¡°La mejor soluci¨®n para Reino Unido es quedarnos en una UE reformada¡±
El l¨ªder conservador explica su posici¨®n sobre Europa en una entrevista concedida en v¨ªspera de una gira que le llevar¨¢ a Madrid, Par¨ªs y Alemania
El primer ministro brit¨¢nico, David Cameron, emprende esta semana una gira europea que le lleva a Madrid, Par¨ªs y Berl¨ªn. Con este motivo, el inquilino del n¨²mero 10 de Downing Street se reuni¨® con varios periodistas europeos para explicar, en particular, su discurso del 23 de enero, en el que prometi¨® un refer¨¦ndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Uni¨®n Europea.
Pregunta. En caso de una victoria del s¨ª en el refer¨¦ndum que tiene previsto organizar sobre la salida de la UE, ?estar¨ªa dispuesto a retirarse de la Uni¨®n?
Respuesta. No me gustar¨ªa. Lo que me gustar¨ªa es conseguir una reforma de la Uni¨®n Europea. Ese es el sentido de mi discurso. La UE est¨¢ madura para sufrir una reforma. Nos encontramos en una carrera planetaria en la que debemos competir con pa¨ªses como China, India, Indonesia, Malasia. Es necesaria una Europa m¨¢s abierta, m¨¢s competitiva, m¨¢s flexible. Ese es nuestro objetivo.
En mi opini¨®n, hay reformas que se pueden hacer. Algunas ya se han emprendido. Por primera vez desde la fundaci¨®n de la UE, tenemos una Comisi¨®n Europea que se ha comprometido a retirar propuestas, promover la desregulaci¨®n, favorecer la reducci¨®n de los costes empresariales, sobre todo de las PYMES. Y por primera vez en la historia de Europa, el presupuesto comunitario va a disminuir en vez de aumentar.
P. ?Desea permanecer en la UE pese a que el Partido Conservador y la opini¨®n p¨²blica brit¨¢nica son partidarios de lo contrario?
R. La mejor soluci¨®n para Gran Breta?a es quedarse en una Uni¨®n Europea reformada. Pero hay que ser consciente de que el apoyo a nuestra adhesi¨®n a la UE y a los cambios que ha sufrido esta ¨²ltima es escaso. Los pol¨ªticos dignos de tal nombre deben reconocerlo y no ocultar los problemas.
P. ?No cree que su exigencia de que se renegocien los tratados, aunque sea de forma limitada, es peligrosa e imprevisible?
R. Cuando tom¨¦ posesi¨®n como primer ministro, hace tres a?os, alguien me dijo: "No se preocupe, la ¨²nica certeza es que los tratados no sufrir¨¢n modificaciones". Pues bien, desde entonces ha habido tres.
Claro que yo vet¨¦ una de esas tres y por eso se elabor¨® un tratado aparte. Pero las otras dos modificaciones, las de la adhesi¨®n de Croacia y el mecanismo europeo de estabilidad, s¨ª se aprobaron. Y por supuesto que el Reino Unido, como buen europeo, adopt¨® los dos. Estoy seguro de que en uno u otro momento habr¨¢ modificaciones en los tratados, aunque solo sea para remediar los problemas de la eurozona.
P. ?Puede dar ejemplos de alg¨²n poder que le gustar¨ªa recuperar?
R. No quiero presentar una lista. Creo que habr¨ªa que mantener una discusi¨®n a escala europea sobre la manera de flexibilizar la UE y para dejar claro que es posible devolver poderes a los Estados y viceversa.
P. ?Le ha sorprendido la reacci¨®n de Par¨ªs y Berl¨ªn, que opinan que la revisi¨®n exigida por los brit¨¢nicos del reparto de poderes entre Londres y Bruselas es un asunto interno del Reino Unido?
