Convergencia de intereses
China y Europa se enfrentan a desaf¨ªos internos m¨¢s graves que las amenazas del exterior
El ascenso de China tiene que ser pac¨ªfico. La globalizaci¨®n de la econom¨ªa ha hecho posible este ascenso. Y el ascenso pac¨ªfico de China, a su vez, ha ofrecido y seguir¨¢ ofreciendo al mundo oportunidades y mercados para beneficio mutuo y un progreso en el que todos ganan. Adem¨¢s, China necesita ampliar gradualmente la convergencia de intereses y construir comunidades de intereses con nuestros vecinos y con las regiones circundantes, as¨ª como con todos los pa¨ªses y regiones. En el curso de su ascenso pac¨ªfico, China debe y puede formar comunidades de intereses que no se puedan separar f¨¢cilmente, con diversos pa¨ªses y regiones, en diferentes ¨¢mbitos y a diferentes niveles.
La raz¨®n es la siguiente: en la era de la globalizaci¨®n, nuestros intereses est¨¢n tan profundamente entrelazados que dependemos unos de otros; la aparici¨®n de amenazas de seguridad no tradicionales ha dado lugar a un nuevo concepto de la seguridad basado en la cooperaci¨®n entre los principales pa¨ªses; la comunidad internacional se ha dado cuenta de la necesidad de realizar esfuerzos conjuntos para abordar problemas regionales en ¨¢reas conflictivas y mantener la paz y la seguridad internacionales; los crecientes contactos e intercambios culturales entre personas de distintos pa¨ªses y regiones han mejorado su comprensi¨®n mutua.
Los mayores retos de Europa no provienen de fuera de la UE, sino de la necesidad de realizar ajustes y reformas internos
Desde que estall¨® la crisis financiera en 2008, y especialmente en la segunda d¨¦cada del siglo XXI, China y Europa se enfrentan ambas a enormes desaf¨ªos internos, desaf¨ªos que son mucho m¨¢s graves que las amenazas de seguridad exterior. Para hacer frente a estos desaf¨ªos, he propuesto el concepto estrat¨¦gico de ampliar y profundizar la convergencia de intereses y crear comunidades de intereses.
Para China, el desarrollo y la estabilidad siguen encabezando el orden del d¨ªa. En la actualidad, la creciente tasa de inflaci¨®n, la presi¨®n sobre el tipo de cambio del RMB, la creciente disparidad de los ingresos, las burbujas inmobiliarias, etc., exigen una soluci¨®n urgente. A m¨¢s largo plazo, la reestructuraci¨®n econ¨®mica, el avance de la ciencia, la tecnolog¨ªa y la educaci¨®n y la mejora de la gobernanza social son las tres tareas de importancia fundamental que tenemos que abordar.
Los mayores retos de Europa no provienen de fuera de la Uni¨®n Europea, sino de la necesidad de realizar ajustes y reformas internos. La primera prioridad actual de la UE es alcanzar el equilibrio presupuestario, saldar su deuda, reanudar el crecimiento y mejorar la competitividad internacional.
China es el principal socio comercial de la UE. Ahora somos altamente interdependientes en lo econ¨®mico
Para hacer frente a nuestros respectivos retos, todos necesitamos un entorno exterior estable, una reforma gradual del sistema internacional y un enfoque moderado de la gobernanza mundial. Ese es nuestro inter¨¦s com¨²n. En este contexto, si China y Europa consideran como su mayor inter¨¦s com¨²n mantener la estabilidad de la otra parte y la del sistema internacional, entonces la expansi¨®n de la "convergencia de intereses" y la creaci¨®n de "comunidades de intereses" tendr¨¢n unos cimientos amplios y s¨®lidos.
China es el principal socio comercial de la UE. Ahora somos altamente interdependientes en lo econ¨®mico. Si podemos reducir y eliminar las barreras comerciales y de inversi¨®n y facilitar que las empresas chinas inviertan en Europa, ayudar¨¢n a crear muchos puestos de trabajo en los pa¨ªses de acogida. Asimismo, hay tambi¨¦n muchas oportunidades para la inversi¨®n de las empresas europeas en China. Adem¨¢s, intensificar las consultas sobre el futuro sistema mundial de divisas y el mecanismo de regulaci¨®n financiera y promover reformas en estas ¨¢reas ayudar¨¢ mucho para apoyar un desarrollo econ¨®mico equilibrado en el mundo. Esto tambi¨¦n es de inter¨¦s com¨²n.
China y Europa comparten tambi¨¦n muchos intereses convergentes en otras esferas. China es uno de los mayores consumidores de energ¨ªa, importadores de petr¨®leo y emisores de carbono del mundo. Europa tambi¨¦n es un gran importador de petr¨®leo: se espera que el petr¨®leo importado represente el 70% de su consumo en 2030. La cooperaci¨®n en energ¨ªas limpias promover¨¢ nuestro desarrollo econ¨®mico y la innovaci¨®n cient¨ªfica y tecnol¨®gica. Otras ¨¢reas donde nuestros intereses convergen incluyen el ciberespacio, el espacio exterior y la seguridad mar¨ªtima. Todas estas ¨¢reas est¨¢n relacionadas con la seguridad de la humanidad y deben tratarse como "terreno com¨²n", en el que resulta muy necesario establecer normas p¨²blicas y procedimientos operativos aceptables para los pa¨ªses interesados.
En zonas de seguridad no tradicionales, tambi¨¦n tenemos intereses comunes en el mantenimiento de la estabilidad en regiones como Oriente Pr¨®ximo, Asia Central y Asia Meridional y en la lucha contra el terrorismo.
Construir comunidades de intereses es una labor a largo plazo. En este proceso, pueden surgir controversias y diferencias entre China y la UE. Por ejemplo, China y la Uni¨®n Europea no coinciden en cuestiones de democracia, derechos humanos y el imperio de la ley. Esto es natural, porque tenemos diferentes sistemas pol¨ªticos y valores. La democracia representa la tendencia del mundo, pero no puede imponerse desde fuera, ni puede lograrse mediante la agitaci¨®n. El pueblo de cada pa¨ªs debe decidir su enfoque de los derechos humanos, la democracia y el imperio de la ley de conformidad con sus condiciones nacionales.
Pero siguen existiendo los factores b¨¢sicos y el impulso para avanzar en el desarrollo de las relaciones China-Europa en los pr¨®ximos diez a?os. Esto nos obliga a buscar nuevos puntos de crecimiento tanto en las relaciones bilaterales como en las multilaterales, con miras a ampliar y profundizar nuestra convergencia de intereses y crear comunidades de intereses, que ser¨¢n beneficiosas para todas las partes.
Zheng Bijian es presidente del Instituto Chino para la Innovaci¨®n y la Estrategia del Desarrollo de Pek¨ªn.
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