Karadzic: "Me enter¨¦ del genocidio de Srebrenica cuando llegu¨¦ a La Haya"
El expol¨ªtico serbobosnio rechaza la acusaci¨®n de genocidio por la matanza de 8.000 musulmanes, cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad cometidos en los a?os 90
Radovan Karadzic, expresidente de la Rep¨²blica Serbia de Bosnia, comandante supremo del Ej¨¦rcito y jefe del Consejo de Seguridad Nacional entre 1992 y 1996, ha rechazado el cargo de genocidio nada m¨¢s abrir su defensa ante el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY). Y lo ha hecho con una frase sorprendente, dado el poder que lleg¨® a ostentar: ¡°No supe de lo ocurrido en Srebrenica [donde perecieron asesinados a 8.000 varones musulmanes a manos de tropas serbias] hasta llegar a La Haya¡±.
Acusado tambi¨¦n de cr¨ªmenes de guerra por el sitio de Sarajevo, que cost¨® la vida a unas 12.000 personas, ha utilizado la misma t¨¢ctica para distanciarse del peor cerco de la historia moderna en Europa. ¡°Sarajevo es mi ciudad querida. La conozco palmo a palmo. Mi esposa es de all¨ª y all¨ª nacieron nuestros hijos. Los bombardeos y los francotiradores me horrorizan. Los que empezaron los asesinatos fueron los musulmanes bosnios, no los serbios. Lo que ocurri¨® fue en defensa propia¡±, ha dicho.
Una vez negados ambos cargos, y el de cr¨ªmenes contra la humanidad, Karadzic, que se representa a s¨ª mismo, ha subrayado que los serbios no empezaron la guerra de Bosnia. ¡°La poblaci¨®n musulmana les puso contra la pared. En todo caso, deber¨ªan juzgarme por mi estupidez y por la confianza que deposit¨¦ en otros¡±. Psiquiatra de formaci¨®n, y escritor por vocaci¨®n, se ha definido como un hombre tranquilo, tolerante y moderado con gran capacidad de comprensi¨®n. Seg¨²n su versi¨®n, nunca hubo roces entre las distintas etnias que poblaban la antigua Federaci¨®n Yugoslava, ¡°por eso nadie pens¨® que pudiera haber un genocidio contra los que no fueran serbios¡±. ¡°La verdad acabar¨¢ por imponerse a la propaganda y las mentiras¡±, ha asegurado. La tranquilidad con que ha hecho estas declaraciones contrastaba con los gestos de incredulidad del p¨²blico que llenaba la sala de vistas. Muchos han viajado desde Bosnia para verle declarar, y no pod¨ªan creer el alegato pacifista que escuchaban.
El ciclo de los juicios por las guerras de los Balcanes ante el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) toca a su fin. Este martes, sus jueces y fiscales esperan a Goran Hadzic, expresidente de la autoproclamada Rep¨²blica Serbia de Krajina, y acusado de cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad. Es el ¨²ltimo renegado de un conflicto inter¨¦tnico que caus¨® unos 100.000 muertos y m¨¢s de dos millones de desplazados. Menos conocido que el exl¨ªder pol¨ªtico serbobosnio Radovan Karadzic, o bien su brazo derecho, el exgeneral Ratko Mladic, el proceso contra Hadzic culmina dos d¨¦cadas de justicia para las v¨ªctimas, en su mayor¨ªa civiles.
En la 'masacre del hospital', 263 personas fueron sacadas de un centro m¨¦dico al noreste de Croacia, asesinadas y arrojadas a una fosa com¨²n
Aunque ambos ocupar¨¢n la agenda de Tribunal toda la semana, contin¨²a el proceso contra Mladic; el exgeneral croata Ante Gotovina, condenado a 24 a?os por matar serbios, aguarda el resultado de su apelaci¨®n, y Vojislav Sesejl, fundador del Partido Radical Serbio, espera conocer su suerte. La fiscal¨ªa ha pedido 28 a?os por incitar a los paramilitares a la violencia.
