Disturbios en Cisjordania por la muerte de un preso palestino
Cientos de palestinos se enfrentan al Ej¨¦rcito de Israel Netanyahu le pide a la Autoridad Palestina que controle la situaci¨®n
Cientos de j¨®venes palestinos se enfrentaron este domingo a los soldados israel¨ªes para protestar por la muerte ayer de Arafaft Yaradat, un preso palestino que se encontraba bajo custodia israel¨ª. Los incidentes se registraron en tradicionales puntos de fricci¨®n, tales como la c¨¢rcel de Ofer (junto a Ramala) y el cruce de Hawara (cerca de Nabl¨²s), donde hubo varios heridos por impacto de balas recubiertas de caucho. Sin embargo, los m¨¢s importantes ten¨ªan lugar en el ¨¢rea aut¨®noma de Hebr¨®n, tanto en el centro de la ciudad como en el campo de refugiados de El Arub y en los pueblos de Beit Ummar y Halhul. Tambi¨¦n en el pueblo de Sair, del que era natural Yaradat, empleado de una gasolinera de la localidad, que hab¨ªa sido detenido el lunes anterior por lanzar presuntamente piedras contra un civil israel¨ª durante los disturbios que tuvieron lugar el pasado mes de noviembre durante la operaci¨®n ¡°Pilar Defensivo¡±, en la franja de Gaza. Yaradat, de 30 a?os, casado y con dos hijos de 2 y 4 a?os, fue declarado muerto el s¨¢bado por la tarde en la prisi¨®n de Megido, en el norte de Israel.
Este aumento de los incidentes registrados durante los ¨²ltimos d¨ªas en Cisjordania ha provocado la alerta de varios dirigentes palestinos, que advierten del peligroso empeoramiento de la situaci¨®n sobre el terreno. ¡°Nos encontramos sobre un barril de p¨®lvora que podr¨ªa explotar en cualquier momento¡±, se?alaba hace unas horas el director del Club de Prisioneros Palestinos, Qadura Fares, en relaci¨®n al creciente n¨²mero de protestas y disturbios acaecidos en Cisjordania. ¡°El Gobierno israel¨ª y su l¨ªder, Benjam¨ªn Netanyahu, ser¨¢n los responsables de una posible nueva Intifada¡±, sentenciaba el diputado del Consejo Legislativo Palestino, Mustafa Barguti, tras condenar tambi¨¦n los disparos supuestamente efectuados por un grupo de colonos contra vecinos del pueblo de Qusra, situado junto al asentamiento de Shilo (norte de Cisjordania).
Seg¨²n la portavoz del Servicio de Prisiones israel¨ª, Sivan Weizman, Yaradat falleci¨® como consecuencia de un paro card¨ªaco sobrevenido despu¨¦s de haber recibido atenci¨®n m¨¦dica tras quejarse de dolores debidos a lesiones contra¨ªdas previamente. Sin embargo, su viuda ¨Cque se encuentra embarazada por tercera vez¨C asegur¨® que se encontraba en buenas condiciones f¨ªsicas en el momento de su arresto. Las ONGs de derechos humanos palestinas Al Haq y Addameer, piensan que Yaradat muri¨® como consecuencia de malos tratos y tortura practicados en el transcurso de un interrogatorio por parte de agentes del Shabak (servicio de seguridad interior israel¨ª). La ONG israel¨ª B?tselem demand¨® igualmente que se hicieran p¨²blicos los m¨¦todos aplicados al ser interrogado. ¡°La investigaci¨®n debe ser independiente, efectiva, transparente y finalizarse sin demora¡±, rezaba el comunicado emitido por esta organizaci¨®n al poco de conocerse la muerte del preso.
El Primer Ministro palestino, Salam Fayyad, dijo encontrase en ¡°estado de shock¡± por lo ocurrido, y solicit¨® que las condiciones del fallecimiento de Yaradat sean examinadas por una comisi¨®n ad hoc de Naciones Unidas. Por otro lado, Hannan Ashrawi, miembro del Comit¨¦ Ejecutivo de la OLP, asegur¨® que intentar¨¢n elevar este caso concreto y la cuesti¨®n de los presos palestinos en general ante el Consejo de Seguridad. El ministro de Prisioneros de la ANP, Issa Qaraqa, acusaba al Gobierno israel¨ª de negligencia y lo hac¨ªa completamente responsable de la muerte de Yaradat, que por primera vez lograba que la inmensa mayor¨ªa de los 4.500 presos palestinos encarcelados en prisiones israel¨ªes guardaran una jornada de ayuno en se?al de protesta.
Este extra?o fallecimiento bajo custodia coincid¨ªa con un nuevo incidente entre los colonos del puesto avanzado de Esh Kodesh (junto al asentamiento de Shilo, en el norte de Cisjordania) y los palestinos del vecino pueblo de Qusra. Aunque los colonos aseguran que no hicieron uso de sus armas de fuego durante los enfrentamientos, el hospital de Rafidia (Nabl¨²s), en el que se prest¨® tratamiento a los heridos, hizo p¨²blicas unas radiograf¨ªas en las que se percib¨ªan sendos impactos de bala, una en el est¨®mago y otra en un pie. Por su parte, el Ej¨¦rcito asegur¨® que los soldados presentes ¨²nicamente hab¨ªan empleado balas recubiertas de caucho, una de las cuales termin¨® incrustada en un ojo de un joven del pueblo. Aparentemente, los vecinos de Qusra subieron hasta Esh Kodesh para protestar por los actos vand¨¢licos perpetrados el d¨ªa anterior por un grupo de colonos radicales, que les quemaron cuatro coches y pincharon las llantas de otros dos.
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