Maduro se muestra contrario a la excarcelaci¨®n humanitaria de un opositor
El excomisario de polic¨ªa Iv¨¢n Simonovis, que sufre osteoporosis, lleva en prisi¨®n desde 2004
El caso de Iv¨¢n Simonovis ¡ªun exdetective de la polic¨ªa judicial, condenado a 30 a?os de prisi¨®n en 2009¡ª lleva poniendo a prueba la autonom¨ªa del poder judicial en Venezuela desde hace casi una d¨¦cada.
La semana pasada, el caso ofreci¨® tambi¨¦n una oportunidad para medir cu¨¢l es el margen de maniobra del vicepresidente Nicol¨¢s Maduro, quien en la pr¨¢ctica lleva adelante un interinato mientras se prolonga la convalecencia en Cuba del presidente Hugo Ch¨¢vez, y que, con toda probabilidad, ser¨¢ el candidato del oficialismo cuando se convoquen nuevas elecciones para reemplazar al mandatario.
La oposici¨®n venezolana ha hecho causa c¨¦lebre de la situaci¨®n de los denominados ¡°presos pol¨ªticos¡±, disidentes a los que la justicia ha sometido a penas de privaci¨®n de libertad en procesos donde el Gobierno dej¨® sentir su influencia. En respuesta, los voceros del chavismo enarbolan un juego de palabras: en Venezuela no hay presos pol¨ªticos, sino pol¨ªticos presos, pues se trata de ciudadanos cuyas condenas no atienden a sus opiniones sino a su participaci¨®n en delitos como la corrupci¨®n o el homicidio.
Entre esas figuras destaca la de Simonovis. Su particular novela negra se inicia en 2002. Hasta entonces hab¨ªa sido uno de los m¨¢s reputados comisarios del Cuerpo de Investigaciones Cient¨ªficas, Penales y Criminal¨ªsticas (CICPC), la polic¨ªa auxiliar del Ministerio P¨²blico (fiscal¨ªa). Tras 23 a?os de carrera, fue designado secretario de Seguridad Ciudadana de la Alcald¨ªa de Mayor de Caracas, a cargo entonces de un exaliado de Ch¨¢vez, el alcalde Alfredo Pe?a, hoy en el exilio.
Entre sus funciones se contaba la coordinaci¨®n con los cuerpos policiales en el resguardo y monitoreo de manifestaciones callejeras. El 11 de abril de 2002, una enorme manifestaci¨®n opositora, convocada en medio de un paro nacional, march¨® desde el este de Caracas hacia el Palacio de Miraflores, sede de la Presidencia de la Rep¨²blica. Exig¨ªa la renuncia de Ch¨¢vez. Fue el pre¨¢mbulo de choques en el centro de la capital venezolana que, con un saldo de 19 muertes, abrieron el espacio para una trama, todav¨ªa inexplicada, que desemboc¨® en la salida de Ch¨¢vez del poder durante 47 horas.
Hay quienes aseguran que durante los llamados ¡°sucesos de abril¡±, Simonovis intent¨® disuadir a los manifestantes de marchar hacia la sede presidencial. Pero no pudo evitar la matanza. A¨²n m¨¢s: a la larga un tribunal de Maracay ¡ªcapital del Estado Aragua, a unos 100 kil¨®metros al oeste de Caracas¡ª le endos¨® la complicidad en la muerte de dos de los ciudadanos abatidos en esa fecha.
Seg¨²n el chavismo, en Venezuela no hay presos pol¨ªticos sino pol¨ªticos presos
La decisi¨®n culmin¨® un proceso inusual de tres a?os de duraci¨®n. Desde 2004, mucho antes de la sentencia¡ª que se produjo en 2009¡ª el acusado permaneci¨® recluido en una celda de cuatro metros cuadrados en el s¨®tano del cuartel de la polic¨ªa pol¨ªtica. El juicio se celebr¨® en Maracay, baluarte de una logia judicial que responde ante el exvicepresidente de Venezuela y exembajador en Madrid, Isa¨ªas Rodr¨ªguez. Si todo el proceso luc¨ªa ama?ado, las sospechas adquirieron peso de certezas cuando en septiembre de 2012, Eladio Aponte Aponte, ex fiscal militar y exmagistrado del Tribunal Supremo de Justicia, tras desertar en Miami, confes¨® que hab¨ªa recibido instrucciones de Ch¨¢vez para asegurar una condena contra Simonovis y los otros procesados, dos altos comisarios de la Polic¨ªa Metropolitana de Caracas y otros ocho agentes.
Al d¨ªa de hoy, solo Simonovis y los polic¨ªas de rango bajo siguen en prisi¨®n. Los comisarios de la Polic¨ªa Metropolitana Henry Vivas y L¨¢zaro Forero recibieron una gracia de excarcelaci¨®n en 2011, cuando se comprob¨® que ambos padec¨ªan c¨¢ncer. Esta medida se le niega a Simonovis, v¨ªctima de una grave osteoporosis que puede llevarlo a la inmovilidad.
La semana pasada arreci¨® una campa?a p¨²blica para conseguir la libertad de Simonovis, con ocasi¨®n de una audiencia programada el jueves en Maracay en la que el tribunal de la causa considerar¨ªa una posible medida humanitaria. Pero la sesi¨®n no se efectu¨®. Qued¨® aplazada para el 15 de febrero por inasistencia del m¨¦dico forense. En cualquier caso, no sorprendi¨® la dilaci¨®n porque casi simult¨¢neamente el vicepresidente Maduro expresaba p¨²blicamente su parecer, al se?alar que ¡°ahora quieren presentar como v¨ªctimas a quienes fueron el brazo armado del golpe de Estado¡±.
¡°No pueden tratar de manipular poniendo gente inocente para tapar los cr¨ªmenes cometidos por gente que por a?os trabaj¨® para la CIA¡±, sigui¨® acusando Maduro en lo que fue una alusi¨®n a la carta que d¨ªas antes le hab¨ªa sido remitida por la hija de Simonovis, Ivana, que solicitaba clemencia para el comisario.
Maduro hace las veces de cabeza del Ejecutivo desde que, el 8 de diciembre, Ch¨¢vez anunci¨® que deb¨ªa someterse a otra intervenci¨®n quir¨²rgica contra el c¨¢ncer en Cuba. En esa misma alocuci¨®n, Ch¨¢vez nombr¨® a Maduro su sucesor, en caso de que no estuviera capacitado para retornar al poder y debieran celebrarse nuevas elecciones presidenciales.
El actual vicepresidente nunca ha sometido su liderazgo a votaci¨®n popular y ha cultivado fama de pol¨ªtico dialogante y conciliador. Todo ello lo coloca bajo la presi¨®n del ala radical del chavismo, que duda de su vocaci¨®n revolucionaria. Una serie de declaraciones pugnaces en los ¨²ltimos d¨ªas supone un gesto de su parte para persuadir a ese sector.
De hecho, Maduro recibi¨® en su despacho a una representaci¨®n de las v¨ªctimas oficialistas del 11 de abril, a la que debi¨® prometer que se seguir¨¢ haciendo justicia. La misma delegaci¨®n visit¨® a la fiscal general de la Rep¨²blica, Luisa Ortega D¨ªaz, que no s¨®lo asegur¨® que se mantendr¨ªa vigilante sobre la posible concesi¨®n de una medida humanitaria a Simonovis, sino que pedir¨¢ la revisi¨®n de las gracias otorgadas con antelaci¨®n a los comisarios Vivas y Forero.
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