Son el quinteto m¨¢s reconocible del conflicto yugoslavo, aunque el pez gordo del grupo, el expresidente serbio Slobodan Milosevic, considerado por los fiscales responsable de buscar la Gran Patria Serbia aplicando la limpieza ¨¦tnica, muri¨® hace seis a?os sin recibir una sentencia firme. Los dem¨¢s acusados tienen expedientes no menos turbadores.
Karadzic califica de ¡°justa y sagrada¡± la causa serbia y niega que en Srebrenica hubiera un genocidio
Goran Hadzic, antiguo presidente de los serbios de Croacia, trabajaba antes en un almac¨¦n. Acusado de cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad, fue detenido en julio de 2011 en un bosque situado al norte de Belgrado, la capital serbia. Falto de dinero tras ocho a?os huido, pretend¨ªa vender un cuadro robado, y aut¨¦ntico, del pintor impresionista italiano Amadeo Modigliani. Padre de dos hijos con sendas mujeres, dirigi¨® unas tropas que recib¨ªan sus armas del Ej¨¦rcito yugoslavo. Hadzic responder¨¢ de la matanza de Vukovar y la deportaci¨®n de 20.000 personas.
Tambi¨¦n conocida como la masacre del hospital, es un crimen de guerra ocurrido en 1991 al noreste de Croacia. Del centro m¨¦dico en cuesti¨®n fueron sacadas 263 personas, entre civiles y prisioneros de guerra, para ser llevadas a Ovcara, una zona pr¨®xima con almacenes y hangares. All¨ª les torturaron y asesinaron para arrojarles luego a una fosa com¨²n. Los milicianos serbios que dispararon contra las v¨ªctimas estaban a las ¨®rdenes de Hadzic. El s¨®tano del hospital es hoy un centro de peregrinaje. Ovkara, por su parte, sirvi¨® de campo de concentraci¨®n por el que pasaron hasta 4.000 prisioneros croatas. La detenci¨®n de Hadzic anim¨® al presidente serbio, Boris Tadic, a renovar su petici¨®n de adhesi¨®n a la UE. Las reformas precisadas por Serbia y la propia situaci¨®n de la UE, en plena crisis, no invitan a pensar que Belgrado obtenga respuesta antes de 2015.
Seg¨²n los fiscales, Mladic ¡°orden¨® ataques contra la poblaci¨®n no serbia, mat¨® y atemoriz¨® a la gente, la deport¨® y destruy¨® sus hogares¡±
Radovan Karadzic se hizo pasar por un curandero llamado Dragan Dabic para burlar durante 12 a?os a la justicia internacional. Arrestado en 2008, presentaba un aspecto asombroso con barba poblada, cabello largo y un recogido en coleta. Se hac¨ªa pasar por especialista en medicina alternativa y psicolog¨ªa, y desde su entrega ha intentado retrasar el proceso.
Despu¨¦s de perder en 2009 todas las apelaciones que interpuso, en 2010 se estren¨® como abogado de su causa con los testigos presentados por la fiscal¨ªa. La acusaci¨®n debe demostrar que Karadzic tuvo la voluntad de ejercer la limpieza ¨¦tnica en la antigua Yugoslavia. ?l califica de ¡°justa y sagrada¡± la causa serbia y niega que en Srebrenica hubiera un genocidio. En junio pasado, los jueces retiraron otro cargo de genocidio supuestamente perpetrado en varios municipios de Bosnia. Consideraron que las pruebas de los fiscales no eran concluyentes, pero mantuvieron los diez cargos restantes. Este martes es esperado en la sala de vistas acompa?ado de su asesor legal, Peter Robinson.
