No hay disparo sin retroceso. La violencia puede terminar con la vida de quien la sufre, pero siempre modifica a quien la ejerce. Tambi¨¦n queda herida la mano que golpea. La guerra de Irak, como todas las guerras, ha cambiado a Estados Unidos. Y a cada uno de los aliados que participaron en aquella aventura, incluidos los m¨¢s peque?os. Todo eso es parte de una muy vieja sabidur¨ªa, no siempre atendida, que aconseja mucha prudencia antes de tomar las armas, sobre todo si se trata de iniciar las hostilidades, de disparar primero, aun cuando sea con la excusa de evitar que dispare el otro.
Con la guerra de Irak, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar rompi¨® definitivamente el consenso en pol¨ªtica exterior, identificado con un locoide ensue?o de grandeza. Recordemos algunas de sus frases de justificaci¨®n posterior: ¡°Espa?a est¨¢ por fin donde tiene que estar, con las dos democracias m¨¢s importantes, y se reconcilia con su naturaleza atl¨¢ntica¡±; ¡°Espa?a estuvo en las Azores porque no pudo participar en el desembarco de Normand¨ªa, que es donde deb¨ªamos haber estado¡±; ¡°Espa?a asume sus responsabilidades, defiende unos valores universales como son la libertad, la democracia y el respeto a la ley, y cumple la que debe ser la ambici¨®n de todos los espa?oles: estar entre los grandes pa¨ªses del mundo¡±. Es evidente que la crisis actual, pol¨ªtica y moral adem¨¢s de econ¨®mica, es hija tambi¨¦n del efecto de retroceso que produjo aquel disparo de Aznar tan desafortunado y del que debe todav¨ªa una explicaci¨®n en forma a los espa?oles.
Comentarios
Sigue Vd. a?orando al expresidente Bush.?Qu¨¦ cambio Estados Unidos la guerra de Irak o el 11-S?La grandeza de los Estados Unidos es indiscutible en muchos campos, como el econ¨®mico, el cient¨ªfico, etc, sin tener que invadir ning¨²n pa¨ªs. Estados Unidos no buscaba grandeza con la guerra de Irak sino cosas como justicia, seguridad, dar un castigo ejemplar, promocionar la democracia,¡¡¡Uno de los pocos aciertos del expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, por no decir el ¨²nico, fue apoyar a Estados unidos en la guerra contra Sadam Husein, un apoyo que no fue otra cosa que simb¨®lico pues los valientes militares espa?oles se negaron a participar en acciones de combate.?Vd. cree que Espa?a est¨¢ ahora donde ten¨ªa que estar?, Espa?a, lamentablemente, est¨¢ ahora en el alcantarillado de la econom¨ªa mundial.
Hola, amigos. AZNAR no dar¨¢ nunca una explicaci¨®n y menos una excusa, a todos los espa?oles y al mundo entero, como no la dar¨¢n tampoco ese par de genocidas a quienes acompa?¨® en la famosa foto de las Azores. BUSH, BLAIR y AZNAR, ese tr¨ªo de fantoches, bravucones e irresponsables, se pavonear¨¢n hasta el final, de sus atroces fechor¨ªas. Solamente la CORTE PENAL INTERNACIONAL llegar¨¢ un d¨ªa a juzgarlos y condenarlos como se merecen. El pretendido regreso de Espa?a a las grandes decisiones internacionales fue para avalar una de las guerras m¨¢s viles y malvadas que se conocen. Usar la mentira y el enga?o como pretexto para atacar a un pa¨ªs indefenso, producir miles de muertos inocentes y sumirlo m¨¢s a¨²n en el horror y el caos, del que no ha salido despu¨¦s de 10 a?os. Y todo por avaricia, ambici¨®n, dinero y venganza. Ah¨ª tienen los frutos y los motivos de orgullo del se?or AZNAR: un pa¨ªs destruido, millones de d¨®lares gastatos in¨²tilmente, miles de muertos y heridos, dolor y desgracia en Irak, destrucci¨®n, inseguridad y muerte en el Medio Oriente.
