enriquecimiento de Gustavo Morais Pereira, hijo del ministro, de 27 a?os y arquitecto, como public¨® el diario O Globo ayer. Seg¨²n el peri¨®dico, Morais ha acumulado 52 millones de reales (unos 26 millones de euros) dos a?os despu¨¦s de haber creado la empresa Forma Constru?oes con un capital de 60.000 reales (unos 27.000 euros).
Horas despu¨¦s la revista Isto¨¦ public¨® un v¨ªdeo en el que aparece el ministro junto con el l¨ªder de su partido, el PR, Valdemiro Costa Neto, en el que se le ofrecen a diputados obras millonarias a cambio de pasarse a las filas de su partido.
Dilma ya hab¨ªa hecho notar tiempo atr¨¢s que el ministerio de Transportes "estaba descontrolado". Es la primera vez que un presidente toma decisiones dr¨¢sticas de destituir a un ministro al mismo tiempo que se publican informaciones de prensa sobre corrupci¨®n.
Dilma sabe que, pese a contar con la mayor¨ªa del Congreso, la fidelidad de sus adeptos es muy fr¨¢gil y tiene que ser alimentada con favores y cargos. Una mayor intransigencia contra la corrupci¨®n podr¨¢ crearle graves problemas a la hora de gobernar y tomar decisiones. Ella lo sabe y quienes la conocen aseguran que est¨¢ dispuesta a pagar esa cuenta antes que aparecer "d¨¦bil en materia de corrupci¨®n".
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