Ratko Mladic es el exjefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito serbio a las ¨®rdenes de Karadzic. Arrestado en mayo de 2011 en Lazarevo, un peque?o pueblo a 80 kil¨®metros de Belgrado, ten¨ªa tambi¨¦n un alias: Milorad Komadic. Muy envejecido, no opuso resistencia al ser descubierto. Su escapada dur¨® 16 a?os, aunque hasta 2002 vivi¨® abiertamente en Serbia. En 2010, su familia quiso declararlo muerto porque dec¨ªan no haberle visto en siete a?os. Asegura que su salud es mala, lejos del vigor mostrado en los v¨ªdeos de 1995, cuando entr¨® en Srebrenica apartando de un plumazo a los cascos azules holandeses que proteg¨ªan la ciudad. Fue el general m¨¢s brillante de su generaci¨®n y est¨¢ acusado, como Karadzic, de genocidio por la muerte de los 8.000 musulmanes bosnios en aquella ciudad. El cargo de cr¨ªmenes de guerra, que tambi¨¦n se le atribuye, es por el sitio de Sarajevo. El de cr¨ªmenes contra la humanidad, por su plan de ¡°eliminar a todos los bosnios musulmanes, y a los croatas, de Bosnia¡±.
Apoyado por un equipo legal, Mladic figuraba en la c¨²pula de mando del Ej¨¦rcito serbio. Seg¨²n los fiscales, ¡°orden¨® ataques contra la poblaci¨®n no serbia, mat¨® y atemoriz¨® a la gente, la deport¨® y destruy¨® sus hogares¡±. ¡°En Srebrenica, dise?¨® la campa?a de exterminio y la forma de ocultarlo¡±. Mladic intenta torpedear el proceso, abierto en mayo, y proclama que solo defendi¨® a la patria serbia ¡°contra la amenaza del agresor musulm¨¢n¡±. En junio pasado, el juicio se atasc¨® por un error t¨¦cnico de la fiscal¨ªa, que no remiti¨® a la defensa miles de documentos. Una vez subsanado, en julio llegaron los testigos de la acusaci¨®n, que espera contar con 400.
Vojislav Sesejl fue el fundador del Partido Radical de Serbia y l¨ªder ultranacionalista. El fiscal ha pedido 28 a?os de c¨¢rcel por instigar la persecuci¨®n y asesinato de civiles no serbios. En concreto, habr¨ªa reclutado a grupos paramilitares para cometer los cr¨ªmenes. Se entreg¨® voluntariamente en 2003, pero el juicio no arranc¨® hasta 2007. En 2009 tuvo que suspenderse un tiempo por intimidaci¨®n de los testigos de la fiscal¨ªa. Ha protagonizado una huelga de hambre y ha denunciado la violaci¨®n de sus derechos al haberse dilatado tanto la causa. Ha llamado ¡°prostituta¡± a la antigua fiscal jefe del TPIY, Carla del Ponte, e insultado a los jueces. En cuanto al tribunal, lo califica de ¡°obra de los servicios secretos occidentales sin competencia alguna¡±. A la espera del fallo definitivo, ha sido condenado por desacato.
Ante Gotovina, exgeneral croata considerado un h¨¦roe de la independencia de su pa¨ªs, fue condenado a 24 a?os de c¨¢rcel en 2011 por cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad. Permiti¨® el asesinato, persecuci¨®n y deportaci¨®n de civiles serbios. Aprob¨® asimismo el saqueo de los bienes de las v¨ªctimas. Todo ello ocurri¨® en 1995 durante la Operaci¨®n Tormenta, destinada a expulsar a las fuerzas serbias de Krajina. En cuatro d¨ªas escasos, recuper¨® el control de las zonas de Croacia reclamadas por los serbios desde 1991. Los croatas celebran el 5 de agosto, fecha en que Gotovina tom¨® el lugar, como el D¨ªa de los Defensores. Detenido en Tenerife en 2005, ha apelado la sentencia. La colaboraci¨®n de Croacia con el TPIY ha allanado la ruta hacia la UE, en la que prev¨¦ entrar hacia 2013.
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