Unidad en la calle, divisi¨®n pol¨ªtica
La firmeza ciudadana ante los ataques contrasta con las disputas electorales
Los asesinatos del pistolero de la Yamaha T-Max han unido en el dolor, el respeto y el miedo a los ciudadanos franceses. Tanto en Toulouse (cuarta ciudad m¨¢s poblada del pa¨ªs), como en la cercana y pl¨¢cida Montauban, las dos urbes tocadas por la tragedia, la gente camina por la calle con semblante serio y preocupado. ¡°Cada vez que o¨ªmos el ruido de una moto sentimos miedo, la verdad es que hay un poco de psicosis en la ciudad¡±, cuenta esta estanquera de Montauban, en cuya puerta se produjo el segundo ataque el jueves pasado.
Pero ese miedo, en una zona del pa¨ªs muy poco acostumbrada a vivir actos de una violencia tan extrema, no ha impedido que miles de personas hayan participado en los actos de homenaje a las v¨ªctimas. El martes, varios cientos de ciudadanos arroparon bajo un silencio total y no pocas l¨¢grimas al alcalde de Toulouse, Pierre Cohen, que conden¨® la matanza de tres ni?os y un profesor ocurrida el d¨ªa anterior. Cohen conden¨® ¡°estos actos racistas dirigidos contra musulmanes y jud¨ªos¡±, y llam¨® a la poblaci¨®n ¡°a ser prudente y permanecer vigilante¡±. El regidor subray¨® que ¡°la vida de la Rep¨²blica debe continuar. Hay que demostrar que no tenemos miedo, un criminal no puede debilitar a la Rep¨²blica¡±, y explic¨® que la m¨¢xima alerta antiterrorista, el nivel escarlata, permitir¨¢ vigilar mejor las instituciones, locales y s¨ªmbolos laicos y religiosos.
Mientras tanto, en Par¨ªs la clase pol¨ªtica empezaba a romper filas y toda la unidad mostrada en las horas posteriores al d¨ªa del atentado contra la escuela jud¨ªa. Mientras los cad¨¢veres de las v¨ªctimas llegaban por avi¨®n a Par¨ªs para ser repatriados anoche a Jerusal¨¦n, estallaban las primeras disputas sobre la campa?a electoral y la explotaci¨®n pol¨ªtica de la tragedia.
La controversia surgi¨® por los comentarios sobre el asesino que hizo el presidente, Nicolas Sarkozy, tras guardar el minuto de silencio junto a un grupo de escolares en un colegio del Distrito IV de Par¨ªs. El presidente dijo textualmente a los alumnos: ¡°Cuando uno coge a una ni?a peque?a para meterle una bala en la cabeza sin dejarle ninguna oportunidad es un monstruo¡±.
C¨¦cile Duflot, secretaria general del grupo Ecologistas-Los Verdes, replic¨® a trav¨¦s de Twitter: ¡°Yo creo, se?or presidente que no es forma de hablar a los ni?os. El deber de los adultos es protegerlos, no angustiarlos¡±.
La tregua de la campa?a, decidida por todos los partidos el d¨ªa anterior, quedo tambi¨¦n rota. Si Nicolas Sarkozy y el socialista Fran?ois Hollande decidieron mantenerse en el registro de la condena y el recogimiento, tres candidatos decidieron volver a la actividad electoral. El centrista Fran?ois Bayrou, el aspirante del Frente de Izquierda, Jean-Luc M¨¦lenchon, y la candidata de Lucha Obrera, Nathalie Arthaud, anunciaron que regresaban a la campa?a.
El mi¨¦rcoles, Sarkozy, Hollande, Bayrou y la extremista de derechas Marine Le Pen acudir¨¢n a Montaban para asistir a los funerales de Estado por los tres militares fallecidos, que se celebrar¨¢ en el cuartel del 17? Regimiento de Ingenieros Paracaidistas.
Varios vecinos de la ciudad comentaban ayer en el parque cercano al cuartel los ¨²ltimos acontecimientos. Y ninguno parec¨ªa tener claro si este asesino despiadado que ha acabado con la paz y la calma de esta zona agr¨ªcola que vive de la fruta y la verdura y donde casi nunca pasa nada es un loco o un asesino racista. ¡°Solo mata a negros, a jud¨ªos y ¨¢rabes¡±, dec¨ªa Gerard. Su amigo Pierre no ocultaba su temor a que el pistolero vuelva a actuar. ¡°Ya veremos el viernes¡±.
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