Por ¨²ltimo (y se me olvidaba), tambi¨¦n cambi¨® efectivamente a Espa?a. Pero para empeorarla. Directa o indirectamente, estamos pagando la insensatez de una guerra que produjo un gasto fiscal inmenso en los Estados Unidos y, como todo va conectado, la burbuja inflacionaria con el crack de entidades financieras importantes, arrastr¨® a una econom¨ªa d¨¦bil y fr¨¢gil como la de Espa?a. De esa burbuja inlacionaria tambi¨¦n hay que pedirle buena parte de responsabilidad al se?or AZNAR. Pero claro, ¨¦l, lo mismo que sus entusiastas seguidores del PP, seguir¨¢n recurriendo a artima?as de todas clase (que para eso es el poder), con el fin de no dar la cara, no decir la verdad y seguir como si tal cosa hasta que la gente se olvide (?ser¨¢ posible?), del se?or B?RCENAS, del poderoso se?or B?RCENAS.
Pues yo jurar¨ªa seg¨²n algunos estudios econ¨®micos recientes que el gasto de esas guerras jugaron su papel en los actuales problemas econ¨®micos de EEUU -incluso sociales si lo hacemos extensible, por estrecha relaci¨®n, a las pol¨ªticas fiscales de Bush-.El 11-S solo cambi¨® la historia del resto de soberan¨ªas estatales, dando carta blanca de schmittianas resonancias al terrorismo norteamericano en territorio ajeno sin tener que responder por ello.Adem¨¢s del aumento de desigualdades en casa, hablamos tambi¨¦n de la actual desestabilizaci¨®n mundial, que solo el propio Aznar bajo seud¨®nimo o cualquier intoxicador a sueldo de la onda del cre¨ªble y fiable Murdoch puede defender en ese estrafalario relato sin que le entre la risa floja.Pero supongo que con la misma tranquilidad con que justificar¨¢ en defensa de nuestra gloriosa Historia el genocidio ind¨ªgena en Am¨¦rica, la expulsi¨®n de los amenazantes moros, el franquismo que puso las bases de nuestra magn¨ªfica democracia o el milagro econ¨®mico crediticio-inmobiliario Aznar-Rato que los derroches de Bibiana A¨ªdo echaron por tierra provocando la actual crisis.La broma en serio, que dec¨ªa Stendhal. Historia en estado puro y riguroso, pasen y r¨ªan...
No recordaba algunas de esas frases de Aznar. Supongo que ¨¦l tampoco. Ya las habr¨¢ olvidado. Ahora est¨¢ en otra guerra con otro retroceso.
Han pasado diez a?os y ninguno de los cuatro jinetes del apocaliptsis ha sido llevado a la justicia internacional. Ocupan puestos importantes, dan conferencias, pero no comparecen ante quien deber¨ªan, como criminales de guerra que fueron. Alguno, incluso, nos representa en la UE como presidente, nada menos que de la Comisi¨®n. ?C¨®mo podemos tener, seguir teniendo de presidente de la Comisi¨®n Europea al anfitri¨®n complaciente de aquella cita catastr¨®fica en las Azores?
Y un apunte anecd¨®tico: dijo Aznar que Espa?a estuvo en las Azores porque no pudo estar en el desembarco de Normand¨ªa. No est¨¢ mal que lo diga un heredero de la derecha franquista. Por otro lado, c¨®mo ¨ªbamos a estar con Franco en el poder. No veo yo a Franco apoyando a los aliados en contra de su aliado. Lo que fue una pena de verdad fue la Guerra Civil espa?ola, la que nos impidi¨®, precisamente, estar el d¨ªa D a la hora H. No s¨¦ si habr¨¢ dicho alguna vez esto el ex presidente.
