Los republicanos bloquean la equiparaci¨®n del salario femenino

El Partido Republicano ha bloqueado en el Senado de Estados Unidos la Ley de Salario Justo propuesta por los dem¨®cratas, que pretend¨ªa equiparar los sueldos que perciben los hombres y las mujeres. El lunes el presidente Barack Obama apoy¨® expl¨ªcitamente la norma destacando el impacto positivo que hubiera tenido para la econom¨ªa de las familias del pa¨ªs. Los senadores progresistas sab¨ªan de antemano que se iban a topar con la oposici¨®n en bloque del Partido Republicano, que sostiene que la disposici¨®n hubiera perjudicado al peque?o comercio y hubiera supuesto un retraso en el crecimiento econ¨®mico.

¡°Hoy es un d¨ªa triste para EE UU¡±, se ha lamentado Barbara Mikulski, la senadora por Maryland que ha promovido la norma. En plena campa?a electoral y con la pugna por el voto femenino en primer plano, los dem¨®cratas esperan sacar r¨¦dito electoral de esta derrota presentando la oposici¨®n de los conservadores como un nuevo ejemplo de la ¡°lucha contra las mujeres¡± del Partido Republicano. Una estrategia que la formaci¨®n progresista ha explotado durante la primavera a cuenta de la negativa republicana a apoyar las pol¨ªticas anticonceptivas de Obama o su rechazo frontal a la Ley contra la Violencia de G¨¦nero.

El Partido Republicano sostiene que la disposici¨®n hubiera supuesto un retraso en el crecimiento econ¨®mico

Los republicanos, como en las ¨²ltimas ocasiones en las que han votado leyes que afectan a los derechos de las mujeres, han recriminado a los dem¨®cratas que con estas iniciativas lo que pretenden es desviar de la atenci¨®n p¨²blica problemas m¨¢s acuciantes como el desempleo. El lunes, sin embargo, Obama acentu¨® la importancia econ¨®mica de la Ley de Salario Justo, present¨¢ndola como un elemento fundamental para impulsar el crecimiento de EE UU: ¡°Las mujeres son el sost¨¦n de muchas familias y si perciben menos dinero que los hombres por hacer el mismo trabajo, estas ver¨¢n reducidos sus ingresos y las posibilidades de garantizar el cuidado y la educaci¨®n de los ni?os; el peque?o comercio tendr¨¢ menos clientela¡­ Todo el mundo sufrir¨¢¡±.

El Partido Dem¨®crata inst¨® el lunes al candidato republicano a la presidencia, Mitt Romney, a que se definiera p¨²blicamente sobre su apoyo a la ley. Mikulski recrimin¨® al exgobernador de Massachusetts que con su silencio alentara la oposici¨®n de su partido. Aunque el pasado mes de abril Romney se mostr¨® de acuerdo con la igualdad salarial, en v¨ªsperas de la votaci¨®n de la norma solo Amanda Henneberg, una de las portavoces de su campa?a se pronunci¨® al respecto. ¡°Claro que el gobernador apoya la paridad de sueldos para las mujeres, pero para eso es necesario que ¨¦stas tengan trabajo y bajo la an¨¦mica situaci¨®n econ¨®mica de Obama, muchas est¨¢n perdiendo sus empleos¡±, puntualiz¨®.

Obama acentu¨® la importancia econ¨®mica de la ley, present¨¢ndola como un elemento fundamental para impulsar el crecimiento de EE UU

En EE UU, por cada d¨®lar que gana un hombre, por realizar el mismo trabajo una mujer percibe 77 centavos, seg¨²n datos del Censo. Una brecha que se acent¨²a en el caso de las afroamericanas, 64 centavos, y las hispanas, 56 centavos. De salir adelante, la ley obligar¨¢ a los empresarios a demostrar que las diferencias salariales no vienen determinadas por la diferencia de g¨¦nero y prohibir¨¢ que alguien sea despedido por preguntar cu¨¢nto gana otra persona en su mismo puesto.

En la sesi¨®n del martes en el Senado, los representantes dem¨®cratas tambi¨¦n procuraron centrar sus argumentos en los beneficios econ¨®micos de la ley. ¡°Con la igualdad salarial muchas mujeres podr¨¢n destinar la diferencia a gastar en el peque?o comercio en lugar de tener que ahorrarla y abstenerse de consumir¡±, ha indicado Kay Hagan, senadora por Carolina del Norte. Aunque la propuesta de la Ley de Salario Justo pueda parecer m¨¢s pol¨ªtica que legislativa, el hecho que es que el partido progresista ha mostrado una unidad en este asunto de la que ha adolecido en recientes votaciones relativas a recortes presupuestarios.