"Soy un privilegiado: en 2012 tendr¨¦ trabajo. En 2013, no s¨¦"

"Me llamo Nicola Villa, tengo 27 a?os y soy un privilegiado. Soy hijo de clase media; he podido estudiar lo que quer¨ªa; mis padres estudiaron en la universidad y se convirtieron en profesionales acomodados; mis abuelos eran obreros y pudieron ahorrar y garantizar el bienestar para su futuro. Soy un privilegiado porque tengo un contrato de colaboraci¨®n en una peque?a editorial de mi ciudad, Roma, donde he estudiado y crecido. Me licenci¨¦ en 2009 y aproximadamente un a?o despu¨¦s encontr¨¦ trabajo: soy un privilegiado porque trabajar¨¦ durante todo 2012; para 2013 todav¨ªa no tengo ninguna seguridad.

Durante el a?o que buscaba trabajo pens¨¦ trasladarme a Londres, pero despu¨¦s de vivir all¨ª alg¨²n tiempo encontr¨¦ un ambiente mucho m¨¢s despiadado y competitivo debido a la crisis, donde era imposible encontrar trabajo y ser feliz. Miro a Europa como una promesa que no se ha mantenido, una ocasi¨®n perdida, pero m¨¢s que con los Gobiernos y con Hacienda, me enfado con mis coet¨¢neos de Europa, que se conforman con la idea de una sociedad fracasada y en quiebra, y obsesionada por el dinero, unidos solo por el consumo material y cultural.

El capital se ha cargado el mundo, como dijo el escritor John Le Carr¨¦ en la ¨²ltima entrevista que concedi¨®. Economistas e historiadores nos dicen que nunca como hoy, en la historia de la humanidad, tanta riqueza se ha concentrado en manos de tan pocos. Esta conciencia, aunque est¨¢ presente, no parece unir a los j¨®venes europeos, a pesar de que nos encontramos en el momento hist¨®rico adecuado para conseguir algunos objetivos, porque el campo est¨¢ libre de cualquier representaci¨®n pol¨ªtica: este es el momento para crear e inventarse formas nuevas de asistencia y ayuda rec¨ªproca, nuevas formas de protesta y de conquista de derechos, precisamente cuando los Gobiernos desmantelan el Estado del bienestar. El momento adecuado para pasar de la indignaci¨®n a la auto-organizaci¨®n".