El gobierno de Estados Unidos, durante la presidencia de Reagan, hab¨ªa proporcionado a Saddam Hussein -su amigo y aliado, en aquellos a?os- los medios para fabricar armas qu¨ªmicas y biol¨®gicas, adem¨¢s de financiaci¨®n y armas convencionales. Miles de soldados iran¨ªes y civiles kurdos fueron masacrados gracias a tan generosa donaci¨®n. La leyenda de las armas de destrucci¨®n masiva se construy¨® sobre s¨®lidos datos hist¨®ricos bien conocidos por los asesinos que todav¨ªa andan sueltos y que aparecen en la foto de las Azores.
Hola, amigos. Como en algunas de las par¨¢bolas del Evangelio, la mentira es cuesti¨®n de porcentajes. Me refiero a las mentiras de los pol¨ªticos. Sabemos que todos mienten, porque la mentira es el caldo de cultivo de la pol¨ªtica: si no mintieran los pol¨ªticos, ?que pocos votos obtendr¨ªan! Pero vuelvo a los porcentajes: se puede mentir un 5%, o, bueno, hasta un 10%, pongamos. Pero tanto tanto... Lo del Evangelio va porque Jes¨²s, cuando habla de cosechas o de intereses obtenidos con el buen negocio, siempre, como buen jud¨ªo, supone diversas alternativas como resultado de la acci¨®n econ¨®mica: tierras que dan el treinta, otras el sesenta, otras hasta el ciento por ciento. Pero es que AZNAR, ZAPATERO y RAJOY mintieron m¨¢s de la cuenta. Y lo siguen haciendo. Y nos tratan a todos como a est¨²pidos. Y resulta que no, que los espa?oles no somos tontos, que sabemos que en todo este episodio de los papeles de B?RCENAS, las cuentas salen, las cuentas son verdaderas, corresponden a pagos en sobre y sin sobre, a los pol¨ªticos, de ¨¦stos a sus favorerecedores y vuelta a empezar. En una rosca sin fin, que revent¨® y que los dej¨® a todos con el culo al aire. Pero el poder es para eso: defenderse de la verdad, defenderse de la justicia, seguir tapando y mintiendo mientras se pueda. Hasta que el juez RUZ hable y hable fuerte, y diga lo que tiene que decir sobre las trampas, marrullas y negociados del PP, desde el se?or RAJOY hasta el ¨²ltimo de los untados del PP. Seguiremos esperando, "sin esperanza, con convencimiento", como dec¨ªa ?ngel Gonz¨¢lez.
Fue la guerra de Irak, para Espa?a y para el mundo entero, eso que se dice en derecho: una reformatio in peius. Y lo fue a sabiendas de que lo ser¨ªa. No se embarca nadie en una empresa asesina como esta y espera sacar r¨¦ditos, como los que vend¨ªa el benjam¨ªn de los Bush a los espa?oles. Todav¨ªa lo recuerdo: van a obtener beneficios impensables. Como si los beneficios por s¨ª mismos justificaran la masacre que se desat¨® y que todav¨ªa no se ha conseguido resta?ar.
Hola, amigos. Saludos. Hoy solo quiero repetir mi grito de combate y ¨¢nimo:??NIMO, SE?OR JUEZ, FUENTEOVEJUNA EST? CON USTED! (Y el plural ya no hace falta de momento, porque es el juez RUZ el que se qued¨® con la causa). Dios quiera que haga brillar la justicia en este crudo, denso, congelado y horrible invierno que nos tiene padeciendo el PARTIDO POPULAR, con sus RAJOYES, COSPEDALES Y FLORIANOS.
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Escribe en EL PA?S columnas y an¨¢lisis sobre pol¨ªtica, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ¡®El a?o de la Revoluci¨®n' (Taurus), sobre las revueltas ¨¢rabes, ¡®La gran verg¨¹enza. Ascenso y ca¨ªda del mito de Jordi Pujol¡¯ (Pen¨ªnsula) y un dietario pand¨¦mico y confinado con el t¨ªtulo de ¡®Les ciutats interiors¡¯ (Galaxia Gutemberg).