R. No, en absoluto. ?Que si tal o cual competencia la puede ejercer mejor el Reino Unido o la Uni¨®n Europea? Desde luego que es una preocupaci¨®n brit¨¢nica, puesto que somos nosotros quienes nos preguntamos, por ejemplo, si la pol¨ªtica com¨²n de pesca favorece nuestros intereses o no. No es algo que se consulte con los dem¨¢s pa¨ªses de la UE. Es una iniciativa que debe redundar en nuestro propio beneficio.
P. Da la impresi¨®n de que lo ¨²nico que les interesa a los brit¨¢nicos es el mercado ¨²nico...
R. Para el Reino Unido, el mercado ¨²nico es el apartado m¨¢s importante de la pol¨ªtica europea. Somos una naci¨®n de comerciantes. El continente es nuestro principal mercado de exportaci¨®n. El mercado ¨²nico ha sido un gran ¨¦xito europeo y el Reino Unido ha desempe?ado un papel crucial en ese ¨¦xito. Pero es una obra a¨²n no terminada. Debemos culminarla en los ¨¢mbitos de la energ¨ªa, las transacciones digitales y los servicios.
Es err¨®neo afirmar que a Gran Breta?a solo le interesa el mercado ¨²nico. Somos una gran potencia europea, un actor europeo de primera fila. Pero, al mismo tiempo, creemos que la UE, a veces, ha querido abarcar en exceso con sus directivas, sus intervenciones y sus injerencias. Y eso debe cambiar.
P. ?No est¨¢ usted alimentando la xenofobia al se?alar a los rumanos y los b¨²lgaros, miembros de pleno derecho de la UE, que estar¨¢n autorizados a establecerse en el Reino Unido a partir del 1 de enero de 2014?
R. Nosotros hemos creado, y hemos hecho bien, controles temporales para las personas originarias de esos nuevos Estados miembros. Cuando queden abolidos tendr¨¢n derecho a instalarse y trabajar en el Reino Unido. Los brit¨¢nicos ejercen ese derecho en Espa?a, Portugal, Francia, Italia o Chipre. Y hay otra cuesti¨®n: ?tenemos un sistema de derechos sociales que nos funciona bien como pa¨ªs, o tenemos un sistema que es uno de los factores de atracci¨®n para los extranjeros? Esta es una pregunta perfectamente leg¨ªtima.
P. Una de las prioridades de la presidencia brit¨¢nica del G-8 es la lucha contra la evasi¨®n fiscal, tema de actualidad en Francia...
R. Eso tengo entendido.
P. Pero al mismo tiempo el Reino Unido posee la mayor red de para¨ªsos fiscales del mundo. ?No nos encontramos ante un doble rasero?
R. Ni mucho menos. El Reino Unido ha incluido este tema en el orden del d¨ªa del G-8. Creemos que existe una serie de principios de transparencia e intercambio de informaciones que podemos fomentar en el G-8 y el G-20 al mismo tiempo que animamos a nuestros territorios de ultramar y a otros lugares de los que somos responsables a que se unan a esa red. Es un buen prop¨®sito.
P. A prop¨®sito de Siria, ?comprende usted los temores de que las armas entregadas a los rebeldes puedan caer en manos de yihadistas?
R. Comprendo muy bien esa preocupaci¨®n, pero la estrategia desarrollada hasta ahora no ha servido de nada. Han muerto ya entre 60.000 y 70.000 personas. El r¨¦gimen est¨¢ armado hasta los dientes y utiliza esas armas, algunas incluso ilegales, de forma masiva contra su propio pueblo. Fran?ois Hollande y yo tenemos raz¨®n al plantear la pregunta: ?es justo mantener este embargo de armas que impide que el pueblo sirio se defienda adecuadamente?
Entrevista de Carlos Fresneda (El Mundo), Iwona Kadluczka, (Gazeta Wyborcza), Stefan Kornelius (S¨¹ddeutsche Zeitung), Leonardo Maisano (Il Sole 24 Ore) y Marc Roche (Le Monde)
Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia
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